Luis Ángel Bravo renunció a la Fiscalía de Veracruz a dos días de que Miguel Ángel Yunes tome protesta como Gobernador del estado. El panista ha acusado al ahora ex funcionario de encubrir a Javier Duarte y a los cárteles de la droga que operan en la entidad. Durante su campaña, Yunes Linares prometió investigar el trabajo de la Fiscalía.
Ciudad de México, 28 de noviembre (SinEmbargo).- El Fiscal General de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras, renunció este lunes en favor, dijo, de la unidad de los veracruzanos.
En conferencia de prensa, Bravo Contreras dijo que "en plena congruencia con mi actuar y mi sentir tomé la decisión de presentar con carácter de irrevocable al cargo de Fiscal General del Estado, misma que ya he hecho llegar a la presidenta de la Mesa Directiva de la 64 Legislatura, lo hago convencido de que Veracruz tiene una ruta que le hará transitar a mejores esquemas de gobernabilidad".
El ahora ex funcionario sostuvo que "no seré factor de división ni encono, por el contrario, lo que Veracruz necesita hoy más que nunca es unidad, sólo en esa medida, como el gran pueblo que somos, podremos salir adelante de la grave situación por la que atraviesa nuestro estado".
Bravo Contreras, quien es señalado por el Gobernador electo del estado, Miguel Ángel Yunes Linares, de solapar la corrupción y el crimen organizado en la entidad, informó que antes de su salida integró dos indagatorias: una del mandatario con licencia, Javier Duarte de Ochoa, en contra del panista por enriquecimiento ilícito, y otra de Yunes contra Duarte por corrupción.
"Reconozco el liderazgo del licenciado Miguel Ángel Yunes Linares quien en los próximos días tomará protesta como Gobernador constitucional e iniciará una nueva etapa que requiere de todas las voluntades para que Veracruz recupere la grandeza que nunca debió perder", indicó
Bravo estuvo al frente de la Fiscalía por 34 meses, periodo en el que siempre destacó su trabajo en el combate al secuestro, sin embargo, el hallazgo de unos 200 restos humanos en Colinas de Santa Fe, en septiembre pasado, evidenciaron que la dependencia ocultó las verdaderas cifras de desaparecidos y ejecutados en el estado.