Por la Secretaría de Hacienda, donde se gestiona el dinero público, pasó Pedro Aspe en el Gobierno de Carlos Salinas (1994-2000) y Luis Videgaray en el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018). Ambos exsecretarios se conocieron desde finales de los noventa en la firma Evercore, la cual, además de reestructurar deudas de gobiernos estatales, valuó la compra irregular de la planta Fertinal en 2015 por parte del Pemex dirigido por Emilio Lozoya.
–Con información de Daniela Barragán
Ciudad de México, 1 de agosto (SinEmbargo).– “Estudiante aplicado del ITAM, Luis Videgaray encontró acomodo en el despacho-negocio de Pedro Aspe Armella, un ex secretario de Hacienda cuyos días de gloria transcurrieron en la Presidencia de Carlos Salinas de Gortari. Su firma Protego se dedica a reinventar las deudas públicas de los estados mexicanos, entre otras cosas, y hasta Toluca llegó en 2004 el joven Videgaray, enviado por Aspe, para que le resolviera al Gobernador Arturo Montiel y al Secretario de Gobierno Luis Miranda Nava el embrollo que habían hecho de la cuenta pública mexiquense”, narra un capítulo de Los Golden boys (Editorial Planeta Mexicana, 2014) del periodista Francisco Cruz Jiménez.
“Videgaray sabe rodearse de profesionales brillantes. A él y a Aspe se les atribuye el reclutamiento de otro verdadero Golden: el chihuahuense Emilio Lozoya Austin“, ex titular de Petróleos Mexicanos (Pemex), sometido esta semana a dos audiencias por su relación en la compra de la planta chatarra Agronitrogenados a Altos Hornos de México (AHMSA) y el millonario soborno de Odebrecht para la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012, coordinada por Videgaray y el denominado “ERLA”.
El tecnócrata Videgaray, quien entró a Protego (hoy Evercore) en 1998, asumió en 2001 la Dirección de Finanzas Públicas Estatales y Municipales de la firma y en 2002 fue contratado por el Gobierno del Estado de México de Arturo Montiel Rojas (1999-2005), para renegociar su abultada deuda por más de 30 mil millones de pesos. Su Secretario de Administración era Enrique Peña Nieto, quien ya en el gobierno mexiquense (2005-2011) asignó a Videgaray en la Secretaría de Finanzas.
“El nuevo gobierno se comprometió a pagar, durante cinco lustros y por concepto de intereses, más de 56 mil millones de pesos, un promedio de 2 mil 270 millones de pesos anuales. En 2011, cuando Peña se encaminaba a la Presidencia y Videgaray había consolidado su poder, los mexiquense se enteraron de que la deuda real superaba los más de 50 mil millones de pesos y que, incluida la de los municipios, aumentaba hasta 75 mil millones de pesos, un “poquito” más, de lo que se debía al 16 de septiembre de 2005, cuando Peña tomó posesión como Gobernador”, documentó Cruz Jiménez.
El 30 de abril de 2012, cuando Peña estaba en campaña, David Luhnow escribió para el diario estadounidense The Wall Street Journal que Videgaray dejó satisfechos a los inversionistas en Estados Unidos. “Peña le dio a los inversionistas de Wall Street una idea de cómo sería su gobierno cuando llegó a Nueva York acompañado de una sola persona. Mientras la mayoría de políticos mexicanos viajan con una verdadera corte, Peña llegó a finales de 2011 acompañado solo por Videgaray, su jefe de campaña, asesor más cercano y tal vez el mexicano más influyente cuyo nombre pocos conocen”, planteó.
La Unidad de Datos de SinEmbargo ha documentado cómo la firma Protego (Evercore) del ex Secretario de Hacienda de Salinas, hasta 2017, también reestructuró deudas del Gobierno de Veracruz, Oaxaca, Coahuila, Tabasco y, por supuesto, Chihuahua, en tiempos de los priista Miguel Alemán Velasco, Ulises Ruiz, Humberto Moreira Valdés, Andrés Granier Melo y César Duarte Jáquez, detenido en Miami y en proceso de extradición por peculado.
CÓMO VALUÓ A FERTINAL
Evercore, liderada hasta 2017 por el exsecretario de Hacienda de Carlos Salinas de Gortari, y donde trabajó Luis Videgaray Caso de 1998 a 2005, elaboró una de las valuaciones para Grupo Fertinal, la otra planta de fertilizantes cuestionada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) además de Agronitrogenados. La firma de Pedro Aspe, informó SinEmbargo, aseguró que la planta de fertilizantes valía incluso más de lo que el Petróleos Mexicanos (Pemex) dirigido por Emilio Lozoya pagó por ella.
El dueño de Grupo Fertinal, Fabio Massimo Covarrubias, negó el año pasado conocer a Lozoya y rechazó que Pemex haya comprado la planta a un sobreprecio porque se presentaron dos valuaciones hechas por Evercore y Goldman Sachs, que fijaron un precio mayor a los 635 millones de dólares que la petrolera pagó en 2015, con el objetivo de utilizar la producción adicional de amoniaco para generar hasta 1.2 millones de toneladas de fertilizantes fosfatados, con la finalidad de cubrir el 29 por ciento de la demanda nacional y el 36 por ciento de las importaciones.
En entrevista radiofónica Massimo Covarrubias dijo que Evercore valuó a Fertinal en un mínimo de 770 millones de dólares y un máximo de mil millones. Por su parte, Goldman Sachas fijó un mínimo de 870 millones de dólares y un máximo de mil 042 millones.
Los documentos de una investigación que se realiza en Estados Unidos desde verano del año pasado exponen que el expresidente Enrique Peña Nieto dio el aval a Lozoya para que comprara Fertinal por los 635 millones de dólares, pese a que la empresa era insolvente y su deuda crecía.
Sin embargo, el contrato de compra de la planta no aparece en ningún portal y la versión pública del acta del Consejo de Administración del 22 de mayo de 2015, en la que se dio la “Aprobación del Proyecto de Inversión para financiar y concretar la compra de la empresa Fertinal” tiene toda la información reservada.
Fue el órgano autónomo fiscalizador el que dio luz. En la Cuenta Pública de 2015 la ASF dio cuenta cómo hace cinco años inició el proceso para adquirir el Grupo Fertinal y subsidiarias (Fertinal), por lo cual el 26 de octubre de 2015, el Consejo de Administración de Pemex aprobó el proyecto de inversión para financiar y concretar la compra.
La Auditoría expuso sobre un problema con un avalúo privado, sin especificar cuál: “hay inconsistencias en la propuesta de valuación del despacho contratado, específicamente en los valores mínimos y máximos de la operación”.
Solicitó a Pemex el nombre y cargo de los integrantes, así como las minutas, los acuerdos y demás documentos de las sesiones de trabajo celebradas por la Coordinación de Asesores de su Dirección General, la cual participó en la supervisión y el seguimiento de la adquisición de Fertinal. Pero la petrolera le informó al órgano fiscalizador que no encontró documentación relacionada con la solicitud.