Durante las primeras horas de este lunes, un comando ingresó a un restaurante en Puerto Vallarta para llevarse por la fuerza a un grupo de comensales. Aunque medios locales refieren que fueron al menos diez levantados la fiscalía logró determinar de fueron 6 o 7 varones. Por ahora las autoridades se encuentran en proceso de investigación, y según el Gobierno de Jalisco, a partir de las 13:00 horas de hoy se darán a conocer los primeros “informes de las pesquisas”.
Ciudad de México, 15 de agosto (SinEmbargo/EFE).– Un grupo de hombres armados privó de la libertad a varias personas que se encontraban al interior del restaurante “La Leche”, ubicado en la zona hotelera de Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco.
El Fiscal General de Jalisco, Eduardo Almaguer, informó en conferencia de prensa que alrededor de la 1:05 de la madrugada de este lunes, al menos cinco sujetos a bordo de dos vehículos irrumpieron en el lugar y se llevaron entre 6 y 7 personas originarias de Sinaloa, Nayarit y Jalisco, entre ellas se encuentra un hombre “que pudo ser” escolta de Emilio González Márquez, ex Gobernador de Jalisco.
Detalló que en el lugar se aseguraron cinco vehículos, en los que se encontraron “algunos objetos” que hacen pensar que los propietarios, que aún no son identificados, pertenecen a un grupo delictivo.
“Por los indicios encontrados en los vehículos pertenecientes a estas personas [las víctimas] se ha podido establecer la presunción clara de que pertenecen a un grupo delictivo”, afirmó el Fiscal, pero se negó a revelar el nombre de la organización.
Aseguró que la Fiscalía tiene indicios “muy claros” de que el ataque fue realizado por miembros de un grupo armado rival que tampoco quiso identificar.
“Quienes actuaron, presumimos con la información que tenemos, pertenecen a un grupo delictivo que actúa contra integrantes de otro grupo delictivo que ubicaron aquí en Puerto Vallarta”, indicó.
Aunque se especula que los secuestrados son miembros del cártel de Sinaloa, hasta el momento las autoridades no han confirmado dicha información. Sin embargo, la hipótesis de que se trata de un ajuste de cuentas entre el crimen organizado se ve reforzada por el hecho de no se ha levantado ninguna denuncia por la desaparición de la personas cuyos vehículos permanecen abandonados en el restaurante.
De acuerdo con reportes preliminares, los agresores irrumpieron en el lugar de modo que secuestraron a un grupo de hombres, siendo que sus acompañantes femeninas fueron hacinadas en la parte superior del restaurante, lugar en donde se encuentra el bar “La Nata”.
La última vez que vieron a los individuos fue cuando los encapuchados los subieron a dos camionetas, una de marca Tacoma y otra Tundra.
Los primeros reportes detallan que las personas levantadas llegaron al comercio en vehículos de lujo provenientes de Jalisco, Sinaloa y Nayarit, inclusive habiendo presencia de escoltas, mismas que fueron desarmadas por el comando.
Por su parte, Gonzalo Sánchez, vocero del Gobierno del estado, publicó en Twitter que actualmente se están realizando las indagatorias necesarias para esclarecer los hechos, además anunció que a partir de las 13:00 horas del día de hoy se darán a conocer los primeros “informes de las pesquisas”.
De acuerdo con personal de la Policía Municipal y de la Fiscalía, cerca de la 1:00 de la mañana de este lunes acudieron al lugar de los hechos, junto a un Hotel Fiesta Americana y enfrente de la Plaza Caracol, luego de ser avisados acerca de un grupo de encapuchados con armas largas que ingresaron a un negocio para llevarse a unas personas.
Hasta el momento el lugar se encuentra cercado por elementos de Seguridad Pública de modo que puedan proseguir con la carpeta de investigación.
El sitio se anuncia como “un divertido, delicioso y extraordinario espacio para convivir”, pero este día el restaurante La Leche en el occidental estado mexicano de Jalisco se convirtió en aparente escenario de uno de los interminables ajustes de cuentas entre grupos criminales.
El lujoso restaurante en el que ocurrieron los hechos es un local de peculiar diseño descrito en su página web como “minimalista y contundente”, el cual “propone una atmósfera monocromática en donde se busca que cada comensal despierte sus sentidos al interactuar con estimulantes platillos en un espacio concebido como un lienzo”.
El inmueble poligonal cuenta con una planta alta llamada La Nata que funciona como “bar privado para las personas que quieren ir por un trago y relajarse antes o después de cenar”.
Jalisco, estado del occidente de México en la ribera del Pacífico, ha sido durante décadas foco de actividad del crimen organizado.
En la actualidad es el centro de operaciones del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que surgió en 2010 como una célula del cártel de Sinaloa y tiene presencia en al menos siete estados más y en la Ciudad de México.
El CJNG ha realizado numerosos ataques contra las fuerzas federales, como una emboscada del 19 de marzo del año pasado en la que murieron cinco miembros de la Policía Federal y dos civiles en el municipio de Ocotlán.
El ataque en Ocotlán marcó el inicio de una escalada de violencia en Jalisco atribuida a esa agrupación delictiva.
Este grupo criminal se disputa Jalisco con el cártel La Resistencia, vinculado con los Zetas. De hecho, en un principio los miembros del CJNG se hacían llamar “los Matazetas”.
A su vez, los Zetas son un grupo integrado por desertores del Ejército en 1999 que surgió como brazo armado del cártel del Golfo, del que se separaron en 2010.
Desde entonces han protagonizado algunos de los episodios de violencia más cruentos del país, entre ellos la matanza de 72 migrantes, la mayoría centroamericanos, ocurrida en agosto de 2010 en el municipio de San Fernando, estado nororiental de Tamaulipas.