Ciudad de México, 24 de octubre (SinEmbargo).– Al menos 441 nuevas especies de animales y plantas fueron descubiertas en el Amazonas en los últimos cuatro años, de las cuales se cree que muchas son endémicas de esta selva y no se encuentran en otro lugar del mundo, dio a conocer el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
El número total de especies descubiertas por los científicos entre 2010 y 2013 comprende 258 plantas, 84 peces, 58 anfibios, 22 reptiles, 18 aves y un mamífero, según publicó la organización no gubernamental en un comunicado.
"Estas especies son un patrimonio natural único que tenemos que conservar. Esto significa proteger su hogar, el cual se encuentra amenazado por la deforestación y la construcción de represas", dijo Claudio Maretti, líder de la Iniciativa Amazonía Viva de la ONG, quien además hizo hincapié en que eso hace que dichas especies sean aún más vulnerables ante la continua destrucción de la selva del Amazonas.
Por otra parte, dentro de los ejemplares más destacados de este catálogo que fue realizado durante cuatro años, figuran un mono que ronronea como un gato, una lagartija de colores, una piraña vegetariana y una orquídea rosa.
Dentro de estos hallazgos relevantes se encuentra una lagartija de colores, denominada Cercosaura hypnoides, una especie escurridiza que no se ha visto antes en su estado natural y que fue encontrada gracias a las crías que nacieron de unos huevos recolectados por los científicos en la Amazonía colombiana. No obstante, debido a su naturaleza, se cree que puede estar en peligro de extinción.
En lo referente a las otras especies destacadas, también se encuentra la rana diminuta cuyo nombre en latín, Allobates amissibilis, significa "que se puede perder", en clara alusión a la posibilidad de que su hábitat sea desarrollado para fines turísticos. Por si fuera poco, esta que es la tercera especie Allobates que se encuentra en Guyana, también se cree que está en peligro "crítico" de extinción.
Otra rareza es la piraña vegetariana conocida como Tometes camunani, que puede llegar a medir hasta 50 centímetros de largo y pesar hasta 40 kilos.
Este ejemplar habita en los rápidos rocosos caracterizado por su abundancia de plantas, su principal fuente de alimento, y fue encontrada en la cuenca del Río Trombetas, en el Amazonas brasileño.
Así mismo, en las montañas de Guyana fue descubierta una serpiente de colores brillantes, la cual fue nombrada Chironius challenger por el Profesor George Edward Challenger, personaje ficticio de la obra El Mundo Perdido de Arthur C. Doyle.
La flora manifestó también sus novedades en la amazonia brasileña, entre las que se encuentra un gran número de orquídeas, incluyendo la Sobralia imavieirae, oficialmente descrita por los científicos de Roraima, en esta región selvática.
Por su parte, el mono tití de Caquetá (Colombia), es quizá el que mayor atención acapara en estos descubrimientos. Así, el Callicebus caquetensis tiene como una de sus características más notables entre sus crías, las cuales (como los gatos) se ronronean unos a otros cuando se sienten muy contentas, según el científico Thomas Defler.
"Recopilar y actualizar la información sobre estas nuevas especies descubiertas en la inmensidad del Amazonas en los últimos cuatro años nos demuestra cuán importante es esta región para la humanidad, y cuán importante también es investigarla, comprenderla y conservarla", dijo Maretti, quien además advirtió que no se puede "permitir que este patrimonio natural se pierda para siempre".