Sin embargo, el activista LGBTIQ+ Andreu, quien también fue detenido después de manifestarse, sí fue vinculado a proceso.
Mérida, Yucatán, 2 de abril (SinEmbargo).- La defensora de derechos trans yucateca Dafne Aguilar, mejor conocida como “Muñeca”, fue absuelta de los cargos de desobediencia y resistencia de particulares, y ataques peligrosos a servidores públicos, que le fueron imputados tras ser arrestada después de participar en una protesta en solidaridad con la lucha del pueblo maya de Sitilpech contra las megagranjas porcícolas. Sin embargo, el activista LGBTIQ+ Andreu “N”, quien también fue detenido, sí fue vinculado a proceso.
La Jueza Diana Garrido Colonia dictó esa resolución tras escuchar, en una audiencia de siete horas con dos recesos, los alegatos de los abogados defensores, David Dorantes Cabrera y Mateo González Berzunza, y los argumentos de la Fiscalía General del Estado (FGE), a la que calificó de “omisa” por no aportar pruebas suficientes para respaldar sus acusaciones. También consideró que esa dependencia “interpretó erradamente la Ley” al formular los cargos contra las dos personas.
LOS ARGUMENTOS DE LA FISCALÍA PARA REALIZAR LAS DETENCIONES ARBITRARIAS
La audiencia se realizó el pasado jueves 30 de marzo en el Centro de Justicia Oral de Mérida (CEJOM), e inició poco después de las 9:00 horas. En la misma, la Fiscalía presentó como prueba el Informe Policial Homologado (IPH), es decir, los reportes de los propios oficiales que realizaron las detenciones.
Según dicho informe, los policías E.A.H.E., y D.R.C.C., y la agente M.A.R.S., acudieron con chalecos policiales, gorras y porta credenciales al Centro Histórico tras la protesta en respuesta a un “Código Rojo”, activado por la manifestación del pueblo maya para “salvaguardar a la población y la integridad del patrimonio de las personas”, ya que personas que asistieron emitieron amenazas y tenían pintura.
De acuerdo con el reporte, hacia las 21:05 horas estaban haciendo un rondín por la calle 52 con 53 y 55, cuando “identificaron a dos personas gritando consignas de quemar edificios públicos, desprestigiando a la autoridad frente a la ciudadanía, amenazando con la quema del patrimonio y agrediendo a las personas que estaban en el lugar por no unírseles”. Ambas “tenían dos botes de aerosol para hacer pintas y quemar edificios, porque son inflamables”.
Por ello, se acercaron a dichas personas, se identificaron y ambas les agredieron verbalmente. De acuerdo con la declaración del oficial E., Andreu intentó agredirlo con un cuchillo artesanal que sacó de sus ropas. El elemento lo amagó e hizo que tirara el instrumento, y al ver eso “Muñeca” utilizó los botes “que serían utilizados para prender fuego”, a manera de proyectiles contra la agente M. Por ello, arrestan a ambas personas hacia las 21:35. Y fueron puestas a disposición de la autoridad hasta las 24 hrs.
En respuesta, el abogado González Berzunza presentó los testimonios de dos personas que se encontraban en el momento de los hechos: una pariente y una amiga de Andreu. Ellas señalaron que a las 20:40 horas del miércoles 22 de marzo llegaron a un bar ubicado en la calle 52 con 53, donde se iban a reunir con “Muñeca” y Andreu. A él lo vieron en la puerta, cuando un sujeto vestido de civil le pidió regresar a su mesa, donde estaba “Muñeca”.
Al hacerlo, ingresaron otras cuatro personas que le dijeron de manera grosera que tenían que irse con ellas. Andreu preguntó la razón, pero entraron otros elementos y lo obligaron, tanto a él como a “Muñeca”, a salir. Les colocaron esposas y subieron a un Versa gris con placas ZCL-030-C, y a una camioneta Ranger blanca, con placas YS-0305-C (los mismos en los que trasladaron a Sofía y Sebastián, otros dos manifestantes que fueron arrestados ilegalmente).
Andreu empezó a preguntar por qué hacían eso, ya que no había hecho nada y lo estaban lastimando, pero los elementos le gritaron que se callara y lo golpearon en el estómago. La Fiscalía pidió no aceptar dichos testimonios, ya que la hora descrita por las personas entrevistadas no coincidía con la del Registro Nacional de Detenciones, y no se brindaron elementos descriptivos para identificar a las personas que arrestaron al joven activista. Además, aseguró que hay registro del arma blanca. La Jueza le dio la razón a la FGE.
