Después del desastre, Pemex y el Ayuntamiento de Salinas del Marqués otorgaron empleos temporales a los habitantes del municipio para que ayuden con la limpieza de las playas. Los trabajadores entran a las 7 de la mañana y permanecen en el lugar hasta las 4 de la tarde. Se encargan de limpiar la superficie de la arena.
Ciudad de México.- Pescadores de Salinas del Marqués, Oaxaca, enfrentan estos días la limpieza de sus playas, después de que se produjera un derrame de crudo que está afectando a su actividad económica y del que todavía desconocen el daño medioambiental que puede acarrear.
El incidente se produjo el pasado 9 de octubre, cuando se dio un “acto vandálico” en el ducto de la Terminal Marítima de Salina Cruz, Oaxaca, según informó la empresa estatal Petróleos Mexicanos.
El derrame, que quedó controlado al día siguiente, se suma a otro ocurrido el 7 de septiembre, el día en el que un terremoto de magnitud 8,2 sacudió el centro y sur del país, aunque este tuvo mucho menos impacto.
“Nunca habíamos visto tanto petróleo en el mar”, afirma a Efe Raúl Gallegos, presidente de la Cooperativa de Producción Salineros de la Costa del Marqués.
La mancha, que de acuerdo con Gallegos llegó a alcanzar aproximadamente 6 kilómetros de largo y 2 de ancho, ha perjudicado la tarea de quienes se dedican a atrapar productos como el camarón, el ostión, la langosta y el pulpo.
También ha golpeado el turismo, porque el crudo ha llegado hasta una de las playas, y el pescador considera que podría estar en riesgo la actividad de los salineros, si el agua, la materia prima para la cristalización, siguiera contaminada en un futuro.