El próximo 5 de junio, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, candidato del PAN a la Gubernatura de Tamaulipas, podría dar un paso histórico: arrebatarle al PRI una entidad donde ha gobernado 86 años. La posibilidad de lograrlo es grande, pues en la guerra de las encuestas el también Senador de la República lidera las preferencias electorales. Uno de sus objetivos centrales, afirma en entrevista con SinEmbargo, es rescatar Tamaulipas del crimen y en especial de lo que él denomina como la "delincuencia política organizada".
Ciudad de México, 24 de mayo (SinEmbargo).– Tamaulipas, en la frontera norte de México, es una de las entidades más afectadas por el crimen organizado y, hasta la fecha, la única con dos ex gobernadores buscados por la Justicia de Estados Unidos.
Es, también, una de las cinco entidades con elección este 5 de junio y en donde, en 86 años, sólo ha gobernado el Partido Revolucionario Institucional.
Esta permanencia del PRI en el Ejecutivo Estatal, sin embargo, podría terminar en 2016 de cumplirse tendencias como la reportada este mes por la encuestadora Consulta Mitofsky, que atribuyó una ligera ventaja (de 42.9 por ciento de las preferencias) del Senador y candidato del Partido Acción Nacional (PAN), Francisco Javier García Cabeza de Vaca, sobre la candidatura del Diputado federal priísta Baltazar Hinojosa Ochoa.
El también ex Alcalde de la ciudad de Reynosa y candidato panista respondió por escrito a un cuestionario de SinEmbargo.
–De alcanzar la Gubernatura, ¿cuál es su propuesta en materia de combate a la corrupción y al crimen organizado?
–Convocaremos a la integración de un frente intersectorial, público-social-privado, para hacer frente a la corrupción e inseguridad que nos afecta a todos y que tiene a Tamaulipas como una de las entidades peor calificadas en ambos rubros. Aplicaremos diversas acciones anticorrupción, tales como creación de la Fiscalía de Investigación en Delitos de Servidores Públicos encaminada principalmente a la persecución de actos de corrupción; promoveremos una nueva Ley de Responsabilidades Administrativas de los servidores públicos, en donde las penas e infracciones sean más estrictas por ilícitos derivados del ejercicio irresponsable del servicio público. Tanto el Procurador de Justicia del Estado como el Contralor General serán nombrados a propuesta de la sociedad civil y el sector empresarial, respectivamente.
Para el combate al crimen organizado estableceremos una estrategia integral de seguridad que incluya, entre otros aspectos, la instalación de cámaras de video-vigilancia, la puesta en operación de centros de monitoreo en las principales ciudades del Estado y poner en funcionamiento un Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C5); capacitaremos y certificaremos a los cuerpos policiacos estatales en corporaciones de los Estados Unidos de América; crearemos una Fuerza Especializada contra Bandas del Crimen Organizado y, en coordinación con autoridades federales, crearemos la Policía Estatal de Caminos, a efecto de contribuir a la seguridad de los viajantes, así como al transporte de productos y mercancías.
–Diversos indicadores, como las investigaciones en Estados Unidos contra los ex gobernadores priistas Tomás Yárrington y Eugenio Hernández Flores, apuntan a que un número de funcionarios podrían estar relacionados con el narcotráfico en el estado. ¿Cómo hace un político para tratar de derrotar electoralmente a un partido de este “establishment”?; ¿teme por su vida?
–La elección del próximo 5 de junio representa una competencia entre quienes creemos en la democracia y aquellos que aún imaginan que el ejercicio autoritario del poder puede transformar a nuestro Estado. Es la oportunidad histórica que tenemos los tamaulipecos para instaurar un Gobierno democrático que responda al interés general. Reitero, no es una lucha ideológica, ni tampoco una contienda entre partidos políticos. Va más allá. Por eso estamos haciendo un llamado a toda la sociedad tamaulipeca para sumarse a un proyecto incluyente, es una alianza con la gente que ya está cansada de un régimen que nos ha entregado al crimen organizado, somos una opción en la que tienen cabida todas aquellas personas que desean formar parte de la alternancia pacífica. Quienes hemos enfrentado a lo que denomino la delincuencia política organizada debemos temer por nuestra vida. Pero no podemos claudicar en esta lucha que es por el futuro de nuestros hijos y de quienes amamos a Tamaulipas.
