El aguinaldo del Presidente Enrique Peña Nieto en 2016 tendrá una reducción de apenas 41 pesos, un ajuste que no le dolerá al bono del Ejecutivo federal debido a que, gracias a su gratificación de fin de año, recibirá en total 425 mil 441 pesos.
Ciudad de México, 13 de diciembre (SinEmbargo).– La fecha es la misma para todos, según lo establecido en el artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo, los trabajadores mexicanos deberán recibir su aguinaldo antes del 20 de diciembre. Lo que desafortunadamente no es lo mismo, es el monto de esa prestación.
En el último tramo de 2015, en el discurso de Ejecutivo federal se habló de que al Gobierno le tocaba “apretarse el cinturón” respecto a las finanzas públicas. Sin embargo, en el caso del aguinaldo del Presidente Enrique Peña Nieto, ese ajuste para 2016 fue sólo de 41 pesos.
Según el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) de 2015, el Presidente recibirá de aguinaldo 81 mil 899 pesos, pero más 343 mil 579 pesos que recibirá por concepto de “gratificación de fin de año”, tendrá 425 mil 478 pesos para las fiestas decembrinas. Para 2016, el monto de su aguinaldo sólo sufrió una disminución de 41 pesos.
La cifra, comparada con la de un trabajador muestra una brecha amplia, a pesar de que a finales de septiembre la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) y la Secretaría del Trabajo y Presión Social (STPS) anunciaron la homologación del salario mínimo en todo el país y que lo coloca en 70.10 pesos.
Así, un trabajador con salario mínimo recibirá mil 51 pesos de aguinaldo, el 1.2 por ciento del aguinaldo del Presidente; o el 0.24 por ciento si al aguinaldo se le suma la gratificación.
El monto del aguinaldo es, por lo menos, equivalente a 15 días de salario y se debe entregar máximo cuatro días antes de Noche Buena. Los trabajadores que no hayan estado un año completo en el sitio de trabajo actual, de igual forma deben recibir una parte proporcional con base en el tiempo trabajado.
De acuerdo con la STPS, el salario que sirve de base para cuantificar el aguinaldo es el que ordinariamente se percibe por día laborado y no el “integrado” por las prestaciones.
En los años recientes, diversas cámaras empresariales han exhortado a los empleadores a que adelanten el pago del aguinaldo para que los trabajadores puedan realizar compras durante el Buen Fin, lo que incrementa a posibilidad de que este dinero sea destinado para el pago de deudas.
¿MÁS COMPARACIONES?
En el año de “apretarse el cinturón” y de recortes presupuestales, de acuerdo con el PEF, un Diputado cobrará un aguinaldo de 140 mil 504 pesos, mientras que un albañil, que goce de un contrato, recibirá mil 533 pesos de aguinaldo por jornadas diarias de 102 pesos.
La gratificación para un Senador de la República será de 234 mil 330 pesos, mientras que para un soldador será de mil 329 pesos.
El aguinaldo que supera en monto al del Presidente es el de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), quienes recibirán 586 mil 449 pesos. Para llegar a esa cantidad, un velador que recibe un sueldo diario de 90.50 pesos tendría que trabajar 385 años.
La lista puede continuar con el Consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdoba Villalobos, que recibirá un aguinaldo 44 mil 597 pesos, más 342 mil 516 pesos por gratificación. Por otro lado, Alejandra Palacios Prieto, consejera presidenta de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), recibirá por concepto de aguinaldo y gratificación 403 mil 800 pesos, al igual que Gabriel Contreras, consejero presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), quien se ingresará bonos por 366 mil 258 pesos.
Mientras, con el aumento al salario mínimo, el aguinaldo de un zapatero es de mil 376 pesos y el de un mostrador de farmacia de mil 333 pesos.
De acuerdo con una investigación encabezada por el doctor Marcos Gutiérrez Barrón, de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), de 49 millones de trabajadores en México sólo 19 millones recibirán aguinaldo y cerca de 30 millones no podrán recibirlo por laborar en el sector informal o por estar en el sistema de contratación vía outsourcing .
En cuanto al destino del dinero, la investigación arrojó que el 44 por ciento lo utiliza para el pago de deudas, el 23 por ciento para la compra de alimentos y compras de fin de año, y el 31 por ciento para gastos de salud y/o el pago de servicios.