Morena impulsará una iniciativa para imponer un impuesto de 5 pesos por litro a las bebidas saborizadas.
Ciudad de México, 1 de septiembre (SinEmbargo).– La bancada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) del Senado busca aumentar de 1.2 pesos a 5 pesos al impuesto por cada litro de refresco vendido, además, plantea prohibir la venta de comida chatarra a personas menores de 18 años de edad.
La iniciativa impulsada por el Senador Salomón x y avalada por más de 30 legisladores también propone incrementar el Impuesto Especial a la Producción y Servicios de ocho a 25 por ciento para alimentos no básicos con alta densidad calórica.
“La cuota aplicable será de $5.00 por litro. Tratándose de concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores, el impuesto se calculará tomando en cuenta el número de litros de bebidas saborizadas que, de conformidad con las especificaciones del fabricante, se puedan obtener; y la densidad calórica por gramos o mililitros del producto”, señala la iniciativa difundida este martes en la Gaceta Parlamentaria.
La propuesta contempla modificaciones a la Ley General de Salud, la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, de la Ley General de Educación y de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios.
Las reformas buscan prohibir la venta de estos productos con alto contenido calórico dentro de las escuelas y a las personas que no acreditan la mayoría de edad en las tiendas.
“Queda prohibida la publicidad, venta, regalo, distribución o suministro de bebidas y alimentos con bajo valor nutricional y alta densidad energética, al interior de las instituciones educativas públicas y privadas de educación básica y media superior”, señala la iniciativa.
Además, quienes infrinjan dicha ley podrían recibir sanciones por hasta mil quinientos días de salario mínimo.
El Senador Jara Cruz ya había anunciado desde inicios de agosto que presentaría una iniciativa para prohibir la venta de alimentos y bebidas de alto contenido calórico a personas menores de 18 años en todo el país al modificar la Ley General de Salud y la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
El 5 de agosto, Oaxaca se convirtió en el primer estado de México en prohibir la venta de bebidas azucaradas y alimentos con alto contenido calórico a niñas, niños y adolescentes, un día después el Gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández, anunció que la próxima semana enviará al Congreso estatal una iniciativa de reforma a la Ley General de Salud similar a la aprobada en el Congreso oaxaqueño.
Mientras que Claudia Sheinbuam, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, adelantó que analizará con las y los legisladores locales hacer lo mismo.
Por su parte, la Jefa de Política Social, Salud y Nutrición del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Catalina Gómez, recomendó ayer a las otras entidades de México ver a Oaxaca como ejemplo con su nueva Ley “antichatarra”.
“Hay que enviar una felicitación a Oaxaca por esta decisión valiente y pionera que está poniendo primero el interés superior de la niñez por encima de intereses económicos. Mi mensaje para los congresos de diferentes estados y para diferentes foros es que consideren estas medidas para la prevención”, dijo Gómez durante una entrevista con Alejandro Páez Varela, conductor de “Los Periodistas”.
Unicef ha advertido que la obesidad infantil en México es una emergencia de salud pública porque es el país con el mayor número de consumidores en América Latina de productos ultra procesados, incluidas las bebidas azucaradas.
De acuerdo con el organismo, las tasas más altas de este consumo se encuentran entre los niños en edad preescolar que comen alrededor del 40 por ciento de sus calorías de esta manera y afirmó que un tercio de los niños y adolescentes mexicanos tienen sobrepeso u obesidad.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) reveló que la obesidad y el sobrepeso aumentaron de 71.3 por ciento en 2012 a 75.2 por ciento, en 2018.
–Con información de AP.