–Si hemos visto que en Tamaulipas asesinan a personas que denuncian hechos (como el caso de María Elizabeth Macías Castro en Nuevo Laredo, cuyo cuerpo fue encontrado decapitado) ¿qué protege al actual candidato del PAN que está denunciando las complicidades de la actual clase política con Yárrington? ¿Corre un político de oposición los mismos riesgos que un periodista o usuario de redes sociales en Tamaulipas? ¿Cuál es la diferencia?
–Desgraciadamente el nivel de descomposición política y social que vive el estado, por más que ha querido ocultarse, es indignante. El riesgo es muy alto para los que vivimos aquí: mujeres, jóvenes, niños, adultos mayores. Nos encontramos en un estado de indefensión social. La tragedia de María Elizabeth y de muchos otros comunicadores nos ofende y lastima a la sociedad, pero también nos duelen los más de cinco mil 700 desaparecidos y la desesperación e impotencia de sus familias. Urge salir de la situación de impunidad y zozobra que se vive en Tamaulipas. La única forma es que la sociedad unida nos levantemos en una rebelión de las conciencias y acabemos con el legado del cártel político que ha gobernado en Tamaulipas en los últimos años: Cavazos, Yárrington, Hernández ¿En qué Estado de Derecho donde la ley se haga valer, puedes tener a dos ex gobernadores perseguidos por la DEA [Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos] y no pasa nada? Valor, unidad ciudadana, voluntad y determinación es la única fórmula factible para salir de este escenario de violencia, corrupción e impunidad en la que se ha postrado a Tamaulipas.
–Si gana, va a encontrar recursos limitados, alto endeudamiento y políticos impunes que dejan poca información. ¿Cuál es su propuesta puntual para enfrentar lo que viene [deuda] y no perdonar a los responsables de lo que queda [impunidad]?
–El Gobierno de la alternancia pacífica tiene la obligación de establecer una transición ordenada y sistematizada, como primer acto gubernamental. Exigiremos transparencia y claridad en la entrega de los recursos humanos, financieros y materiales para que, a partir del 1 de octubre, nos dediquemos a la ejecución de programas y acciones gubernamentales en beneficio de los más de tres millones de tamaulipecos. Llevaremos a cabo un manejo responsable de las finanzas públicas, a fin de ser eficientes, eficaces y efectivos en el ejercicio de los recursos para reducir el exagerado crecimiento de la deuda gubernamental. Uno de mis primeros compromisos será la instauración del Tribunal de Justicia Especial, en donde todos aquellos políticos que estén vinculados al binomio corrupción-crimen organizado, serán juzgados y castigados por este órgano. No habrá tregua en mi Gobierno ni a la colusión y menos a la corrupción.
–¿Cómo combinará la necesidad de contar con las Fuerzas Armadas federales en Tamaulipas y, al mismo tiempo, combatir al partido que está en el Gobierno federal?
–Considero que son momentos y aspectos diferentes. En primer lugar, como candidato de oposición al partido que gobierna Tamaulipas y el país, debo señalar aquellos aspectos que afectan de manera negativa las condiciones de vida de los ciudadanos, al mismo tiempo que debo proponer alternativas y propuestas de solución que sean viables. La competencia electoral no debe generar encono entre los actores políticos y mucho menos entre la sociedad; somos rivales políticos pero no necesariamente enemigos. Por otro lado, como Gobernador de Tamaulipas tengo la obligación de ejercer autoridad con total apego a la legislación, lo que me condiciona a establecer canales de comunicación, así como mecanismos de coordinación y colaboración con los gobiernos federal, estatales y municipales. De esta forma, y como parte de nuestro federalismo, es mi deber realizar acciones en coordinación con el Ejército y la Armada de México, así como también con las instituciones responsables a nivel nacional, entre otras, de la política social, económica e internacional.
INSEGURIDAD, ECONOMÍA, CORRUPCIÓN...
–Inseguridad, economía, corrupción, derechos humanos y transparencia son cinco asignaturas donde el fracaso del Gobierno federal es contundente. ¿Cuál es su propuesta para cada una de ellas si alcanza la Gubernatura?
