Ha pasado ya un año de la difícil crisis de agua que tuvimos en Nuevo León en el año 2022 y aunque a final del año nos vimos favorecidos con abundantes lluvias y con la reciente inauguración de la primera etapa del acueducto El Cuchillo, todos pensamos que ya habíamos dejado esta pesadilla detrás.
Desgraciadamente, este año 2023 ha superado todos los años anteriores en calor, las presas están casi vacías y las lluvias han brillado por su ausencia por lo que nuevamente estamos sufriendo infames cortes de agua de días.
El nuevo acueducto es una buena idea, pero desgraciadamente no es suficiente para la cantidad de personas que somos y el gasto de agua que tenemos.
Leí el término “el agua que comemos” en un artículo de la FAO (La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) y me impresionó mucho la realidad que conlleva, porque al contrario de lo que se crea comúnmente gastamos mucha más agua en lo que comemos que en lo que bebemos. Por esto mismo es necesario que utilicemos nuestros recursos naturales de la manera más eficiente posible y elegir los cultivos y alimentos que representen menos gasto de agua, por ejemplo, para producir 1 kilo de lentejas se necesita 1 mil 250 litros de agua mientras que para producir 1 kilogramo de carne de vaca se necesita 15 mil litros.
El producir 1 kilogramo de carne toma 10 veces más agua que el producir 1 kilo de granos, esto derivado del índice de conversión de la carne, es mucho más eficiente comer los granos directamente a hacer que los coma un animal para luego comerlo a él.
De acuerdo con el INEGI, en México 76 por ciento del agua se utiliza en la agricultura; 14 por ciento en el abastecimiento público; 5 por ciento en las termoeléctricas y otro 5 por ciento en la industria, estos datos nos dan una pista de cuál es el problema más grave de la escasez de agua, tal vez como humanidad deberíamos prestarle la atención que merece.
Es una realidad, el mundo se está quedando sin agua, para el año 2050 se estima que en México 11 estados presenten estrés hídrico y podrían quedarse sin agua, el estrés hídrico indica que la demanda de agua es más alta que la cantidad potable disponible. De acuerdo con el World Resources Institute, 17 países de todo el mundo actualmente enfrentan niveles muy altos de estrés hídrico. Entre los países con mayor estrés hídrico están Catar, Arabia Saudita e India, sin embargo, nosotros ocupamos el segundo lugar en Latinoamérica después de Chile y el número 24 en el mundo.
Tenemos que tomar acciones para evitar llegar al día cero del agua, bañarnos 2 minutos y recoger agua de lluvia y climas ayuda, pero lo que realmente representa un cambio es modificar nuestra dieta y disminuir el consumo de carne.
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