Ciudad de México, 28 de octubre (SinEmbargo).- Tras seis meses de permiso, el Gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, al fin regresó a dirigir el estado. Sin embargo, la noticia fue recibida con atentados en distintas regiones de la entidad y con enfrentamientos contra supuestos miembros de guardias comunitarias.
Este domingo, grupos armados atacaron las instalaciones estratégicas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en al menos 12 municipios de Michoacán. Además, según prensa local, cuatro estaciones gasolineras fueron atacadas por sujetos que arrojaron bombas molotov para prenderles fuego, tres ubicadas en Morelia y la cuarta en Tarímbaro.
Los ataques de ayer afectaron a 420 mil personas y hasta el momento ningún grupo armado se ha adjudicado el ataque a las zonas estratégicas de Michoacán.
En un comunicado, la CFE informó que hubo incendios y disparos de arma de fuego durante las primeras horas del domingo en 18 subestaciones de la CFE que abastecen a una buena parte de municipios.
También el pasado sábado elementos de seguridad cercaron Apatzingán por una balacera que se desató tras una protesta de policías comunitarias de Tepelcatepec y Buenavista.
Los ataques se realizaron días después de que el Gobernador Fausto Vallejo se reincorporó a sus labores, después de someterse a un trasplante de hígado. En su lugar el ex secretario de gobierno, Jesús Reyna García, asumió el control del estado que está pasando una de sus peores crisis.
En su regreso, Vallejo Figueroa deberá enfrentar los asuntos que dejó inconcluso cuando solicito permiso médico: el expediente de la deuda dejada por el perredista Leonel Godoy, quien gobernó la entidad de 2008 a 2010, la caída en los indicadores económicos de la entidad por el miedo de las empresas a invertir, viejos enfrentamientos con normalistas y viejas rencillas con la oposición, principalmente con el Partido Acción Nacional (PAN).
También, el tema del repunte de la delincuencia organizada que desde 2006, primero con La Familia Michoacana y ahora con los Caballeros Templarios, ha hecho a la entidad presa de ataques, enfrentamientos y extorsiones que lo mismo van desde cobrar un peso por kilo a los cortadores de limón y aguacate, que incendiar bodegas y camiones de grandes empresas como Sabritas.
EL RECIBIMIENTO DE VALLEJO
Los ataques de ayer provocaron apagones en las cabeceras municipales, según los reportes preliminares del gobierno estatal. La Policía Federal aseguró 131 bombas molotov que presuntamente serían utilizadas para atentar contra los transformadores de la CFE y así generar mayores afectaciones en la entidad.
Se reportaron fallas y presuntos atentados en Apatzingán, Morelia, Zamora, La Piedad, Ciudad Hidalgo, Uruapan, Sahuayo, Tarímbaro, Zinapécuaro, Queréndaro, entre otros. Asimismo, en los municipios de Zamora, La Piedad, Apatzingán, Zinapécuaro y Uruapan se hizo el reporte de cortes parciales en las redes eléctricas.
Ante los hechos, elementos de la Policía Federal y estatal implementaron un operativo para evitar nuevos atentados.
Poco a poco el servicio eléctrico se fue reestableciendo en las poblaciones afectadas, apenas unas horas después de que Apatzingán fuera el escenario de balaceras y quema de vehículos a raíz del arribo de las Guardias Comunitarias.
El sábado, se reportó una balacera en las instalaciones de la presidencia municipal de Apatzingán cuando integrantes de los grupos de autodefensas de Tepaltepec y Buenavista arribaron al municipio.
Según testigos, las ráfagas de armas de grueso calibre vinieron de azoteas de casas por parte desconocidos justo cuando los integrantes de autodefensas ingresaban en caravana al centro del poblado, después de esquivar retenes de autoridades federales por la carretera 120 .
Autoridades informaron que un grupo de desconocidos quemaron automotores en la cabecera municipal. Tres vehículos fueron incendiados desde las 16:30 horas de la tarde y permanecieron en flamas, además que se reportó a una persona herida.
Después de los disparos que se registraron en el centro de la ciudad, en otro punto se dio la quema de automóviles a causa de que grupos de autodefensas arribaran a manifestarse en Apatzingán.
Uno de los vehículos fue incendiado cerca de la glorieta en donde se encuentra el monumento al General Lázaro Cárdenas. El segundo auto fue prendido en llamas por desconocidos a a altura de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Además detallaron que las personas que se identificaron como parte de los autodefensas se reunieron con otro grupo presuntamente armado al momento de tomar el Palacio Municipal.
Por su parte, el diario Provincia informó que la zona fue sitiada por elementos del Ejército, de la Policía Federal además que 4 helicoptéros artillados de la Secretaría de la Defensa Nacional rondan el área en donde arribaron los grupos de autodefensa de los municipios de Buenavista y Tepalcatepec.
Durante todo este año y especialmente en los últimos dos meses, grupos de autodefensa de los municipios de Tierra Caliente, zona que comparten los estados de Guerrero y Michoacán pusieron en jaque a los gobiernos federal y locales al protestar por la falta de seguridad y apoyos de las autoridades con bloqueos carreteros y la retención de funcionarios públicos e incluso de elementos del Ejército mexicano.
Los policías comunitarios de la zona se han alzado en armas en contra del cártel de Los Caballeros Templarios, que por años ha mantenido apresadas a esas comunidades, cobrando derecho de piso, violando a las mujeres y matando a todos quienes se oponen a su control sobre las actividades productivas de la zona.
MICHOACÁN, ZONA DE GUERRA
La entidad, al igual que lo fue en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, se convirtió en el laboratorio de pruebas de la estrategia de seguridad de la nueva administración federal, que fue recibida con la detención de una veintena de militares por parte de los grupos de autodefensa.
Las manifestaciones el día de su toma de protesta, indicaban que gobernar a un estado que ha sido calificado por muchos como “estado fallido”, no sería fácil.
De acuerdo con reportes periodísticos, durante la ausencia de Vallejo aumentaron los índices delictivos en la entidad.
El mayor de los incrementos se presentó en delitos de alto impacto, pues tanto las privaciones ilegales de la libertad como los homicidios y el robo tuvieron una curva ascendente notoria.
Del 1 de mayo al 30 de septiembre, según cifras del gobierno federal, se iniciaron averiguaciones previas por 82 casos de secuestro.
En los mismos meses del año anterior sumaron 58 plagios, de manera que el aumento en este renglón es de 41%.
Respecto de los homicidios dolosos, el incremento fue de 21%, ya que en el periodo citado se cometieron 388 contra 320 del previo, pero el aumento más alto (72%) se detectó en los asaltos bancarios: 19 en los 150 días contabilizados del año en curso, por 11 en el mismo lapso de 2012.