En Chiapas, Francisco arrancará su jornada en San Cristóbal de Las Casas con la misa. Luego estará en la Catedral con ancianos y enfermos, visitará la tumba de Samuel Ruiz y comerá con ocho indígenas. Por la tarde se trasladará en helicóptero a la vecina ciudad de Tuxtla Gutiérrez para un encuentro con jóvenes.
Ciudad de México, 14 de febrero (SinEmbargo).– El Papa Francisco se adentrará mañana en Chiapas en un terreno que fue pantanoso durante muchos años para el Vaticano: el de la teología de la liberación y de la opción comprometida por pobres e indígenas.
En San Cristóbal de Las Casas, el Papa celebrará una misa para los indígenas y estará en la Catedral de muros amarillos desde donde el Obispo Samuel Ruiz (1924-2011) impulsó una evangelización radical, que incluía levantar la voz contra la injusticia y la opresión.
Ahora la Iglesia local es encabezada por el Obispo Felipe Arizmendi, un hombre más moderado que Ruiz, pero que dio continuidad a su trabajo y logró acercar al Papa argentino a la realidad de lo que él llama la "teología india" y disipar las dudas.
A diferencia del sector dominante en la Iglesia mexicana, en San Cristóbal de Las Casas hay una vinculación más profunda entre el evangelio y la realidad de millones de indígenas marginados.
En un pronunciamiento previo a su visita en Chiapas, las organizaciones integrantes de la Red por la Paz Chiapas y Melel Xojobal, que trabajan en la promoción y defensa de los derechos humanos en la región, expresaron su preocupación por diversos conflictos sociales y violaciones de derechos humanos que afectan a la armonía, la convivencia y la seguridad de las personas que viven y transitan en esa entidad.
Las organizaciones destacaron siete conflictos importantes en las que piden la intervención del Papa para resolverlos:
Conflicto Armado Interno: En esta petición, los integrantes de la Red por la Paz Chiapas y Melel Xojobal, recordaron que desde el levantamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1994, el Estado mexicano ha implementado una política de “contrainsurgencia que fomenta conflictos intercomunitarios, desplazamientos forzados, crímenes de lesa humanidad, agresiones de todo tipo, como el asesinato del Maestro Zapatista Galeano en mayo de 2014”.
Indicaron que la respuesta del gobierno a estos levantamientos conlleva a una descomposición social, que polariza a las comunidades y organizaciones sociales, generando pocas posibilidades de solución a los conflictos, obstaculizando con ello los proyectos de autonomía de los pueblos y comunidades zapatistas, así como de otros pueblos organizados que se plantean su propio camino para resolver sus problemas desde sus propias formas y modos de organización.
Desplazamiento interno forzado: En el pronunciamiento, las organizaciones chiapanecas destacaron que hay un amplio número de desplazamientos forzados en el estado debido a las amenazas recibidas por los conflictos agrarios, religiosos o políticos que no fueron atendidos a tiempo por el gobierno de Chiapas.
“Debido a la inacción del Estado en su deber de garantizar los derechos humanos, existen pocas posibilidades de retorno a sus comunidades de origen. Algunos casos son los desplazamientos de Banavil, Tenejapa; Comunidad Primero de Agosto, Las Margaritas; San Marcos Avilés, Chilón; Shulvó, Zinacatán, entre otros”, refiere el comunicado.
Agresiones a defensores: En los últimos meses, mencionan las organizaciones, ha habido un aumento de agresiones, hackeos, allanamientos, amenazas e intimidaciones a defensores y defensoras de derechos humanos. Destacaron el caso de las amenazas de muerte en contra del párroco de Simojovel, Marcelo Pérez; o el caso de Julio César Ortega y su familia, integrante del equipo del Centro Indígena de Capacitación Integral.
Mujeres: La situación de discriminación y violencia en contra de las mujeres en Chiapas es otra de las preocupaciones de las organizaciones. “Diversas voces han pedido el otorgamiento de la Alerta de Violencia de Género para Chiapas, pero la omisión del Estado ante esta petición continúa fomentando la inseguridad entre las mujeres”, señalaron.
Por otro lado, recordaron que la condición de pobreza y marginación en que se encuentran cientos mujeres las hacen dependientes de apoyos y programas de gobierno que buscan como fin generar un control de tipo social que atenta no sólo a su dignidad, y sino a una serie de derechos como la salud, la alimentación o la participación política.
Impunidad: El sistema de procuración e impartición de justicia en el estado de Chiapas es otro de los puntos que destacan las organizaciones. “Las y los campesinos e indígenas se encuentran todavía más vulnerables por un sistema lento y oprobioso que en muchas ocasiones funciona mal.
Algunos casos paradigmáticos han sido la masacre de Acteal en 1997; la liberación de los asesinos del Maestro ZapatistaGaleano en 2014; así como la violación en 1994, a tres mujeres indígenas tseltales en el municipio de Altamirano en el contexto de guerra de baja intensidad, entre otros”, mencionaron.
Tierra y territorio: En este tema, las organizaciones firmantes, recordaron que algunas de las tierras en Chiapas se encuentran amenazadas por la reciente Reforma Energética que declara como de utilidad pública a la industria de tipo extractivista, “generando con ello incertidumbre para los pueblos que defiendan sus territorios por despojos o expropiación, aunque existan mecanismos de consulta previstos en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que en distintos contextos, incluso ha resultado insuficiente para revertir dicha indefensión”.
Los niños: De acuerdo con las organizaciones, Chiapas tiene el porcentaje de población infantil más alto de todo el país: 4 de cada 10 personas tienen menos de 18 años, de los cuáles el 8 de cada 10 vive en condiciones de pobreza, y 4 de cada 10, de 0 a 4 años, padecen algún tipo de desnutrición.
