“Simplemente no habrá gas ruso en Europa”, advirtió el Jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia ante las constantes amenazas por parte de la Unión Europea y el G7 en limitar el precio del crudo ruso.
BERLÍN/MADRID, 2 de septiembre (AP/EuropaPress).— Los ministros de Finanzas de las potencias industriales congregadas en el Grupo de los Siete acordaron el viernes poner en marcha un sistema destinado a limitar los ingresos de Rusia por la venta de petróleo, una idea que los mandatarios de esas naciones prometieronestudiar en su cumbre de junio.
El objetivo es reducir los ingresos de Rusia y, con ello, la capacidad para financiar su guerra en Ucrania, al tiempo que se limita el impacto de la guerra en los precios globales de los energéticos, cuya subida ha alimentado las tasas de inflación en todo el mundo.
En una declaración publicada por Alemania, que preside el G7 este año, los ministros dijeron haber confirmado su “intención política conjunta de finalizar y aplicar una prohibición completa de los servicios que permiten el transporte marítimo de petróleo crudo y productos petrolíferos de origen ruso a nivel mundial”.
Today the @G7 finance ministers issued a joint statement on the extension to the #G7 of the services ban related to the export of Russian oil and petroleum products in combination with a price cap. ➡️ https://t.co/GuqoUea8hb #Sanctions
— Bundesministerium der Finanzen (@BMF_Bund) September 2, 2022
La prestación de esos servicios “sólo se permitiría si el petróleo y los productos petrolíferos se adquieren a un precio (‘tope de precio’) determinado por la amplia coalición de países que se han adherido al tope de precios y lo aplican”, añadieron.
La declaración no dio ninguna cifra de un posible límite de precios y tampoco especificó cuándo pretende el G7 finalizar el plan. “Invitamos a todos los países a hacer aportaciones al diseño del tope de precios y a la aplicación de esta importante medida”, agregó. Pidió una “amplia coalición para maximizar la eficacia”.
Durante su cumbre en junio en Alemania, los líderes del G7 —Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia y Japón— acordaron estudiar la viabilidad de medidas para prohibir las importaciones de petróleo ruso por encima de un precio determinado.
Por su parte, Rusia ha amenazado con cortar el suministro de gas importado a Europa si la Unión Europea decide limitar su precio tras unas palabras la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, en las que se ha mostrado a favor de esta medida
“Será como con el petróleo. Simplemente no habrá gas ruso en Europa”, ha asegurado el jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia, Dimitri Medvedev, en su perfil de Telegram, según ha recogido la agencia estatal de noticias rusa TASS.
Estos comentarios se han producido después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, haya afirmado que cree “firmemente” que “es hora de aplicar un techo al precio del gas ruso exportado a Europa”.
At EU level, we diversify sources, save energy and store it. Our gas storage is already filled at 80%.
But to cut our dependence on Russian fossil fuels, we need renewables.
The commitments taken today would already deliver 1/3 of our 2030 target for offshore wind in the EU. pic.twitter.com/4JBZLPbHXU
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) August 30, 2022
Durante un evento de su partido en Alemania, la CDU, la líder del Ejecutivo europeo ha señalado directamente al Presidente ruso, Vladimir Putin, al que ha acusado de estar detrás de “manipulaciones” que provocan “severas alteraciones” en el mercado eléctrico.
Entre las herramientas para frenar la escalada de precios de la luz, ha apuntado al diseño del mercado eléctrico y ha puesto como ejemplo la opción de “desacoplar el precio del gas del coste de la electricidad”, aparte de apostar por “inversiones masivas” en energías renovables.
Todas estas medidas estarán sobre la mesa en la reunión de emergencia de ministros de Energía europeos del próximo 9 de septiembre, que debatirán formas de intervenir el mercado para frenar el auge de los precios.