Los icónicos boletos de papel con cinta magnética y la leyenda “un viaje” se volvieron en un aspecto distintivo del Metro de la Ciudad de México, tal fue su relevancia que a lo largo de su historia se han lanzado varias ediciones especiales y estos cupones de cinco centímetros de largo han servido como lienzo de artistas mexicanos y como portada de eventos conmemorativos.
Ciudad de México, 2 de septiembre (SinEmbargo).- Es el 8 de noviembre de 2021 y en la estación del Metro Chilpancingo de la Línea 9 del Sistema de Transporte Colectivo se observan largas filas tanto en las taquillas, así como en los torniquetes que permiten el paso a los andenes, el problema: los accesos se han renovado y los boletos de cinta magnética que se utilizaban para pasar ya no son útiles y desde ahora solo se permite el acceso a través de la tarjeta de movilidad de la Ciudad de México o de tickets con código QR.
La duda se apodera de decenas de personas que llegan cada minuto a la estación y que no cuentan con una tarjeta de movilidad, pues los boletos con los que cuentan no pueden ser usados aquí, en el metro Chilpancingo, la primera estación en implementar esta medida piloto, y ahora deberán hacer fila en la taquilla o en las máquinas de recarga para comprar un ticket o un plástico.
De esta manera, las autoridades del metro comenzaban con las pruebas piloto para orientar a los usuarios a utilizar otros métodos de pago como las tarjetas de movilidad o códigos QR. Hoy, a casi dos años del inicio de este ejercicio, el Sistema de Transporte Colectivo ha anunciado que a partir de 2024 los tradicionales boletos, que fueron utilizados para acceder a la estaciones, quedarán obsoletos después de 54 años y solo se podrá ingresar con plásticos.
Los icónicos boletos de papel con cinta magnética y la leyenda “un viaje” se volvieron en un aspecto distintivo del Metro de la Ciudad de México, tal fue su relevancia que a lo largo de su historia se han lanzado varias ediciones especiales y estos cupones de cinco centímetros de largo han servido como lienzo de artistas mexicanos y como portada de eventos conmemorativos.
La transición rumbo al uso de la tarjeta de movilidad Integrada en las 195 estaciones del sistema comenzará el sábado 2 de septiembre. Todas las estaciones de las líneas 4, Santa Anita – Martín Carrera, y 6, Martín Carrera – El Rosario, permitirán el acceso solamente con el plástico. Además, se realizará la sustitución de mil 548 torniquetes y 870 validadores en 70 estaciones.
Guillermo Calderón Aguilera, director general del Metro detalló que actualmente el 70 por ciento de los viajes se validan a través de la tarjeta, en tanto el 30 por ciento restante se realiza con boleto magnético.
“Para el Metro, retirar de circulación el boleto magnético representa reducir costos por mejor tecnología, como equipos obsoletos y fuera del mercado, que hacen difícil la manufactura y refaccionamiento; además, evitar la venta ilegal de boletos”, indicó el sistema en redes sociales.
El titular del Metro mencionó que todas las taquillas de la red seguirán en funcionamiento como puntos de recarga de tarjetas e indicó que para evitar contratiempos a los usuarios, el sistema ya inició una campaña de difusión mediante la colocación de lonas informativas en estaciones y carteles en taquillas y andenes, de las Líneas 4 y 6.
Con la implementación de esta medida, ya son tres líneas del Metro que no usan boletos magnéticos o tradicionales. La Línea 12 fue la primera en aceptar pago a través de la tarjeta de Movilidad Integrada.
UN VIAJE POR LA HISTORIA
Desde su inauguración en 1969, el Metro de la Ciudad de México ha utilizado el boleto de papel con cinta magnética como medio de acceso al sistema. A lo largo de su historia, el sistema de transporte colectivo ha habilitado diversas formas de pago, sin embargo, a partir del próximo año los tradicionales cupones quedarán obsoletos.
Durante sus primeros 17 años de operaciones, de 1969 a 1986, el Metro puso a la venta planillas que contenían cinco boletos, los cuales eran de un color diferente a los ordinarios, con el objetivo de diferenciar su costo. Más tarde, de 1986 a 1995, el sistema puso a la venta el abono de transporte, el cual era un boleto especial único que permitía al usuario acceder al servicio cuantas veces fuera necesario por el mismo costo.
A partir de 1996, el Metro puso a la venta otro abono de transporte y de ese año a 1998, volvió a poner en circulación las planillas, las cuales tenían 25 boletos cada una.
Fue en junio de 2006 que el Metro, con la idea de ir dejando de lado el uso del boleto, puso a la venta 12 mil tarjetas recargables, con las cuales los usuarios podían acceder a todas las estaciones por medio de un sistema de prepago y sin costo del plástico, cada tarjeta permitía recargas hasta 300 pesos, lo equivalente a 150 viajes. En septiembre de ese mismo año, 5 mil 500 tarjetas más fueron puestas en venta y se modificó el monto máximo de crédito a 200 pesos.
Para 2008, salieron al mercado un millón de tarjetas con un costo de 10 pesos cada una, las cuales incluían un viaje de recarga. En el mes de octubre de ese año, se comercializaron 500 mil tarjetas más con el mismo corto y la opción de recarga mínima de un viaje. Además, se incrementó el precio por viaje, tanto en tarjeta como en boleto unitario a 3 pesos.
El 17 de octubre de 2012 el Gobierno de la Ciudad de México implementó una tarjeta única sin contacto para el transporte capitalino, emitiendo así la Tarjeta del Distrito Federal (TDF) con una primera edición de 2 millones 900 mil plásticos. Dos años más tarde, en octubre de 2014, se emitió una nueva tarjeta homologada para todos los transportes, incluyendo la compatibilidad con el sistema EcoBici.
Ante la necesidad de crear un sistema pago seguro y que abarcara todos los sistemas de transporte de la capital, en 2018 se inició una nueva transición de este sistema y un año más tarde, el Gobierno capitalino presentó la llamada Tarjeta de Movilidad Integrada, la cual tiene un diseño en el que colaboró Lance Wyman, creador del logotipo del Metro de la Ciudad de México.
Con la Tarjeta de Movilidad Integrada los usuarios pueden ingresar al Metro, Metrobús, Cablebús, RTP, Trolebús, Tren Ligero y Ecobici.