Las organizaciones pidieron al Papa que exhorte a los gobiernos estatal y federal a que respeten, garanticen y protejan los derechos humanos, resguarden y garanticen un verdadero Estado de derecho y que atiendan las causas que generan los conflictos y situaciones sociales desfavorables para la población, además de que presten atención a sus obligaciones y responsabilidades políticas, sociales y jurídicas que permitan una vida más justa, digna y en paz en Chiapas.
"El Papa Francisco, latinoamericano, tiene en el corazón esta inquietud que tiene la Iglesia latinoamericana, que son los pobres, que son las situaciones conflictivas que vivimos", dijo el Obispo Arizmendi antes de la visita.
Será otro hito en una visita papal que arrancó desde el primer día con fuerza y con un mensaje de denuncia de la injusticia, los privilegios de unos pocos, la indiferencia ante el sufrimiento.
En San Cristóbal la misa incluirá lecturas en lenguas indígenas. Participarán diáconos indígenas con sus esposas y el Papa emitirá un decreto para el reconocimiento del náhuatl -la lengua de los aztecas- en las ceremonias.
Las organizaciones que integran la Red por la Paz Chiapas son el Centro de Derechos de la Mujer Chiapas, A.C (CDMCH), Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas A.C (Frayba), Centro de Derechos Indígenas A.C (CEDIAC), Servicios y Asesoría para la Paz A.C (SERAPAZ), Comisión de Apoyo a la Unidad y Reconciliación Comunitaria, A.C (CORECO), Comité de Comité de Derechos Humanos Fray Pedro Lorenzo de La Nada A.C (CDHFPLN), Desarrollo Económico y Social de los Mexicanos Indígenas, A.C. (DESMI), Educación para la Paz, A.C. (EDUPAZ), ENLACE, Comunicación y Capacitación, A.C. (ENLACE CC), Servicio Internacional para la Paz (Sipaz) y Melel Xojobal A.C.
FRANCISCANOS VIAJAN A CHIAPAS
Un grupo de religiosos franciscanos, que ayudan a grupos de indígenas y migrantes centroamericanos en el sureste de México, se desplazó el domingo hasta Tuxtla Gutiérrez para escuchar al papa Francisco en el encuentro con las familias y compartir después ese mensaje entre los desarraigados.
Vestidos con sotanas marrón, el fraile Enrique Pool Paredes y varios estudiantes a un seminario franciscano llegaron hasta los alrededores del estadio de fútbol del club Jaguares de Chiapas, en donde se realizará el encuentro el lunes por la tarde, después de que el pontífice celebre una misa con los indígenas en San Cristóbal.
"Esto nos motivará y nos dará fuerza para seguir ayudando a esas familias que están necesitadas y puedan salir adelante", dijo Jesús Edilberto, de 19 años y de un seminario en Izamal, Yucatán, en el sureste mexicano. "El papa sigue las huellas de San Francisco de Asís y por eso nos alienta estar aquí y escuchar su mensaje".
El padre Pool Paredes y los seminaristas se desplazan por diversas regiones del sureste, incluyendo el municipio de Tenosique en Tabasco, para ayudar y orientar a familias indígenas y migrantes de América Central. En Tenosique funciona la Casa del Migrante o la "72", bautizada así en memoria de los 72 migrantes centroamericanos masacrados en San Fernando, Tamaulipas, en 2010 por una banda del crimen organizado.
"Allí llevamos nuestro mensaje pastoral y ayuda psicológica a mucha gente que llega a diario", dijo Pool Paredes, emocionado por la experiencia que vivirá el lunes junto a millares de chiapanecos. Capital del estado de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez esperaba al pontífice con carteles en sus calles en los que se leía "Papa Francisco en Chiapas con los brazos y el corazón abiertos. ¡Te esperamos!".
EL PAPA EN ECATEPEC
Hoy, en la misa más multitudinaria que celebró en suelo mexicano, con participación de 300 mil personas, Francisco pidió a los creyentes comprometerse contra la injusticia y evitar las tentaciones de la riqueza, la vanidad y el orgullo.
"Metámoslo en la cabeza: con el demonio no se dialoga, no se puede dialogar porque nos va a ganar siempre", dijo Francisco, saliéndose del discurso que llevaba preparado para la misa al aire libre en Ecatepec, un suburbio inseguro y muy poblado, vecino a la capital.
Bajo un fuerte sol, el Papa pidió a "abrir los ojos" frente a la injusticia en una sociedad "de pocos y para pocos".
Luego, en el Ángelus, rezó por los migrantes y por un México "donde no haya necesidad de emigrar para soñar" y donde no se tenga que llorar a hombres y mujeres destruidos en manos de "traficantes de la muerte".
A continuación pasó por el seminario en Ecatepec y dejó escrito un mensaje breve y contundente, que fue nuevamente un golpe de guante blanco contra la jerarquía eclesial mexicana.
Que Jesucristo y la virgen "los preparen para ser pastores del pueblo fiel de Dios y no 'clérigos de Estado", apuntó de puño y letra, según la imagen que difundió el sacerdote jesuita Antonio Spadaro, en su cuenta de Twitter.
En la víspera el Papa había cuestionado con un fuerte discurso, el más largo de los que ha pronunciado en México, a los obispos mexicanos, a quienes les pidió alejarse del "materialismo trivial" y no comportarse como "príncipes".
En Chiapas, Francisco arrancará su jornada en San Cristóbal de Las Casas con la misa. Luego estará en la Catedral con ancianos y enfermos, visitará la tumba de Samuel Ruiz y comerá con ocho indígenas. Por la tarde se trasladará en helicóptero a la vecina ciudad de Tuxtla Gutiérrez para un encuentro con jóvenes.
–Con información de Por Andrea Sosa Cabrios, dpa