Ciudad de México, 25 de septiembre (SinEmbargo).– La fuerza que impulsó a los pequeños grupos humanos a fundirse en sociedades descomunales y anónimas fue la guerra. Esto de acuerdo con un análisis a partir de un modelo matemático que realizaron realizó un equipo de investigadores formado por un grupo interdisciplinar de Estados Unidos y Reino Unido.
Los científicos llegaron a esta conclusión mediante un modelo matemático que simula la evolución de las sociedades humanas a lo largo de la historia. De esta manera, introdujeron factores sobre la geografía, ecología o innovaciones militares de las diversas sociedades, y añadieron un mecanismo de evolución cultural para recrear un periodo de tres milenios años entre el 1,500 a.C. y el año 1,500 de nuestra era, que después cotejaron con el registro histórico.
De esta manera, los resultados indicaron que la creación de instituciones complejas de cohesión social está relacionada con la belicosidad de la sociedad.
Se fijaron límites de tiempo, "porque después del 1500 d. C. la aparición de las armas de fuego marcaron la evolución de los conflictos entre comunidades", dijo el investigador Thomas Currie, uno de los autores del estudio de la Universidad de Exeter.
De acuerdo con los autores, ésta es una muestra de que la aparición y el mantenimiento de instituciones y mecanismos que sirvan para cooperar con individuos con los que no se tiene parentesco se ve influida por la competencia entre sociedades. Una rivalidad que los autores traducen principalmente como enfrentamiento bélico.
No obstante, el enfoque de los investigadores pretende demostrar que la historia no se trata de una simple sucesión de eventos, sino que existen “mecanismos generales en juego que modelan los patrones generales de la historia”.
Por otra parte, el modelo utilizado por los científicos fue capaz de predecir cuándo y dónde surgirían las civilizaciones con sociedades complejas y de gran tamaño con un 65% de acierto.
Según publicó Proceedings of the National Academy of Science (PNAS), la herramienta matemática logró simulaciones sobre mapas geográficos, conflictos entre sociedades y sobre la evolución sociocultural.
"En el modelo, la sociedad que perdía las luchas era absorbida por la ganadora. Este diseño refleja lo que ocurre en el mundo real cuando los imperios se expanden conquistando otras comunidades", agregó Currie.
El estudio afirma que las sociedades son como organismos que pelean entre ellos y aquellas con rasgos que permitan un mayor control del grupo y sean capaces de coordinar a un mayor número de sus miembros, se impondrán a otras sociedades que no cuentan con esos rasgos.
El modelo predijo con una precisión del 65% la localización y fechas en las que surgieron sociedades humanas complejas. Así, gracias a esta simulación se observó, por ejemplo, la manera en que la presión de otras sociedades empujó a los humanos del actual Medio Oriente hacia la civilización o cómo las sociedades agrarias que surgieron en regiones como las cuencas de los ríos Nilo, Tigris y Eúfrates, incrementaron su capacidad para guerrear entre ellas por el contacto con las tribus nómadas de la estepa.
Por su parte, los autores del estudio consideran que este trabajo muestra que la combinación de los datos históricos disponibles y la teoría evolutiva puede desempeñar un interesante papel para lograr responder preguntas sobre la historia humana y la evolución cultural.
Modelos como el empleado por este grupo de investigadores, permite poner a prueba las hipótesis frente a la historia real y averiguar si de esta manera se ajustan mejor o peor a la realidad.
Finalmente,esta se trata de la primera teoría que explica con cálculos matemáticos la conformación de naciones estables por parte de las sociedades. "Ahora podemos explicar los acontecimientos históricos con una precisión cuantitativa", dijo Sergey Gavrilets, otro de los autores de la investigación.