El director indicó que hay corrientes subalternas en el hemisferio norte que han sido socialmente acalladas como muchos artistas latinoamericanos o africanos, por lo que el “sur” es, para él, toda aquella forma cultural a la que el “norte” le dio la espalda.
Buenos Aires, 1 de septiembre (EFE).- La violencia de género, las olas feministas a lo largo de la historia contemporánea y las diferentes fases políticas de los países iberoamericanos transmitidos a través del arte moderno fueron los puntos más destacados del 15 encuentro de Bienalsur en Buenos Aires, que culmina hoy en la capital austral.
Con la presencia del director del Museo Reina Sofía de España, Manuel Borja-Villel; el director del Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro, Fernando Cocchiarale, y el director del Museo del Barro de Paraguay, Ticio Escobar, que participaron de una mesa de debate sobre el papel de los museos y sus colecciones, decenas de personas pudieron disfrutar del cierre de estas jornadas.
De Latinoamérica, Borja-Villel recalcó en una entrevista con Efe el papel de los artistas brasileños del siglo XX, que describió como “claves” para la historia de la modernidad.
“Por otro lado, Brasil, Argentina o Chile son países que tienen una evolución diferente a la europea, donde su modernidad cuestiona e interpela a la nuestra”, precisó antes de acentuar el trabajo artístico de creadores chilenos cuyas obras sobre la dictadura de Augusto Pinochet (1974-1990) están expuestas en el museo madrileño.
El director indicó que hay corrientes subalternas en el hemisferio norte que han sido socialmente acalladas como muchos artistas latinoamericanos o africanos, por lo que el “sur” es, para él, toda aquella forma cultural a la que el “norte” le dio la espalda.
“Del mismo modo que hay guerras políticas o económicas, hay guerras culturales. Hay unos poderes o unos lugares hegemónicos, tradicionalmente el norte, Europa y Estados Unidos, se han visto como lugares hegemónicos culturalmente. Sabemos que no es así y que hay muchos ‘sures’ en el norte”, explicó Borja-Villel.
El principal responsable del Reina Sofía señaló las principales obras de arte contemporáneo de los años 1960 y 1970 como ejemplo de que “no hemos salido de ese momento” creativo.
Aníbal Jozami, director de Bienalsur, apuntó a Efe que estos encuentros se producen regularmente cada 2 meses antes de la Bienal, que se realiza cada 2 años como una “plataforma de pensamiento y discusión sobre el arte contemporáneo y la realidad en la que le toca desarrollarse”.
“Tiende a juntar -como es el objetivo de la Bienal- a artistas, sociólogos, filósofos y periodistas de todas partes del mundo”, especificó el también rector de la Universidad Nacional Tres de Febrero (UNTREF), sede del evento.
Es también una oportunidad para que los actores más destacados del arte contemporáneo se conozcan, intercambien conocimientos y el “escenario ideal” para que produzcan creaciones que pueden llegar a ser el resultado final de obras que decoren las paredes de la que será la segunda Bienal Internacional de Arte Contemporáneo en 2019.
En este encuentro ha habido un total de 11 mujeres participantes entre curadoras, periodistas y artistas como la mexicana Teresa Margolles y la brasileña Berna Reale, o la peruana Claudia Coca.
Una de las figuras más destacadas entre las artistas que visitaron la capital argentina con motivo de la Bienal fue la boliviana Adriana Bravo, quien junto a su compatriota Ivanna Terrazas crearon el “Beso de Cholas”, una obra que rompe las barreras de la sexualidad indígena.
“Evidentemente México tiene todo que ver con esto, pero Bolivia también”, dijo Bravo en declaraciones a Efe.
Según la autora, las Cholas, las emblemáticas mujeres indígenas declaradas patrimonio cultural de La Paz, son la representación de lo que siempre se ha conocido, y ella quiso “romper” con su obra con los estigmas que la envuelven.
“¿Que si existen cholas lesbianas? Claro que las hay, es natural”, replicó la artista, quien aclaró que, muy al contrario de México, en Bolivia el movimiento LGTBI se encuentra todavía muy atrasado e incluso “castigado”.
