“La generación de los millenials se ha visto muy marcada por el desarrollo del Internet y de todo lo que ha venido con esto, ha transformado prácticamente la forma en la que vivimos los seres humanos y por supuesto que ha transformado la educación”, dijo Nicholas Aguilar, director académico y artístico de SUNLAND, a Magazine.
Ciudad de México, 2 de febrero (SinEmbargo).- La educación y los programas y planes de estudio que se imparten en las escuelas, además de las estrategias usadas por los maestros siempre son un tema que genera debate.Un aspecto que debe tomarse en cuenta es el avance de la tecnología, la innovación y sobre todo las nuevas generaciones que debido al Internet tienen en sus manos la posibilidad de acceder a un mundo de conocimientos, para el que también necesitan una guía. Entonces, ¿los llamados millenials están transformando la educación?
El primer paso es identificar qué son los millenials, y es que este es el nombre que recibe la generación de jóvenes nacidos entre 1981 y 96, este segundo dato varia e incluso algunos dicen que hasta 1999. La generación de los millenials suele estar preparada académicamente mejor a las anteriores debido al acceso a la información que han tenido, además buscan un trabajo que además de representar una ganancia económica, pueda generarles placer y experiencias, y se convierta en una herramienta para su desarrollo personal.
“La generación de los millenials se ha visto muy marcada por el desarrollo del Internet y de todo lo que ha venido con esto, ha transformado prácticamente la forma en la que vivimos los seres humanos y por supuesto que ha transformado la educación”, dijo Nicholas Aguilar, director académico y artístico de SUNLAND, a Magazine.
Entre las características de esta generación encontramos: están totalmente conectados, es decir, el smartphone es una herramienta fundamental; alta fidelidad a los productos y marcas que les gustan; buscan estar informados y preparase académicamente de la mejor manera; entre otras.
Ante esta generación, y la más reciente llamada “Z”, las instituciones educativas se encuentran ante la necesidad de transformar sus programas y herramientas de aprendizaje que vayan acorde con los alumnos que usan continuamente las nuevas tecnologías y que han decidido guiarse por sus gustos e inquietudes a la hora de elegir una carrera profesional.
En este tema es imposible no pensar en los resultados de la prueba PISA realizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en la que los estudiantes de 15 años responden preguntas de Matemáticas, Ciencias y Lectura. De acuerdo con los resultados presentados el año pasado el 45 por ciento no logra los aprendizajes suficientes en Lectura, mientras que en matemáticas el porcentaje sube a 56 por ciento y 47 en ciencias.
EL PAPEL DEL MAESTRO CAMBIA
“Anteriormente el maestro era un ente que lo sabía todo, prácticamente una enciclopedia, de pronto ahora el rol del maestro cambia y de ser una fuente de información se convierte en un facilitador del aprendizaje. Es imposible que un ser humano en este caso un maestro sepa más que Internet, sepa más que Google o que pueda responder todas las preguntas que hoy en día podemos resolver con una simple consulta en nuestro teléfono celular; este ha sido el principal cambio en cuestión de cómo funciona el modelo educativo para los millenials”, agregó el especialista.
Aguilar señaló que aunque el rol del profesor cambia, no deja de ser protagonista; “yo sigo siendo partidario de que se necesita ese contacto humano que la tecnología optimiza ese aprendizaje, por supuesto, pero que en realidad el aprendizaje de calidad sucede cuando hay un contacto humano, un cara a cara con una persona que te puede responder ciertas dudas, no tanto a nivel teórico de fechas o hechos fríos porque eso es fácil de consultar en cualquier sitio web, sino la aplicación de toda esta información, qué hacemos con ello, cómo vamos a resolver un problema… ahí es donde interviene el rol del maestro, que sigue siendo un rol protagónico pero más como un facilitador”.
De acuerdo con Nicholas el acceso a la información y el acceso tecnológico han roto los paradigmas anteriores de la educación, además de que la tecnología presenta nuevas herramientas de aprendizaje como las aplicaciones que se descargar en los celulares para aprender idiomas, a tocar algún instrumento músical, incluso los tutoriales en Youtube en los que hasta se encuentran videos de cómo resolver ecuaciones matemáticas; todo esto ha cambiado el proceso de cómo aprenden las personas y ha revolucionado el sistema educativo. Agregó que la tecnología es un arma de doble filo ya que el nivel de ansiedad y de estrés en adolescentes es alto y esto se atribuye a las redes sociales.
EDUCACIÓN ALTERNATIVA
“Siempre las instituciones obedecemos a sistema nacional, estamos regidos por un calendario específico, debemos cubrir asignaturas específicas, debemos cubrir ciertos contenidos dentro de las materias, así que sí estamos sujetos a eso pero yo lo que he notado que sucede en países como México y América Latina es que la educación de vanguardia o innovadora sucede al margen de todo el sistema nacional y público porque al ser un sistema educativo tan complejo en el cual trabajan miles y miles de maestros, y estudian miles y miles de alumnos, ahí hay un nivel de burocracia muy complejo que hace que todos los procesos de cambio sean muy lentos y es un sistema que está muy politizado”, contó Nicholas.
El director académico y artístico de SUNLAND resaltó que en nuestro país ocurre que las reformas cambian de acuerdo a quién se encuentre en el Gobierno y siempre postergan el salto de calidad por lo que en un contexto como este las instituciones deben respetar lo planteado y exigido a cada escuela pero se debe buscar momentos en el calendario y horario para ofrecer algo de calidad, como podría ser la capacitación de maestros. “Lo que yo he visto es que las que realmente ofrecen una educación de calidad son las que funcionan con cierta autonomía interna respetando por supuesto los lineamientos establecidos a nivel gubernamental”.
Existen escuelas como SUNLAND en el que se cursan las materias obligatorias a las que se suma un programa de algún área en específico en este caso es de artes esencias por lo que llevan materias de danza, coro, apreciación artística, etcétera; esto permite, de acuerdo con el especialista, tener un mayor involucramiento por parte de los alumnos ya que aprenden lo que les apasiona. “El arte nos obliga a conectar en un plano puramente humano y emocional y a lograr tener empatía con nuestros compañeros”, dijo.
Nicholas Aguilar resaltó la importancia de la “educación alternativa” en la que se encuentran modelos que trabajan con tecnología, emprendimiento, responsabilidad social o con el medio ambiente, o el arte. “Yo pienso que en el mundo actual se necesitan este tipo de programas alternativos justo para brindar esa personalización del aprendizaje”.