El Barça reiteró su postura de que quiere que la “Pulga” siga en el club y que no negociará su transferencia con nadie. Su contrato vence en junio de 2021, y tiene una cláusula de rescisión de 700 millones de euros (838 millones de dólares).
Por Tales Azzoni
MADRID, 1 de septiembre (AP).- El Barcelona apuesta sus fichas a un encuentro cara a cara con Lionel Messi para convencerlo de que se quede.
Se anticipa un contacto esta semana con el padre de Messi, quien también es su agente, en Barcelona. Pero el club confía en poder tener además una reunión con el astro argentino.
Messi recibió una oferta para extenderle el contrato por dos años, informó a la Associated Press un personero del club al tanto de la situación. La persona habló con la condición de no ser identificada debido a que no estaba autorizado a dar declaraciones sobre el tema.
El contrato mantendría a Messi hasta la temporada 2022-23. Ambas partes habían alcanzado un acuerdo en casi todo hace unos meses, según el personero del club.
Club y jugador no han entablado contacto desde que el crack remeció al mundo del fútbol con su decisión de marcharse. Tomó la decisión 11 días después del final de la temporada, marcada por el monumental fiasco de la derrota 8-2 ante el Bayern Múnich en los cuartos de final de la Liga de Campeones.
La debacle el 14 de agosto coronó una pésima campaña para los azulgranas, su primera sin títulos desde 2007-08.
Messi apeló a la cláusula de su contrato que le permite desligarse del club sin costo alguno al final de la temporada. Pero el Barcelona sostiene que ese claúsula expiró en junio. Los representantes de Messi argumentarían que el final del curso se retrasó debido a la pandemia de coronavirus.
Las partes no han cedido un ápice. Messi no se presentó al inicio de los entrenamientos del equipo esta semana. El Barcelona asegura que no abrirá las puertas a su salida.
El Barça reiteró su postura de que quiere que la “Pulga” siga en el club y que no negociará su transferencia con nadie. Su contrato vence en junio de 2021, y tiene una cláusula de rescisión de 700 millones de euros (838 millones de dólares).
El presidente del club Josep Bartomeu charló telefónicamente con el padre de Messi tras la derrota ante el Bayern y se le dijo que el jugador quedó muy decepcionado. Han conversado unas cuantas veces más tras el anuncio de Messi de que quiere irse, pero el primer encuentro cara a cara será en los próximos días.
La esperanza del club es que puede resolver la situación con una reunión en persona con Messi, convenciéndole que lo mejor para él es seguir con la camiseta azulgrana.
Messi, quien a menudo ha dicho en el pasado que quiere completar su carrera con el Barça, no ha detallado públicamente el porqué desea buscar nuevos aires. No ha apuntado directamente a Bartomeu en sus críticas al club, pero el presidente dijo la semana que estaba dispuesto a renunciar si Messi le señala como la causa del problema.
El Barça asegura que no ha sondeado con ningún club la posibilidad de transferir al seis veces ganador del Balón de Oro, pero sí quiere negociar la salida de los jugadores que el nuevo técnico Ronald Koeman ha descartados en sus planes, como es el caso de Luis Suárez, Arturo Vidal y Samuel Umtiti.
Ivan Rakitic, quien también estaba en la lista, fichó el martes con el Sevilla.
Los otros tres se siguen entrenando con el plantel, de momento. El uruguayo Suárez, muy cercano a Messi, está entre ellos. El club dijo que aún no ha alcanzado un acuerdo para transferirle.