Ganar la gubernatura de Nuevo León implica controlar la entidad más rica del norte del país, la de menor pobreza a nivel nacional y la segunda zona metropolitana más grande de México, la de Monterrey.
Por Pedro Pablo Cortés
México, 2 de mayo (EFE).- La fuerte guerra electoral de México se refleja en el norteño estado de Nuevo León, motor industrial del país, que se disputa entre el interés del Presidente Andrés Manuel López Obrador y polémicos candidatos acusados de nexos con el narcotráfico y sectas sexuales.
El interés crece porque ganar la gubernatura en este estado considerado “la joya de la corona” en estos comicios implica controlar la entidad más rica del norte del país, la de menor pobreza a nivel nacional y la segunda zona metropolitana más grande de México, la de Monterrey, con más de 5.3 millones de habitantes.
“Gobernar el estado implica acceso a ciertos recursos, a ciertos grupos de poder que están instalados en Nuevo León y que mueven inversiones en todo el país, no solo en el estado”, explica este domingo a Efe Khublai Villafuerte, jefe de Oficina de la consultora Riskop, basada en Monterrey.
CANDIDATOS POLÉMICOS
Analistas coinciden en que la carrera por el estado será la más competida de las elecciones más grandes de la historia de México el 6 de junio, cuando casi 93.5 millones están llamados a votar por los 500 diputados federales, 15 de 32 gobernadores estatales, 30 Congresos locales y mil 900 Ayuntamientos.
La atención aumenta porque los principales candidatos protagonizan las mayores polémicas nacionales.
Clara Luz Flores, candidata del partido de López Obrador, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), era la favorita hasta marzo, cuando su rival Adrián de la Garza reveló un video de ella con el líder de la secta NXIVM, Keith Raniere, condenado a 120 años de cárcel en Estados Unidos por delitos sexuales.
De la Garza, del exhegemónico Partido Revolucionario Institucional (PRI), está señalado por un informe de la Policía española de vínculos con el presunto operador del Cártel de los Zetas en Europa, Juan Manuel “el Mono” Muñoz, cuando fue procurador de Nuevo León entre 2011 y 2015.
El priísta también difundió un video de su otro rival, el Senador Samuel García, del liberal Movimiento Ciudadano (MC), que relaciona a su familia con Gilberto García Mena, líder del Cártel del Golfo.
Los cambios drásticos en las encuestas y la “guerra sucia” arrecian en un estado donde no hay un grupo dominante en la política y con un ecosistema propio de medios locales, comenta Villafuerte.
“El electorado es muy crítico, hay una sociedad civil muy participativa y sobre todo muy bien organizada. Incluso los grupos empresariales tienen un rol importante en los temas que piden posicionar en la agenda”, indica el consultor.
EL INTERÉS DEL PRESIDENTE
La controversia nacional se intensificó cuando la Senadora María Merced González reveló por error en un chat del Congreso que “al Presidente le interesa mucho” la elección de Nuevo León.
Antes, López Obrador acusó al periódico local El Norte de “imponer” a sus candidatos en el estado.
“Por eso le ha ido muy mal, lo lamento, al pueblo de Nuevo León, porque han tenido puro gobernador mediocre y ladrón”, expresó en su rueda de prensa del 9 de abril.
Aun así, a diferencia de otras entidades, Villafuerte considera que López Obrador no es el tema central de la campaña, por lo que “es una prueba para saber si Morena realmente tiene la capacidad de ganar elecciones” rumbo a las presidenciales de 2021.
UN GOBERNADOR BRONCO
Nuevo León hizo historia en 2015 al elegir al primer y único gobernador independiente de México, Jaime Rodríguez “el Bronco”, y rechazar las opciones tradicionales, menciona Juan Carlos Montero, profesor de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tec de Monterrey.
Pero el Bronco decepcionó al electorado al descuidar el estado para competir en las elecciones presidenciales de 2018, cuando quedó en cuarto lugar y causó polémica nacional con propuestas como “mochar (cortar) las manos” de los corruptos.
Aunque es impopular, al no pertenecer a ningún partido, la campaña se ha convertido en un “todos contra todos”.
“El Bronco se ha mantenido muy apartado, a diferencia de un partido político que podría ser atacado por los logros o fallas del Gobierno, justo su figura independiente no se está convirtiendo en un factor” para los comicios, indica Montero.
POLÍTICA “INFLUENCER”
Ahora las encuestas apuntan al ascenso de otro político controversial, el Senador Samuel García, quien ha aparecido en videos en los que habla de lo “difícil” que fue su infancia porque su papá lo “obligaba” a jugar golf o le pide a su pareja, Mariana Rodríguez, que “no enseñe pierna”.
Pero el profesor Montero expone que García sube porque “representa una opción” distinta, por su juventud y por el papel de su esposa, una “influencer” con más de 1.5 millones de seguidores en Instagram.
“Ella ha jugado un papel tan relevante como él o quizá más relevante que él porque al ser ella una influencia muy querida, muy apreciada en Nuevo León, ha logrado impactar”, detalla.
Si gana García, podría convertirse en una de las caras más visible de la oposición, pues sus principales propuestas son renegociar el pacto fiscal para demandar más recursos de la Federación y crear una Secretaría de Energía estatal para combatir la política energética de López Obrador.
