Italia y España están imponiendo algunas de las restricciones más severas de Europa al movimiento de personas, mientras que luchan por controlar una enfermedad que ya ha matado a miles de personas en ambos países. El impacto de tales medidas en la demanda de petróleo está comenzando a ser cada vez más claro.
En Estados Unidos también empiezan a reflejarse en el mercado de petróleo del país. La Administración de Información de Energía de Estados Unidos ha publicado un incremento de 13.8 millones de barriles de petróleo crudo durante la última semana. Esta es la mayor subida de los inventarios desde 2017.
Ciudad de México, 1 de abril (EconomíaHoy).- Nueva jornada de descensos para el precio del petróleo. El crudo de tipo Brent, de referencia en Europa, ha caído por debajo de los 25 dólares, mínimos desde el año 2003. El desplome de la demanda de crudo está generando un exceso de petróleo en el mercado. Los productores siguen bombeando oro negro a un ritmo constante mientras que el consumo ha colapsado con la crisis del coronavirus. Los datos de consumo de gasolina y gasóleo en España e Italia reflejan el estado actual del mercado de petróleo.
Italia y España están imponiendo algunas de las restricciones más severas de Europa al movimiento de personas, mientras que luchan por controlar una enfermedad que ya ha matado a miles de personas en ambos países. El impacto de tales medidas en la demanda de petróleo está comenzando a ser cada vez más claro.
El viernes, la refinadora italiana Gruppo API informó que detendría indefinidamente una pequeña planta en el norte del país porque la demanda a nivel nacional se ha reducido en un 85 por ciento.
En el caso de España, las salidas de gasolinas y gasóleo de automoción desde las instalaciones de CLH han caído el 83 y el 61 por ciento, respectivamente, en la semana del 23 al 29 de marzo respecto al mismo periodo del año anterior, según datos de la empresa, que mueve el 80 por ciento. de los carburantes que se consumen.
En el caso del queroseno, combustible utilizado por la aviación, el desplome es del 85 por ciento, según las cifras que maneja la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) en relación al impacto del estado de alarma por el coronavirus en el consumo de productos petrolíferos.
Una disminución de esa magnitud implicaría que los dos países, en el epicentro del brote en Europa, podrían haber visto desaparecer casi 2 millones de barriles por día de demanda combinada casi de la noche a la mañana, según calculan desde la agencia Bloomberg. Eso en un momento en el que Arabia Saudits y otros productores están involucrados en una guerra de precios, añadiendo grandes cantidades de crudo con grandes descuentos a un mercado global saturado.
Operadores y analistas de petróleo estiman que el impacto global en la demanda de petróleo del coronavirus y las restricciones que ha causado podría ser entre 20 y 25 millones de barriles por día. Eso representa alrededor del 20 por ciento al 25 por ciento del consumo de petróleo en un mercado normal.
Queda por ver cómo afectará a los consumos el decreto de “hibernación” de actividades no esenciales que entró en vigor hoy, lunes, y que reducirá aún más la movilidad de trabajadores.
Desde CLH han subrayado que pese a la caída de los consumos, mantienen activo el plan de contingencia puesto en marcha para preservar la salud de todas las personas que trabajan en la compañía y garantizar la actividad de sus infraestructuras y el abastecimiento de combustibles.
INVENTARIOS DE PETRÓLEO SE DISPARAN
Las medidas que restringen el movimiento y la actividad económica en Estados Unidos empiezan a reflejarse de forma evidente en el mercado de petróleo del país. La Administración de Información de Energía de Estados Unidos ha publicado un incremento de 13.8 millones de barriles de petróleo crudo durante la última semana. Esta es la mayor subida de los inventarios desde 2017.
Además, todos los productos derivados del petróleo (incluyendo el propio crudo) han registrado un incremento de 21 millones de barriles. La demanda de petróleo y sus derivados se ha desplomado a causa del coronavirus, las medidas de control que se están tomando y su impacto sobre la economía. Mientras tanto, los productores americanos siguen bombeando un petróleo que se acumula en los tanques de almacenamiento.
De este modo, los inventarios de petróleo crudo se sitúan en 469.2 millones de barriles, cerca del promedio de los últimos cinco años. Los inventarios totales de gasolina de motor aumentaron en 7.5 millones de barriles la semana pasada y son aproximadamente un 4 por ciento más altos que el promedio de los últimos cinco años.
Los inventarios terminados de gasolina y componentes de mezcla aumentaron la semana pasada. Los inventarios de combustible destilado disminuyeron en 2.2 millones de barriles y están aproximadamente un 13 por ciento por debajo de la media de los últimos cinco años. Los inventarios de propano-propileno disminuyeron en 0.3 millones de barriles la semana pasada y están aproximadamente un 29 por ciento por encima del promedio. Así, los inventarios totales de petróleo comercial (derivados y crudo) aumentaron la semana pasada en 21,0 millones de barriles.
El petróleo cotiza con descensos superiores al 4 por ciento que dejan al Brent, de referencia en Europa, en los 25 dólares. Por su parte, el West Texas, de referencia en Estados Unidos lucha por mantenerse por encima de los 20 dólares el barril, mínimos desde 2002.