Ciudad de México, 16 de agosto (SinEmbargo).– Ivonne Jiménez se dirigía al templo del Ex Marquesado, en el Centro Histórico de Oaxaca, cuando se perdió. Dos días después –el pasado 6 de agosto–, el cuerpo sin vida de la joven de 20 años de edad fue localizado por campesinos en un terreno de sembradío, en el municipio de San Pablo Etla.
Autoridades han descartado emitir la Alerta de Violencia de Género (AVG) en Oaxaca, a pesar de que este año se ha hecho la petición en dos ocasiones.
La más reciente fue solicitada esta semana por la Comisión Permanente de Derechos Humanos del Congreso local, que envió un ofició al Secretario de Gobierno Miguel Ángel Osorio Chong para declarar la alerta para garantizar la seguridad de las mujeres en el estado.
Los legisladores argumentaron su petición con el Informe Civil ¡Justicia Ya!, donde se documentan 220 asesinatos de mujeres en el estado durante los tres últimos años, de los cuales 42 se han cometido de enero a la fecha.
De acuerdo con cifras de la Subprocuraduría de Delitos Contra la Mujer por Razón de Género, de 2010 al 2012 se registraron al menos 235 feminicidios.
El Procurador de Justicia del Estado, Manuel de Jesús López López, descartó activar la alerta de género debido a que no se cumplen los requisitos. En conferencia de prensa dijo que los crímenes contra mujeres no están quebrantando la paz social, por lo que no existe ingobernabilidad, lo cual es necesario para este concepto.
Asimismo aseguró que de los 42 homicidios dolosos que se tienen registrados, sólo 23 son considerados como feminicidios.
La directora general del Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), Anabel López Sánchez, retomó el reporte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y consideró “preocupante” que más de la mitad de los homicidios de mujeres reportados tengan las características de feminicidio.
En su comparecencia ante la Comisión de Derechos Humanos del Congreso del estado, López Sánchez explicó que la violencia contra mujeres no se va a resolver, si no es con esfuerzos coordinados entre el Estado mexicano y la sociedad.
“Porque la violencia feminicida está desbordada desde hace muchos años en Oaxaca, y ahora se nota más porque se denuncia más”, dijo.
Las declaratorias de alerta obligan a los gobiernos a seguir ciertos protocolos de protección. Pero son altamente impopulares entre las autoridades porque ponen en evidencia la mala administración en los aparatos locales de justicia. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se ha opuesto de manera sistemática a que se declare en el Estado de México, por ejemplo.
Pero el gobierno de Oaxaca, de Gabino Cué, es de izquierda. Por lo menos en teoría. Y también se oponen a que se detone la alerta.
CAMPAÑAS CONTRA FEMINICIDIO
La exigencia de organizaciones no gubernamentales de poner un alto a los feminicidios en el estado se ha incrementado en los últimos meses.
Después de la muerte de Elizabeth Martínez Cruz y de Dafne Dechanez Carreño, de 16 y 21 años respectivamente, ocurridas en marzo de este año. Diversas organizaciones se unieron para exigir justicia por los delitos cometidos durante la administración de Cué Monteagudo.
El fin de semana pasado, mujeres integrantes de diferentes organismos no gubernamentales protestaron frente al Palacio de Gobierno estatal y a la Catedral Metropolitana para a exigir alto a los feminicidios en el estado y castigo a los responsables.
“Soy tu prima”, “Somos todas”, “Soy tu compañera”, se leía en la piel de las manifestantes que utilizaron su cuerpo como pancartas humanas.
Ellas exigían justicia para las 222 mujeres, según informes de organizaciones no gubernamentales, que perdieron la vida por razones de género durante la administración actual.
En redes sociales, la queja por el aumento de delitos contra mujeres se intensificó con el asesinato de Ivonne Jiménez. Con el hashtag #NiUNAmuertaMAS, usuarios piden esclarecer los asesinatos.
También circula una petición de change.org en la que demandan justicia por los cientos de homicidios ocurridos durante la administración de Gabino Cué.
Las mujeres Oaxaqueñas tenemos derecho a la vida y al respeto, estamos cansadas de no ver respuesta del gobierno. ¡Queremos vivir sin miedo! ¡No más violencia contra las mujeres! ¡No más impunidad! ¡No más muertas! Dice la petición.
EL CASO OAXACA
Según el Estudio Nacional Sobre las Fuentes, Orígenes y Factores que Producen y Reproducen la Violencia Contra las Mujeres, las nueve entidades que registran una tendencia creciente de homicidios de mujeres son Chiapas, Chihuahua, Distrito Federal, Durango, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Sinaloa y Sonora.
Sin embargo, la tipificación del feminicidio en Oaxaca (agosto de 2012) no ha frenado la incidencia de estos delitos. Ana María Hernández, directora de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad-Oaxaca, denunció que desde que entró en vigor el tipo penal, los feminicidios no han disminuido.
Y tampoco se ha aprobado emitir la alerta de género.
De acuerdo, con el artículo 24 la declaratoria de alerta de violencia de género contra las mujeres se emitirá cuando los delitos del orden común contra la vida, la libertad, la integridad y la seguridad de las mujeres, perturben la paz social en un territorio determinado y la sociedad así lo reclame.
También establece como requisitos que “exista un agravio comparado que impida el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres” y que “los organismos de derechos humanos a nivel nacional o de las entidades federativas, los organismos de la sociedad civil y/o los organismos internacionales, así lo soliciten”.
Pero más de 200 homicidios en tres años, no son suficientes.
