Ya que una base rítmica muy parecida a la de “Joyful Noise” se escucha en 45 por ciento de “Dark Horse”, Kahn dijo que sus clientes tenían derecho a 45 por ciento de las ganancias totales del álbum de Perry “Prism”, en el cual aparece la canción.
Los Angeles, 2 de agosto (AP).- Un jurado decidirá cuánto vale el mega éxito de Katy Perry de 2013 “Dark Horse” y cuánto de ese dinero deberá ser para un rapero cristiano cuya canción copió la artista pop de acuerdo con las conclusiones del jurado.
Los abogados de ambos bandos le dieron al jurado cifras muy diferentes durante los argumentos finales del jueves.
Los abogados del rapero Marcus Gray y los coautores de la canción de 2009 “Joyful Noise” dijeron al jurado que deberían recibir unos 20 millones de la canción de Perry, la cual generó unos 41 millones. Los abogados defensores afirman que deberían ser 360 mil dólares.
“Esos acusados han hecho millones y millones de dólares por su abuso a los derechos de autor del demandante”, dijo al jurado el abogado de Gray, Michael A. Kahn. “Ellos buscan una fracción justa de las ganancias de los acusados. No todas las ganancias”.
Ambas partes estuvieron de acuerdo en que Perry tuvo una ganancia de 2.4 millones de dólares, lo cual sería el máximo que tendría que pagar personalmente.
La estrella pop testificó al comienzo del juicio pero no ha regresado a la corte desde entonces.
Ya que una base rítmica muy parecida a la de “Joyful Noise” se escucha en 45 por ciento de “Dark Horse”, Kahn dijo que sus clientes tenían derecho a 45 por ciento de las ganancias totales del álbum de Perry “Prism”, en el cual aparece la canción.
La defensa recomienda dividir el dinero que se otorgue entre el número de canciones del álbum.
“Un CD es un CD, no lo puedes dividir en piezas”, dijo. “Cada álbum contenía una canción que infringía la ley y no cualquier canción, la canción más popular del álbum”.
Ambas partes están de acuerdo en que las ventas y el streaming de “Dark Horse” deberían estar en consideración.
Los abogados de Perry y los otros acusados que incluyen a Capitol Records y el productor Dr. Luke, afirman que los millones que busca Gray están basados en cifras absurdas.
“No buscan algo justo”, dijo al jurado el abogado defensor Aaron M. Wais. “Quieren obtener tanto dinero como sea posible”.
Wais afirmó que, basado en el testimonio de expertos, la parte en disputa vale apenas cinco por ciento de las ganancias de “Dark Horse”.
Afirmó que el principal motor de las ganancias de la canción no era esa parte de la pieza, sino la fama de Perry, quien ya era una gran estrella cuando la grabó.
“La razón por la que la gente compra un álbum de Katy Perry, o compra una canción de Katy Perry es porque se trata de Katy Perry”, dijo Wais al jurado. “Si la reemplazan con un artista anónimo, ¿realmente creen que se venderá tan bien?”.
La defensa también sustrajo gastos de casi 11 millones de dólares que Capitol Records invirtió para promover y crear la canción.
Los acusados señalaron que los gastos revelados durante el juicio incluyen casi 2 mil dólares por cubos de hielo con linternas integradas, y más de 13 mil dólares para una estilista por una noche en los MTV Video Music Awards.
“A nuestro cliente no deberían pedirle asumir esos costos”, dijo Kahn.
Wais respondió que más allá de esos detalles el dinero fue usado legítimamente y debe tomarse en cuenta.
El lunes al final de la primera fase del juicio, el jurado sorprendió a muchos al concluir que los seis compositores de “Dark Horse” eran responsables de copiar “Joyful Noise”, aunque sólo una sección instrumental estaba en disputa. Esto incluye a Perry, quien únicamente coescribió la canción, y Juicy J, quien proporcionó la parte del rap.
Los guionistas testificaron que nunca habían escuchado a Gray, quien usa el nombre artístico de Flame, ni “Joyful Noise”, antes de que él y los coautores Emanuel Lambert y Chike Ojukwu demandaran hace cinco años.
Pero Gray y su abogado tuvieron que demostrar únicamente que había grandes posibilidades de que la hubieran escuchado.
En conjunto los coautores ganaron unos 10 millones de dólares con la canción sin contar gastos y Capitol Records unos 31 millones, lo que suma la cantidad de 41 millones presentada por los demandantes.