–Como comentaba al inicio de la entrevista. Para el tema de la inseguridad estableceremos una política integral que considere la infraestructura, equipamiento, capacitación, certificación y profesionalización de nuestros cuerpos policiacos. En materia de corrupción requerimos de la participación de los sectores público, social y privado para enfrentar por todos los frentes este flagelo que debilita a las instituciones. En materia económica, es impostergable recuperar la capacidad productiva del campo tamaulipeco, pero también de la industria, de la pesca, de la exportación de mercancías, del turismo. En lo que se refiere a los derechos humanos debemos garantizar la protección de todos los grupos de la sociedad tamaulipeca: niños, jóvenes, mujeres adultos mayores, discapacitados, sin olvidar los derechos de los migrantes. Impulsaremos la transparencia y la rendición de cuentas en las instituciones públicas y de los funcionarios gubernamentales, a través de una política de máxima publicidad de los actos públicos y la presentación de informes periódicos sobre el avance de los proyectos prioritarios del Gobierno del Estado. Además, promoveremos la reconstrucción del tejido social, la recuperación del espacio público, de una política social que incluya a los jóvenes, para evitar perder una generación más de tamaulipecos en la delincuencia.
–La ciudadanía parece estar haciendo la tarea de los gobiernos, impulsando leyes como la “3de3” o participando en tareas que debería cumplir Estado, como la búsqueda de víctimas de desaparición. A esa ciudadanía, a la que está en la calle, en manifestaciones, ¿la va a incluir? ¿cómo?
–La única forma de construir un diálogo directo y efectivo es viendo a los ojos a la gente, a mis paisanos. Siempre lo he hecho y no lo dejaré de hacer jamás. Aquí estarán ustedes los medios de comunicación no sólo para dar fe de mis aciertos, su crítica será fundamental, pero más aún necesitamos hacer de Tamaulipas una causa nacional. Recuperar Tamaulipas es un compromiso fundamental para el Estado mexicano. Tienes razón, cada vez es mayor la participación ciudadana en los actos de Gobierno, por eso instalaremos consejos ciudadanos integrados por especialistas en materia económica, política, social y en temas de seguridad para que intervengan en el diseño, implementación y evaluación de políticas públicas. La participación social es fundamental para avanzar en la consolidación de un sistema democrático que no se agote en los procesos electorales, sino que continúe en las gestiones de Gobierno. El diálogo con la sociedad deberá ser permanente y respetuoso para buscar resolver los problemas que generan inconformidad social, por ello atenderemos a los grupos que tengan alguna demanda específica y que se ubique dentro de las atribuciones de Gobierno.
–Hay sorpresas en 2016: una de ellas, de acuerdo con el consenso de las encuestas el fortalecimiento de Morena [Movimiento de Regeneración Nacional] en sus primeras elecciones estatales, pero también la posibilidad de que el PRI pierda por primera vez en Veracruz, Tamaulipas o Quintana Roo. ¿Cuál es su lectura hacia 2018?
–La oferta partidista es amplia y diversa, además de la incorporación de institutos políticos de reciente creación como Morena y el PES [Partido Encuentro Social], no debemos olvidar la posibilidad que tienen los candidatos independientes de gobernar o representar a amplios grupos sociales. En este escenario, es fundamental la alternancia en el poder como un medio que permite al ciudadano evaluar la gestión que lleva a cabo el representante de tal o cual partido. Lamentablemente, en Tamaulipas, esta situación no se ha presentado en más de 86 años, lo que ha impedido que los tamaulipecos podamos comparar las gestiones de Gobierno a nivel estatal para determinar cuál es la mejor opción. En este contexto, auguro un triunfo del proyecto incluyente que encabezo, el que constituye la principal opción para la alternancia pacífica, mediante la construcción de una alianza ciudadana que encauce la inconformidad con la violencia, inseguridad, corrupción e impunidad que han caracterizado a Tamaulipas en décadas. Para el 2018, tendremos una alta competencia que nos obliga a los actores políticos a brindar lo mejor de nosotros mismos para atender las demandas y requerimientos de una sociedad cada vez más participativa.