Ciudad de México, 13 de septiembre (SinEmbargo).– Antonio “La Tota” Carvajal fue comprado por 11 balones que el Club España le entregó al Club Oviedo. Era 1942 y el futbol aún se jugaba más con el corazón que con parados tácticos. El mítico portero mexicano posee el récord de más mundiales jugados (5) junto con el alemán Lothar Matthäus. Guanajuatense de nacimiento, es hoy una voz autorizada para hablar de aquello que él ayudó a cimentar. La selección nacional vivía tiempos de experimentación. Las derrotas sufridas diseñaron un camino que puede estar a punto de truncarse.
Carvajal fue testigo del primer punto mundialista para México en Suecia 58, sexta edición de la Copa del Mundo, cuando un gol de Jaime Belmonte en el último minuto del partido logró el empate frente a Gales. También presenció el nacimiento de una locura pasional cuando cuatro años más tarde en Chile 62, la selección nacional lograba salir del último lugar general de la competencia con su primera victoria en la historia frente a Checoslovaquia. La Tota jugaría unos minutos en Inglaterra 66 con una ovación de todo el público, para después retirarse dejado implantado un récord que duraría 29 años.
“Merecemos lo que nos está pasando”, declaró en una entrevista para mediotiempo.com, refiriéndose al presenta paupérrimo del TRI que está a las puertas de quedarse fuera de la Copa del Mundo de Brasil. “Es el fracaso más grande en la historia de la selección nacional”, dice sin reparo un tipo que ayudó a construir un legado. México dejó de ser último lugar en mundiales para imaginar competir en base al trabajo colectivo. Con más de 120 millones de habitantes, este país no encuentra 11 futbolistas capaces de dar el salto de calidad a la élite.
Cuatro años antes del primer mundial en México, Carvajal se retiró. En 1970, una afición se quedó con ganas de ver al ídolo defendiendo el arco nacional. La Tota después fue director técnico. Desde el banco también dejó un récord muy raro en estos lares de impaciencia. Durante 10 años dirigió al Morelia donde formó un cuadro que pudo hacerle frente a los poderosos de siempre. Don Antonio Carvajal se acostumbró a construir historias, a encaminar instituciones hacia la estabilidad futbolística siempre con la mira en ganar.
Ese mismo personaje histórico, es requerido en un sinfín de situaciones. Su voz es siempre bienvenida. Con el panorama oscuro, aquello que él edificó, merece la dureza de sus palabras. “Me arde la cara de vergüenza cuando dicen que los países centroamericanos han avanzado, porque eso quiere decir que nosotros nos hemos quedado parados”, dice con la sinceridad de antaño, esa que no mediaba el tono ni se preocupaba por las consecuencias. Al Tri, a falta de dos partidos para el final del hexagonal, le llueven críticas por doquier.
Rememorando las críticas sufridas, La Tota se plantea una pregunta que le quema la cabeza a todos los aficionados de este país. “En mi tiempo nos decían los ‘ratoncitos verdes’ y teníamos muchas carencias, no había lo que hay ahora, por eso hoy que lo tienen todo, ¿qué pasa?, simplemente hay que decir fuera directivos, fuera entrenadores y fuera jugadores que no tienen nada que hacer en Selección", sentenció. Un tipo que le dio el primer punto y la primera victoria mundialista, aboga por gente que entienda lo que costó tener todo lo que hoy simplemente se ha desaprovechado.