Ecatepec, Estado de México, 26 de junio (SinEmbargo).– La señora Cruz Pérez Moreno, madre de Jessica Lucero Olvera Pérez, asesinada el 14 de julio de 2012 en Ecatepec, Estado de México, dejará de buscar justicia porque, el jueves pasado, unos sujetos ingresaron a su domicilio e intentaron secuestrarla después de que acudió a las autoridades para revisar el caso de su hija.
La arrastraron por el patio oscuro de su vivienda y le lastimaron la columna y cuello. Todo porque un día antes, Cruz Pérez acudió al Penal de Chiconautla con dos abogadas para revisar el expediente de su hija de 14 años, quien fue asesinada un mes después de que denunció a su violador.
“Un vecino violó a mi hija y fuimos a denunciar, pero como no teníamos los 2 mil pesos que nos pidieron para investigar, mi hija, tres semanas luego de la denuncia, fue amenazada por su violador y una semana después desapareció; al día siguiente la encontré muerta. La violaron y le aplastaron a cabeza con una piedra”, relató a SinEmbargo.
Jessica apareció con la cabeza destrozada en un baldío. Se detuvo a dos presuntos responsables: hoy sólo uno de ellos está preso y el otro exonerado. El primer violador está prófugo.
“Yo quiero pedirle al Gobernador [del Estado de México] Eruviel Ávila que haga justicia. Quiero decirle que voy a dejar todo en manos de las autoridades, porque ya no puedo seguir. Después de esto tengo miedo y tengo más familia, otros hijos a los que les voy hacer falta. La verdad después de esto, ya no puedo hacer más”, dijo Cruz Pérez con un collarín en el cuello.
Cruz Pérez realizó un recorrido junto con otros familiares de víctimas de feminicidio y organizaciones civiles defensoras de los derechos de la mujer. Cargó una cruz de madera rosa y la colocó en la plaza del Pueblo de Santa María Chiconantla, en donde desaparecieron cuatro jovencitas.
Hace unos días fueron asesinadas dos mujeres, una de ellas, Estefany Sánchez Pérez, de cinco balazos en el pecho y la otra, con 20. Ambas fueron rematadas con el “tiro de gracia”.
“La madre de Estefany no está aquí porque tiene miedo, porque los policías municipales se encargan de hacer llamadas para amenazar, para amedrentar”, dijo David Mancera Figueroa, presidente de Solidaridad por las Familias.
El recorrido de la cruces rosas también llegó a un puente ubicado sobre la carretera Lechería-Texcoco. Ahí la niña de 14 años Diana Angélica Castañeda, desapareció cuando intentaba cruzar hacia su vivienda.
La cruz, que recuerda la ausencia de una niña y de otras tantas, se hundió en la tierra mojada de un solar baldío ubicado atrás de un supermercado.
Ahí, donde Diana se encaminó a su casa, a la que nunca llegó.
La mamá de la niña tampoco acudió al recorrido para exigir justicia por las muertas y desaparecidas, por miedo, aseguró David Mancera.
“La mamá de Diana no está aquí porque tiene temor, pero hoy le queremos decir que no está sola”, dijo.
El grupo de mamás y defensores de derechos humanos colocó una cruz en la explanada municipal de Ecatepec para recordarle al priista Eruviel Ávila Villegas que el feminicidio también es importante.
“Esta cruz se quedará aquí como prueba de la incompetencia y la flojera de las autoridades. Dice Eruviel que hay cosas más importantes y nosotros le vamos a recordar que no. Vamos a exigirle que nos cumpla y no de la alerta de género”, dijo Mancera Figueroa.
EXIGEN ALERTA DE GÉNERO
El recorrido de ayer por algunos lugares donde han asesinado y desaparecido a mujeres, forma parte de una campaña para visibilizar los feminicidios en la entidad y para exigirle al Gobernador priista Ávila Villegas no retrasar más la alerta de género y aplicar la justicia en cientos de casos pendientes.
“La campaña forma parte de las acciones de la alerta de género ciudadana que emitimos hace un mes y que inicia aquí, el primer foco rojo del Estado de México”, dijo Rodolfo Domínguez, del Observatorio Ciudadano del Feminicidio.
Yuritzi Hernández de la Rosa, integrante de la Alianza por los Derechos de la Mujer, dijo que la declaratoria de alerta de género es un “mecanismo de protección, correctivo y urgente que debe tener como finalidad identificar las graves fallas que impiden la atención, prevención, sanción, erradicación de la violencia contra las mujeres”.
La activista denunció que desde hace tres años que inició la solicitud de alerta de género para el Edomex, el gobierno estatal consideró la solicitud una amenaza para su gestión y se dedicó a interponer obstáculos, minimizar el problema, invisibilidad la gravedad de los asesinatos de mujeres y a criminalizar a las organizaciones.
La campaña que inició hoy continuará con recorridos en cuatro municipios más que incluyen Chimalhuacán, Ciudad Nezahualcóyotl y Toluca.
El 25 de mayo pasado, el priista Eruviel Ávila Villegas dijo que en el Estado de México “hay cosas más graves que atender” [que los asesinatos contra mujeres], esto en respuesta al Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), organización civil que le pidió una reunión para que informara sobre las acciones instrumentadas en la entidad para detener la violencia contra las mujeres.
Ayer Hernández de la Rosa exigió de nuevo que Ávila reciba a las madres de las víctimas.
“Queremos que sea él quien las reciba, no uno de sus funcionarios, él, porque es quien está gobernando el Estado de México, no otros”, dijo.
La declaratoria de alerta de género para el Estado de México ha sido negada en tres ocasiones y actualmente se analiza una solicitud aún con el viejo reglamento que estaba vigente el año pasado, el cual contempla que los encargados de evaluar la procedencia de la alerta es un grupo de trabajo conformado por representantes de la Secretaría de Salud, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), el Instituto Nacional de las Mujeres y la Procuraduría General de la República (PGR).
Sin embargo, y a pesar de que entre 2005 y 2010 se registraron 923 casos de feminicidios en la entidad y entre 2011 y 2012 se sumaron otros 600, el gobierno de Eruviel Ávila se resiste a admitir la necesidad de alertar a la sociedad.