ENTREVISTA: “Canto canciones románticas, pero soy anti-romántico”, dice Cristian Castro

30/08/2013 - 12:00 am
"Canto canciones románticas, pero soy anti romántico" (Foto: Especial)
“Canto canciones románticas, pero soy anti romántico” (Foto: Especial)

Ciudad de México, 30 agosto (SinEmbargo).- Cristian Castro ha vuelto a su casa, es decir, a Sony Music. Lo que se traduce en el regreso a un modo de manejarse con la prensa que remite a otros tiempos, pero que a él le funciona.

Dejó Universal Music en medio de un escándalo solapado a raíz de las discrepancias por la producción del disco en homenaje a José José que si bien tuvo buen nivel de ventas, no dejó conforme al cantante.

Se sabe que el hijo de Verónica Castro y el comediante Manuel “El Loco” Valdez no acierta muchas veces a discernir entre el discurso público y el privado y a menudo “mete la pata”, como cuando en Miami le dijo a una periodista de una agencia internacional que el disco que había hecho para honrar el talento del intérprete de “La nave del olvido”, no era de su agrado.

“Dejaron las canciones en donde más me parecía a él, como si lo imitara”, se quejó, abriendo una grieta insanable con su disquera.

Razón no le faltaba. Porque aun cuando los puristas lo acusaron de imitar a José José, hay que decir en su descargo que no muchos cantantes pueden darse el lujo de parecerse al príncipe de la canción mexicana.

Pero ha regresado a Sony y eso equivale a esperarlo durante más de una hora en una conferencia de prensa a la que envió palomitas con azúcar para que los periodistas reunidos en un lujoso hotel de Polanco no perdieran la paciencia.

Fue en mayo pasado y como bien dijo el presidente de la multinacional al otorgarle el Disco de Oro por Primera Fila 1, “este es un evento importantísimo” y, por tanto –traducimos- a Cristian se le perdona la tardanza y el gesto burdo de querer comprar con sabor de caramelo los favores de los medios. Hacía más de cinco años que no ofrecía una conferencia de prensa en su país.

Uno quisiera pensar en este contexto que muchas de las cosas por las que es conocido Castro no le hacen justicia a su enorme talento y que el propio cantante hace demasiado por dar vuelta esa imagen que en México llega hasta la cruel parodia en forma constante.

EL MEJOR CANTANTE EN SU GÉNERO

Pocos mexicanos se niegan a admitir que el intérprete nacido el 8 de julio de 1974 es, por lejos, uno de los mejores o directamente el mejor cantante en su género. Y si hacemos hincapié en el carácter nacional de ese rechazo, es porque la crítica o la indiferencia no se replica en otros países del continente.

En Argentina, por ejemplo, Cristian es admirado no sólo por los cultores del género pop que él representa, sino también por rockeros contumaces como Andrés Calamaro, Vicentico o Gustavo Cerati, quien cada vez que venía a nuestro país se juntaba a comer con el intérprete de “Azul”.

En cierto modo, Cristian Castro paga en su país de origen los pecados y milagros de sus progenitores, los aciertos y desaciertos de toda su parentela, incluida ahora la Primera Dama, quien durante mucho tiempo fue su tía política.

También está preso sin quererlo de un modelo de artista y de temática que poco concilia con lo que podría denominarse canción de autor. Al fin y al cabo, el artista pronto cumplirá 40 años, hace tiempo que viene transitando con un éxito rutilante el rumbo más comercial del pop.

"Soy un hombre con muchos problemas" (Foto: Especial)
“Soy un hombre con muchos problemas” (Foto: Especial)

Por otro lado, México no es Brasil, un país clave en la música continental y donde las barreras entre los cantantes masivos y los underground prácticamente no existen.

Arrigo Barnabé o Hermeto Pascoal pueden cantar con Daniela Mercury o So pra contrariar, por citar un ejemplo, y va de suyo que el gran Caetano Veloso ha sido siempre el gran defensor de Roberto Carlos, un artista popular que a estas alturas, también es cierto, no hace falta ser defendido por nadie.

En una entrevista que le hiciéramos a Eugenia León, la cantante casi se pone verde cuando le hablamos del talento interpretativo de Cristian Castro y se largó con un speech veladamente discriminatorio en la que se refirió a “los artistas con o sin discurso”.

