El recurso interpuesto por Francisco Arturo Durazo Garza, hijo de "El Negro", fue admitido a trámite por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y turnado al Ministro José Fernando Franco González Salas.
Ciudad de México, 2 de julio (SinEmbargo).- El hijo de Arturo Durazo Moreno “El Negro”, presentó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) un recurso de reclamación para recuperar "El Partenón".
La mansión, que simula al popular edificio ubicado en Grecia, fue construida en la costa guerrerense por Durazo Moreno a finales de la década de los 70. Después de la detención de "El Negro", la casa fue resguardada por la federación y en 1989 el estado de Guerrero consiguió expropiarla a su favor.
El recurso de reclamación fue turnado al Ministro José Fernando Franco González Salas. El hijo de “El Negro” Durazo espera que la SCJN revierta la medida de expropiación que pesa sobre el inmueble, concedida en 1989 a favor del Gobierno de Guerrero.
“El Partenón” es el nombre que recibió la casa de playa, en Zihuatanejo, Guerrero, de Arturo Durazo Moreno, "El Negro", quien era el jefe de la desaparecida Dirección General de Policía y Tránsito de la ciudad de México en las décadas de los 70 y 80 del siglo pasado.
De acuerdo con diversas fuentes, Durazo fue amigo de primaria de los ex presidentes Luis Echeverría y José López Portillo, y fue justo con este último con quien se encumbró en el poder, aunque desde los años 60 y 70 trabajaba como agente de la Dirección Federal de Seguridad.
En 1976, cuando su amigo López Portillo se convirtió en Presidente de México y lo colocó al frente de la Dirección General de Policía y Tránsito, Durazo se convirtió en el "enemigo público de México", pues de acuerdo con diversas denuncias que posteriormente lo llevaron a la cárcel, en menos de tres años adquirió –con prácticas de corrupción, extorsión, robo y asociación delictuosa con líderes de cárteles del narcotráfico y la mafia en México– lujosas mansiones, joyas, autos, armas y un estilo de vida sin límites, donde destacó también su adicción al alcohol y a la cocaína.
Fue con la llegada del Presidente Miguel de la Madrid Hurtado, en 1982, cuando "El Negro" comenzó a ser investigado y huyó del país, pero en 1984 fue detenido en Puerto Rico y extraditado a México.
Purgó su condena durante ocho años y, luego, fue liberado en 1992 debido a su estado de salud delicado y por buena conducta. "El Negro" radicó durante sus últimos años en Acapulco, Guerrero, y falleció el 5 de agosto del 2000, debido a un paro cardiaco, debido a un cáncer de colon terminal.