El lunes los policías pararon labores en el cuartel central, Chilapa y Apango para exigir respeto a su jornada laboral y un bono de riesgo, y la Secretaría de Seguridad Pública advirtió en un comunicado que no será rehén de “chantajes o presiones de grupos radicales o servidores públicos” y que si no regresaban a trabajar serían despedidos.
Por Luis Blancas
Ciudad de de México, 31 de mayo (SinEmbargo/ElSur).- Unos 200 policías estatales marchan en un carril del bulevar Vicente Guerrero hacia la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos del estado (Codehum) donde interpondrán una queja luego de que funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública estatales les informaron que 176 de los 600 que participaron en el paro fueron dados de baja porque no se integraron a sus labores.
Los policías salieron del cuartel central ubicado cerca del tutelar de menores y se dirigen a las oficinas ubicadas en el centro de la capital, utilizando uno de los carriles de norte a sur del bulevar y frente a la Universidad Policial del Estado de Guerrero invitaron a sus compañeros a sumarse a la movilización.
Informaron que alrededor de la 1 de la tarde el contralor y el subsecretario de Administración, Apoyo Técnico y Desarrollo Humano acudieron al cuartel y les notificaron el despido.
El lunes los policías pararon labores en el cuartel central, Chilapa y Apango para exigir respeto a su jornada laboral y un bono de riesgo, y la Secretaría de Seguridad Pública advirtió en un comunicado que no será rehén de “chantajes o presiones de grupos radicales o servidores públicos” y que si no regresaban a trabajar serían despedidos.
El paro concluyó ayer a las 3 de la tarde luego de que el Gobernador Héctor Astudillo Flores declaró que no era la vía para exigir demandas, que no habría diálogo y habría sanciones.