La nueva ley establece penas de hasta cadena perpetua para supuestos de "secesión, subversión contra el poder estatal, actividades terroristas y confabulación con fuerzas extranjeras para poner en riesgo la seguridad nacional".
Bruselas, 1 de julio (EFE).- La Unión Europea (UE) reiteró este miércoles su "grave preocupación" por la nueva Ley de Seguridad Nacional que China ha aprobado para Hong Kong, y urgió a Pekín a "evitar cualquier acción que socave su autonomía" en el ámbito legal, "incluyendo en términos de derechos humanos".
"La ley fue adoptada sin ninguna consulta previa significativa al Consejo Legislativo de Hong Kong y a la sociedad civil", subrayó el alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, en una declaración en nombre de los Veintisiete.
Destacó que la UE apuesta fuertemente por que continúe la estabilidad y prosperidad de Hong Kong bajo el principio de "un país, dos sistemas", y aseguró que otorga "gran importancia a la preservación del alto grado de autonomía" de ese territorio, en línea con su Ley Básica y los compromisos internacionales, así como al "respeto de ese principio".
La UE expresó que le preocupa que la nueva ley de seguridad sea conforme con la Ley Básica de Hong Kong -que constituye una especie de Constitución para la ciudad autónoma- y con los compromisos internacionales asumidos por Pekín.
En línea con las "garantías dadas por China en el pasado", la UE consideró "esencial" que los derechos y libertades existentes de los residentes de Hong Kong sean "protegidos plenamente", incluidas las libertades de expresión y de prensa, así como de asociación, asamblea, desfile o manifestación.
Las provisiones del Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos (ICCPR, por sus siglas en inglés), tal y como están consagradas en la legislación hongkonesa, "deben seguir aplicándose plenamente", pidieron los Veintisiete.
La UE también dijo temer que la nueva ley "mine gravemente el alto grado de autonomía" de Hong Kong y tenga "un efecto perjudicial en la independencia de la judicatura y el Estado de derecho".
"Ambos principios siguen siendo esenciales para que continúe la estabilidad y prosperidad de Hong Kong, y por tanto son de vital interés para la Unión Europea y la comunidad internacional", subrayó el jefe de la diplomacia comunitaria.
Borrell dijo asimismo que la UE "está evaluando las implicaciones de esa ley y seguirá planteando su preocupación en su diálogo con China".
La nueva ley establece penas de hasta cadena perpetua para supuestos de "secesión, subversión contra el poder estatal (cargo habitualmente usado contra disidentes y críticos del régimen comunista), actividades terroristas y confabulación con fuerzas extranjeras para poner en riesgo la seguridad nacional".
Asimismo, cualquier persona condenada por alguno de los supuestos de la ley no podrá presentarse como candidato a las elecciones del Consejo Legislativo hongkonés. Los próximos comicios para elegir a los miembros de este organismo están previstos para el 6 de septiembre.
Josep Borrell recalcó que la UE continuará siguiendo de cerca los acontecimientos, también en el contexto de esos comicios, que "tienen que desarrollarse según lo planeado y en un ambiente favorable al ejercicio de los derechos y libertades democráticos consagrados en la Ley Básica".