Ciudad de México, 19 de junio (SinEmbargo).– Los problemas de contaminación ambiental son una constante en todo el mundo. Sin embargo, hay lugares en los que se presentan con mayor gravedad. Tal es el caso de las principales urbes de China, en donde la calidad del aire es tan mala que ha encendido focos de alerta para las autoridades de manera continua desde hace meses. Sin embargo, la nación asiática no pretende quedarse con los brazos cruzados y ahora planea construir hacer frente a la contaminación y, de paso, construir el edifico más alto del mundo.
Mediante el proyecto Phoenix Towers (Torres Fénix), que está previsto a erigirse en la ciudad de Wuhan, en el centro de China, la empresa británica de arquitectura Chetwoods propuso la construcción de dos torres que superarán en 170 metros al actual edificio más alto del mundo y ayudarán a la ciudad de Wuhan “a resurgir de las cenizas” de la contaminación, por ello su nombre, publicó Business Insider.
Las torres previstas para la ciudad china superarán la altura del que es el edificio más alto del planeta en la actualidad, la torre Burj Khlifa de Dubái que tiene 830 metros de altura, y al mismo tiempo actuarán como purificadores de aire gigantes de color rosa.
El edificio no solo tendrá una altura excepcional (tentativamente mil metros), sino que desempeñará diversas y complejas funciones ambientales, con lo cual la estructura podría ser la clave para resolver el problema de la terrible contaminación que sufre China a todos los niveles. Al mismo tiempo, las torres filtrarán el aire y el agua de Wuhan, servirán para captar energía solar, eólica e hidrogena, y permitirán el cultivo en su inmenso jardín. Asimismo, recolectarán el agua de la lluvia y hervirán biomasa. Finalmente y, a grandes rasgos, “intentarán resolver cualquier crisis ecológica importante a la que se enfrente China central”.
“No sólo se quedarán ahí de pie y se convertirán en un símbolo icónico de Wuhan, tienen que hacer un trabajo”, dijo el creador Laurie Chetwood en una entrevista a Dezeen. “Hemos aplicado tantas ideas ambientales como nos sea posible para justificar la forma y el tamaño de ellas”.
Por otra parte, además de sus habilidades de súper sustentabilidad, una de las mejores cosas acerca de las Torres de Phoenix es que fueron diseñadas por Chetwoods para resonar con la religión y la filosofía local.
De esta manera, las torres vinculan la tecnología occidental y la arquitectura con los mitos chinos del ave fénix. Las dos torres representan el doble género que la legendaria ave tiene en la iconografía china. Así, el espíritu de renacimiento se propaga a lo largo de las torres. Con estas consideraciones espirituales en mente, la empresa hace una oferta de paz a la historia local que padece de la insensibilidad occidental cuando se trata de desarrollo. Por último, las torres también tienen como objetivo atraer el turismo ecológico.
El comienzo de la construcción de las torres está programado para el próximo año, pero se cree que se necesitarán tres años antes de que este ambicioso edificio se levante completamente sobre la ciudad.