Ciudad de México, 11 de febrero (SinEmbargo).– Organizaciones civiles en defensa de los derechos de los consumidores exigieron al Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) declarar a Telcel, Telmex y Televisa agentes económicos preponderantes en los mercados de telefonía celular, fija y de televisión abierta.
Por medio de un comunicado de prensa, Al Consumidor y El Poder del Consumidor demandaron el establecimiento de una legislación asimétrica que abra dichos sectores a la competencia.
«La concentración de estos mercados no sólo ha significado el robo a los consumidores con algunas de las tarifas más altas en telefonía y televisión por cable, también un servicio de mala calidad, al no existir opciones. Tan grave o más que lo anterior ha sido el efecto que ha tenido la predominancia en el mercado de la televisión que ha dañado los procesos democráticos y la producción cultural de nuestro país», dijo Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor.
Por su parte, Daniel Gershenson, de Al Consumidor, explicó que «contener a los actores que avasallan el mercado de las telecomunicaciones y la televisión», es una tarea impostergable del Estado mexicano.
«Es absolutamente necesario fomentar, ahora sí y aunque sea algo tarde, la competencia que garantice mejores y más asequibles servicios y una defensa frontal de usuarios y audiencias mediante mecanismos adecuados de regulación y seguimiento», señaló Gershenson en el texto reseñado por la prensa.
Ambas organizaciones civiles pidieron al Ifetel tomar las decisiones necesarias para la desagregación de esos agentes preponderantes como es el caso de Telmex, y lanzar la licitación de las frecuencias de televisión para la creación de las dos nuevas cadenas de TV nacional abierta.
Al gobierno federal le pidieron cumplir con su compromiso de entregar al legislativo la iniciativa para la ley secundaria en materia de telecomunicaciones “basada en la defensa de los derechos de las audiencias, los consumidores y usuarios”.
Dicha legislación, precisaron, debe incluir la prohibición de publicidad de comida chatarra en horarios infantiles, a fin de dar congruencia a la Estrategia Nacional para la Prevención y Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes.
“Hemos presenciado la guerra entre los empresas preponderantes, entre los grandes monopolios y duopolios, cada quien defendiendo sus propios intereses sin que se le dé voz a los consumidores, usuarios y audiencias. Como organización de consumidores hemos sido víctimas de la censura de Televisa y TV Azteca cuando quisimos contratar espacio para un anuncio que exponía los daños en la salud de los refrescos. A ese grado ha llegado el poder de las televisoras: a impedir, incluso, la compra de un espacio comercial para difundir información para la salud y que es contraria a los intereses de uno de sus anunciantes. Olvidando que son concesiones de interés público”, indicaron.