Así las cosas, no nos pondremos demasiado semióticos diciendo que aun la falta de discurso es un discurso en sí mismo, porque no es el tema central de esta nota, pero quizás se nos permita afirmar que llamarse Cristian Castro tiene muchas ventajas y también muchas desventajas.

Entre lo bueno está sin duda está su condición de artista masivo y popular. Todo lo que hace tiene éxito y su presencia concita interés tanto de los fans como de los medios.

Entre lo dificultoso está la imposibilidad de verlo distinto, incluso de que él, tal vez falto de un background cultural más sólido, pueda realmente vislumbrarse como el artista genial que es.

Tanto así, que en la citada conferencia de prensa, un periodista cubano salió furioso porque poco pudo hacer para que el cantante profundizara más sobre sus conceptos musicales y, en cambio, hubiera que soportar preguntas tales como si es cierto que le gustan las gorditas.

UNA MAGNÍFICA PRESENCIA, A QUÉ NEGARLO

Cristian Castro recibe a sinembargo en una sala de hotel especialmente acondicionada para que su encuentro con los periodistas. Está íntegramente vestido de color vino, impecable, elegante y hasta sofisticado.

Contra lo que pudiera pensarse, tiene en el tú a tú una presencia magnífica y, rodeado de asistentes que abren y cierran maletas que guardan zapatos y ropa de toda clase, se percibe su condición principesca, la de un muchacho crecido entre algodones, acostumbrado a que lo mimen y consientan todos sus caprichos.

"Mi vida personal es muy aburrida" (Foto: Especial)
“Mi vida personal es muy aburrida” (Foto: Especial)

Pide un pastel de chocolate. Lo mira. No se lo come. A veces la vida es mejor cuando no es tan fácil conseguir un pastel de chocolate, pensamos, pero no se lo decimos.

–  ¿Qué quieres decir cuando dices que el cantante lo puede todo?

–        La canción de Elvis Presley es el más claro ejemplo de eso. Cuando dice que el rey del mundo o de la vida, probablemente, sea la persona que puede cantar. Lo dice Elvis y esa frase se me quedó muy adentro. Para mí, un cantante de verdad, ilumina como un rey o como un Papa. La música nos define como especie, es lo que más nos conmueve, es lo que más nos transforma. La música primero me cambió y luego me hizo esta persona que soy. Me sostiene, me guarda, me protege. Tengo que admitir también que todos cantamos, en la ducha, en la casa, pero hay quienes nacieron con un regalo extra y mi opinión es que cuando tienes esa especie de don, debes respetarlo.

–         ¿Tienes una imagen para la gente y otra en la realidad? ¿Sientes que estás preso de un retrato mediático muy dibujado, muy estructurado?

–        Mmm…no sé. Quisiera pensar en positivo, pero es cierto que hay mucha gente que critica lo que canto, que lo considera pasado de moda; también hay personas a las que no les gusta nada mi manera de ser. Uno va con sus canciones y su personalidad a cuestas a enfrentar a los demás. Y es curioso, porque canto canciones románticas pero mi manera de ser resulta a muchos antirromántica.

–         ¿Vives de una manera distinta a lo que cantas?

–         Sí, hay un contraste. Sobre todo ponen el acento en mi fama de mujeriego. Canto canciones de amor, pero me gustan todas y me cuesta ser fiel, eso. En el arte, siempre he buscado la misma meta, pero mediáticamente, la verdad es que soy pésimo orador. Lo mío es cantar correctamente, ni siquiera bien. Entonces, en medio de todo eso, si hay alguien que me quiere súper bien y si hay alguien que me quiere mucho, más que mejor

–         ¿Te sientes más querido en Argentina, Perú o Chile que en México?

–         Hay algo de eso. ¿Sabes?, creo mucho en la astrología y en los números. Creo que cuando nacemos lo hacemos con un sur o un norte adentro. Y yo nací con el sur. Si voy a Italia, que es un país que me encanta, siempre me voy a sentir mejor en Nápoles que en Milán. Y en nuestro continente, cuando voy a Argentina, siento que estoy en mi casa. Siempre hay algo mío en el sur. México es el centro. Los públicos de Argentina son apasionados y a la hora de demostrar admiración lo va a hacer triple en relación con los mexicanos. Punto. Es tan simple como eso. En México, por otra parte, la música nunca es lo más importante. Aquí lo importante es cómo te ves. Aquí te juzgan por tu vida personal, no por tus capacidades artísticas. En Argentina, por ejemplo, puedes golpear a todas las mujeres que quieras, pero si cantas bien, el público va a hacer la diferencia. Debo decir también que todo esto que hablamos tiene sentido si lo aplicamos a la ciudad de México, donde mi paso no ha sido tan firme como en Monterrey o Cancún, por nombrar dos lugares del interior de mi país.