Por su parte, el asesor jurídico Dorantes Cabrera pidió que no se tomaran en cuenta dos latas de pintura en aerosol como elementos de prueba, ya que sólo a uno de ellos le realizaron el peritaje químico adecuado, y no se notificó con anticipación pertinente a la defensa sobre esa diligencia. Recalcó que no se recabaron entrevistas a las y los transeúntes que presuntamente fueron agredidos por “Muñeca” y Andreu en la vía pública.
Además, de acuerdo con entrevistas y 11 fotografías capturadas en el lugar de los hechos, los negocios o edificios aledaños no presentan grafitis ni fueron dañados de alguna manera, y en el IPH no consta que las activistas estuvieran haciendo pintas al momento de la detención, solamente estaban gritando consignas, lo cual corresponde al ejercicio de su derecho a la libertad de expresión y por lo tanto, los elementos hicieron uso excesivo e “irracional” de la fuerza.
Por otro lado, en ningún momento se explicó cuáles fueron las órdenes emitidas por los elementos que “Muñeca” y Andreu no acataron, por lo que no se justifica que se les haya imputado el delito de “desobediencia y resistencia a particulares”.
Dorantes Cabrera recalcó que no existen registros de que ambas personas portaran cerillos o algún otro artículo para utilizar los aerosoles con la finalidad de quemar objetos o edificios. “Si yo quiero quemar algo, necesito generar fuego. Y no había elementos para iniciarlo, como cerillos o encendedores. Y el hecho de que haya un objeto inflamable no necesariamente significa que sea para prender fuego”, sostuvo el abogado.
También hizo notar que si los agentes tenían chalecos policiales, sus vidas no estuvieron en riesgo. Y destacó que en el Registro Nacional de Detenciones se brindó una dirección errónea de los hechos: la calle 53 con 53 y 55. Finalmente, reiteró que el IPH tiene varias inconsistencias e irregularidades.
La Fiscalía argumentó que no se entrevistó a las y los transeúntes que fueron presuntamente agredidos, porque sólo pasaban por el lugar momentáneamente, y respecto al IPH comentó que “no hay que olvidar la buena fe de las víctimas”, es decir, de los policías. Sobre las órdenes que supuestamente no obedecieron “Muñeca” y Andreu, la representante de la FGE expuso que “obstaculizaron el Código Rojo”, e insistió en que los agentes no usaron irracionalmente la fuerza porque “estaban impidiendo que [‘Muñeca’ y Andreu], cometieran un delito”, aunque “no se dijo que ella estuviera cometiendo ilícitos”.
Sobre las inexistentes pintas en negocios y edificios aledaños al lugar de los hechos, la Fiscal dijo que “el actuar de los agentes fue impedir que se realicen esas acciones” y reconoció que ninguna de las dos personas incurrió en esos ilícitos. “No se ha afirmado que hayan pintado comercios, en la carpeta de investigación no se ha establecido porque los agentes impidieron que se cometieran esos delitos”, admitió.
Después de escuchar el debate, la Jueza Garrido Colonia desestimó los cargos de ataques peligrosos a servidores públicos, pues no se comprobó con indicios razonables que la vida de los agentes estuviera en peligro de muerte. Incluso, cuando el oficial aseguró que Andreu lo intentó atacar con un cuchillo, éste ni siquiera estuvo cerca del cuerpo del policía.
Respecto a la imputación del delito de desobediencia y resistencia a particulares, la Jueza enfatizó que la Fiscalía “interpretó erradamente” la Ley, pues el Código Rojo no era una orden que “Muñeca” y Andreu debían obedecer. Añadió que la Fiscalía fue omisa al no mencionar exactamente cuál fue la instrucción o mandato que ninguno de los dos acató.
“La presencia de los elementos sí estaba justificada por el Código Rojo, ellos pudieron haber dato un mandato y de impedir ese mandato, las acusaciones estarían justificadas. Pero dos personas sólo manifestaron su derecho a manifestarse. Distinto hubiera sido que después de decirles que no pintaran, hubieran pintado”, explicó la Jueza.
Por lo tanto, Garrido Colonia no vinculó a proceso a “Muñeca”, y ordenó se le retiraran las medidas cautelares que se le impusieron en la audiencia anterior. Sin embargo, a Andreu lo vinculó a proceso por el delito de portación de armas o herramientas prohibidas. El joven llevará el proceso en libertad.
Cabe recordar que el pasado sábado 22 de marzo, Sofía y Sebastián, los otros dos manifestantes detenidos después de participar en la marcha en solidaridad de Sitilpech, fueron liberados tras demostrarse que su arresto fue ilegal. Se desconoce si las víctimas de las detenciones arbitrarias denunciarán los hechos. Hasta ahora las autoridades estatales no han emitido posturas públicas para informar si sancionarán a las y los policías involucrados.