Madre de activista finlandés asesinado en Oaxaca en 2010 acusa a México de negligencia y de ignorar su tragedia

26/04/2014 - 6:06 pm

Ciudad de México, 26 de abril (SinEmbargo).- Este domingo 27 de abril se cumplen cuatro años del asesinato de los activistas Jyri Jaakkola, de origen finlandés, y Betty Cariño, quienes fueron víctimas de una emboscada cuando participaban en un convoy de ayuda humanitaria que se dirigía al municipio de San Juan Copala, en Oaxaca, cercado en ese entonces por fuerzas paramilitares.

Hasta la fecha los responsables del doble asesinato siguen sin ser castigados.

A cuatro años del crimen, la madre del defensor de derechos humanos, Eeve Jaakkola, apareció en un video junto con varios eurodiputados del bloque de los Verdes, en el que se exhorta al gobierno mexicano a llevar a juicio a los responsables del ataque, de acuerdo con la agencia de noticias alemana Deutsche Welle.

Han pasado cuatro años “de palabras huecas y promesas vacías de las autoridades mexicanas”, dice Jaakkola.

La madre del activista, con el apoyo de los eurodiputados del bloque Verde, hizo un llamado a las autoridades mexicanas para acabar con la impunidad en este y otros casos en el país.

"Queremos agotar todos los medios, intentar todas las maneras de lograr que se haga justicia. De lo contrario me parece que no pasa nada en México. Solamente cuando alguien en Europa dice o hace algo, sucede algo. Y después otra vez nada", dijo la madre del activista asesinado.

"Este asesinato nunca fue un acertijo. Desde el primer día estuvo claro quién organizó la emboscada…el grupo de sospechosos es muy pequeño. En una sociedad que funciona, este homicidio hubiese sido resuelto y los perpetradores habrían sido llevados a la Justicia en pocos meses. No años", dijo la eurodiputada finlandesa Satu Hassi al medio alemán.

Hassi, quien ha viajado en varias ocasiones con los padres de Jaakkola al municipio oaxaqueño, señaló que han discutido el asunto con autoridades mexicanas, tanto a nivel estatal como federal, "y siempre escuchamos excusas y promesas". La legisladora finlandesa considera que no hay voluntad de las autoridades para llevar a los implicados a juicio.

El 27 de abril de 2010, un convoy humanitario que llevaba medicinas y asistencia a la comunidad triqui de San Juan Copala -sitiada desde hacía varios meses por paramilitares-, se encontró con el camino bloqueado y fue atacado por el mismo grupo que mantenía sitiada a la comunidad. En el ataque perdieron la vida Jaakkola y Cariño.

Hasta la fecha sólo se ha detenido y se sigue juicio a uno de los sospechosos, pero por imputaciones previas. Hay otras once órdenes de captura, pero desde hace 18 meses no ha habido avances en el caso, dijo un funcionario de Amnistía Internacional a Deutsche Welle.

 

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