Madrid, (apro).- Organizaciones no gubernamentales denunciaron que España vendió a México tres aviones de transporte militar, munición de artillería y diverso material de defensa pese a que el país es considerado un “destino preocupante” por las graves violaciones a los derechos humanos derivadas de la guerra contra el narcotráfico.
Por primera ocasión, México aparece en el informe de la campaña “Armas bajo control” que integran Amnistía Internacional, Greenpeace, Intermón Oxfam y la Fundació per la Pau, de Barcelona.
Destaca del informe que esta venta de equipo militar a México aparezca al mismo nivel de alerta que las “transferencias preocupantes” de armas a Bahréin, Arabia Saudí y Egipto en plena primavera árabe o de las exportaciones de armamento realizadas a Pakistán por las empresas españolas, que por ley reciben el beneplácito del gobierno de España.
El pasado 16 de abril, con motivo de la visita oficial de Mariano Rajoy a México, Amnistía Internacional pidió al presidente español incluir el tema de los derechos humanos en la agenda bilateral con México.
El comunicado y la carta enviada entonces a La Moncloa por dicha organización decía: “A Amnistía le preocupa hondamente la impunidad de las violaciones de derechos humanos cometidas por el Ejército. El gobierno mexicano hace caso omiso de los informes que denuncian torturas, desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y uso excesivo de la fuerza cometidas por el Ejercito”.
El gobierno mexicano, señalan, justifica que “los abusos son excepcionales y que sus autores rinden cuentas” a pesar de que “los datos dicen lo contrario: durante 2011 sólo hubo un caso en el que personal militar fue sentenciado. El gobierno del presidente Calderón se ha comprometido a reformar el sistema de justicia penal militar para excluir las violaciones de derechos humanos pero tal compromiso no se ha cumplido”.
Como en anteriores informes, la campaña Armas bajo control analiza los avances o retrocesos en las ventas españolas de material de defensa.
El actual informe, que corresponde a las operaciones del primer semestre de 2011, denuncia que España continuó realizando operaciones de exportación de armas y material de defensa y seguridad a destinos altamente preocupantes.
La transacción con el gobierno de México alcanzó un monto de 57,76 millones de euros, sólo en ese primer semestre del año pasado, y además de las tres aeronaves de transporte militar y apoyo logístico, se incluyó munición de artillería y un rifle de caza, de acuerdo con el informe que el Ministerio de Economía español remitió al Congreso de los Diputados en enero de 2012.
Las organizaciones señalan sobre México: “En este país la ‘guerra contra los carteles de droga’, lanzada por el presidente Felipe Calderón desde el año 2006 con el empleo de 50 mil militares realizando tareas de seguridad pública, se ha cobrado ya la vida de alrededor de 50 mil personas.
“Los grupos vinculados al crimen organizado, que en muchas ocasiones compran armamento en Estados Unidos, están involucrados en asesinatos, secuestros y violencia indiscriminada, mientras numerosos organismos de derechos humanos, nacionales e internacionales, han documentado las violaciones de derechos, como asesinatos ilegítimos, desapariciones forzadas, la tortura y la detención arbitraria por parte de las fuerzas de seguridad, en particular el Ejército y la Armada”.
Denuncian que “la falta de investigación de las violaciones y la impunidad siguen siendo la norma”.
Precisan que aunque las exportaciones ascendieron a un valor de 57,76 millones de euros, el gobierno mexicano obtuvo otras autorizaciones para adquirir en ese mismo rubro –aeronaves—por un monto de 150 millones de euros.
Las exportaciones en material de caza y tiro deportivo, destinadas a las fuerzas armadas, ascendieron a 611 mil 868 euros, aunque recibieron autorización para otras cuatro operaciones por un valor de 4,3 millones de euros y las de productos y tecnología de doble uso a 700 mil euros (aunque se autorizaron otras tres licencias o transacciones valoradas en 350 mil euros).
Por otra parte, el informe destaca del período analizado las operaciones de exportación de armamento y equipo militar español a gobiernos del Medio Oriente y del norte de África, donde ha tenido lugar la Primavera Árabe, estallidos de protestas multitudinarias espontáneos y pacíficos.
Esos regímenes contra los que se alzan las protestas, y a los que España vende armas, “plantean serias preocupaciones respecto al respeto de los derechos humanos. Esta voluntad de cambio de la población ha chocado con unos gobiernos que no han dudado en emplear la fuerza para intentar preservar un statu quo discriminatorio (…), en este continuado clima de represión, se han suministrado armas, municiones y otro material policial y militar, que luego se usa para matar, herir y detener arbitrariamente a miles de manifestantes pacíficos”.
“Arabia Saudí constituye uno de los casos que más preocupación despierta en las organizaciones, no sólo por las exportaciones del pasado año, sino por las operaciones, actualmente en marcha, que podría culminar en la venta al reino saudí de 250 carros de combate Leopoard”.