Foto: Especial
Foto: Especial

–        ¿No será que estás debiendo un disco que implique mayor riesgo? Siempre expresaste tu deseo de hacer un disco de opereta y hace poco asumiste el desafío de aprender a cantar salsa, algo que no es nada fácil…

–        Bueno, quiero intentar otros géneros, es cierto. No sé si lograré cantar salsa, es difícil. Pero, la verdad, quiero defender mi género romántico. Soy el único que lo defiende. No me da vergüenza cantar lo que canto. No te voy a negar que en el pasado hubo algunos desatinos en cuanto a mi repertorio y lo digo sobre todo porque soy muy incisivo conmigo, pero no me arrepiento de nada y estoy orgulloso de mi trabajo. También es cierto que quiero probar cosas nuevas. ¿Por qué no animarme con la salsa? Viví mucho tiempo en Miami, conozco muy bien Puerto Rico. Tengo amigos como Jerry Rivera, Gilberto Santa Rosa, Elvis Crespo, Marc Anthony…así que quiero intentarlo, con mucha precaución, claro, porque puede pasar que por andar distraído haciendo discos de salsa o en idioma inglés, que es uno de mis próximos proyectos, descuidas tu género y pueden ganarte el lugar otros cantantes.

–        ¿Sueles meterte en problemas cuando das entrevistas?

–        Sí, porque no sé hablar. Además, en todas las entrevistas tarde o temprano va a venir una pregunta personal. Que si mi papá, mi mamá, mis divorcios, que si soy gay, que si le pegué a mi ex mujer…me pasa desde chico, siempre ha sido así. Soy el hijo del “Loco” Valdez y de Verónica Castro, pero mi madre fue madre soltera, pero todos saben quién es el padre, etcétera, etcétera, lo personal ha sido un estorbo en mi carrera. Siempre hay tela de donde cortar, ahora es mi ahijada Sofía y su madre Angélica (Rivera, esposa del presidente Enrique Peña Nieto).

–        ¿Y quién eres cuando te miras al espejo?

–        Alguien a quien su vida personal le resulta muy aburrida. Nunca pienso en mí en los términos que piensan los demás, en relación con mis parientes o con mis relaciones. Diría en ese sentido que yo, para mí, no soy nada personal. En mi vida, siempre ha sido la canción, no he sido yo. Soy un hombre con muchos problemas y los problemas nunca se irán. Más o menos mujeres, eso no importa, lo que importa es lo que doy como artista.

–        ¿Sueñas con que te quedas sin voz?

–        Sí, claro. Es lo a lo que más miedo le tengo: no poder cantar más. Que un día me levante y que todo eso se haya ido, que ya no pueda vibrar ni hacer emocionar a nadie con mis canciones. Sueño con que en el concierto me quedo mudo. Hay artistas que se fuman un cigarro, se toman unos drinks y salen al escenario. Y lo hacen bien. Yo no puedo. Soy muy frágil.

–          ¿Sales al escenario a matar o a morir?

–        Yo siempre salgo a matar, pero cuando no puedo, me muero.

–        ¿Te gustaría morir arriba de un escenario?

–        Es ahí donde hay que morirse.

CRISTIAN CASTRO EN PRIMERA FILA

Obtuvo el Disco de Platino por las altas ventas de "Primera Fila" (Foto: Especial)
Obtuvo el Disco de Platino por las altas ventas de “Primera Fila” (Foto: Especial)

El pasado fin de semana, el intérprete mexicano recibió el Disco de Platino por las altas ventas de Primera Fila, que marca su regreso a Sony Music y la grabación en vivo por primera vez en su carrera. Primera Fila CD+DVD se edita en dos volúmenes e incluye un recorrido por sus mayores éxitos, temas nuevos y dúos con Verónica Castro, Ha*Ash, Reik y Leonel García, el ex Sin Bandera.

Luego de una larga temporada en Miami, Cristian ha decidido regresar a su país de origen. Por ahora vive con su abuela en la Colonia del Valle, pero está buscando casa por el sur.

 

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas