Ciudad de México, 9 de julio (SinEmbargo).– El domingo pasado, cuando el dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano Grijalva, volaba hacia Baja California, Graciela Saldaña, candidata a la alcaldía al municipio de Benito Juárez (Cancún), Quintana Roo, contestaba el teléfono con una voz desalentada.
Eran las 7:30 de la tarde, hora y media después del cierre de las casillas en Cancún. Saldaña ya sabía que los resultados no le favorecían y que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) le había arrebatado el municipio al PRD.
–Vamos muy parejos y hay muchos votos nulos –contestó con desgano–. Todavía no tengo los resultados definitivos.
Dos horas después, a las 9:30 de la noche, ni Saldaña, ni Julio César Nava, presidente del PRD Estatal en Quintana Roo, contestaban sus teléfonos celulares.
Ayer Zambrano confirmó que el PRI “se llevó el carro completo en Quintana Roo” gracias “al terrorismo” y “al turismo electoral” que el Gobernador priista, Roberto Borge, llevó a cabo en el estado a través de intimidación, amenazas, compra del voto y agresiones directas a los candidatos de la oposición, tanto del PRD como del PAN.
Lo mismo sucedió en varios municipios de Veracruz, Zacatecas, Hidalgo, Aguascalientes, Sinaloa, Coahuila y del resto de las entidades donde hubo elecciones.
Algunos analistas dicen que los perredistas se han confirmado, en esta elección, como una tercera fuerza electoral, no esa segunda que presumían apenas un año antes.
Aunque el dirigente nacional del PRD aún no rinde cuentas, con porcentajes globales, sobre las votaciones del domingo, dijo que muchos estados se recuperaron y que ganaron territorio.
“A pesar de todos, vamos a gobernar Veracruz. Ahí prácticamente se incrementaron cien por ciento nuestros municipios gobernados y la población”, señaló, optimista.
Zambrano presumió triunfos en Oaxaca y Sinaloa y hasta en Zacatecas, donde admitió que debido al asesinato de su coordinador de campaña en la víspera de la elección, ganaron 17 municipios de mediana importancia.
Pero Armando Contreras Luna, secretario de Alianzas del partido, no coincidió con el dirigente nacional.
Para que el PRD incremente su participación dentro de las votaciones de este año, dijo, debe superar el 24% del total de los votos que obtuvieron en 2010 en elecciones similares.
De acuerdo con los perredistas, los comicios del domingo no se leen a la luz de las elecciones federales del año pasado, donde el PRD se colocó como la segunda fuerza política con su candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, sino con las locales de 2010, las intermedias de 2009 (donde cayó hasta 14%) e incluso con las locales de 2007.
En varias ocasiones, durante las campañas electorales de este año, las estimaciones del Secretario de Alianzas del partido, Armando Contreras Luna, fueron de una aspiración real para obtener entre 18 y 20%.
Contreras Luna explicó que la fallida estrategia de alianzas electorales y el actuar del PRI en los 14 estados donde hubo elecciones, obtener estos resultados sería difícil.
“Teníamos buenas expectativas en Cancún y se nos vinieron abajo. En Sinaloa es un desastre la alianza con el PAN. En Zacatecas, hace año y medio, teníamos Gobernador perredista. En estas elecciones quedamos muy abajo”, dijo.
“En términos generales, los resultados son malos. Si alcanzamos el 15%, es mucho”, expresó.
Lo cierto es que, con los datos obtenidos hasta el momento, la derrota de Cancún no es la única. Los perredistas no sólo retrocedieron en entidades como Veracruz, Hidalgo, Chihuahua o Coahuila.
En Quintana Roo, casi los expulsan del Estado: El PRI y aliados se llevaron carro completo. Los municipios y casi en todos los distritos de la entidad son tricolores, de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP).
Con el 90 por ciento de las actas computadas, el PRI arrolló en 10 municipios y también en los tres restantes en alianza con el PVEM y Nueva Alianza. Hacía años que en Quintana Roo el PRI no se quedaba con todo.
Cancún, cabecera municipal de Benito Juárez, donde el PR) ha gobernado en los dos últimos períodos, es la muestra del botón. El PRI, junto con el Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza, suma 86 mil 434 sufragios por 37 mil 163 del PRD luego de un 91.60 de conteo del PREP.
También aventaja en Lázaro Cárdenas e Isla Mujeres, donde gobierna el PAN. Lo mismo sucede en la ciudad de Chetumal y Bacalar, donde por vez primera hubo elección al ser esta una nueva demarcación.
El eventual éxito del PRI incluye los municipios de la zona indígena como José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto estaban en manos del PRD, así como Cozumel, Solidaridad (Playa del Carmen) y Tulum.
En la contienda para diputados, el PRI, que tiene 11 de los 25 escaños en la actual legislatura, ganó en 14 de 15 distritos, y sólo tiene ya una aparentemente definitiva desventaja en la sexta demarcación con respecto al PAN.
En ocho de esos 15 distritos, el PRI fue acompañado por el PVEM y Nueva Alianza y en todos ellos tiene significativa ventaja, lo que incidirá, de permanecer así, en una conformación legislativa eminentemente priísta.
Una verdadera debacle.
LA “VICTORIA” ALIADA
Zambrano se dedicó, el domingo en la noche, a celebrar una victoria: la de Baja California. Hoy esa “victoria” está tambaleante. El PRI no acepta su derrota y los resultados preliminares que se manejaron en un principio están entre dicho según el órgano electoral de la entidad.
Para colmo, el PREP ha sido anulado.
El domingo por la noche, empresa PROISI, que maneja el PREP de Baja California reportó un error aritmético en las sumatorias de los porcentajes, pero aseguró que no llega al 1% del total de votos.
El ingeniero a cargo de PROISI, Carlos Treviño Ramírez, explicó que “el incidente del que estamos hablando es un cálculo equivocado entre los partidos políticos. El porcentaje que se estaba calculando entre ellos no estaba sumando el 100 por ciento”.
Expuso que el área de sistemas del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) les hizo la observación, por lo que elaboraron las sumas con calculadoras y vieron que sí existía un error pero no llegó al 1%, así que se dedicaron a corregir unos algoritmos del sistema.
Además explicó que por eso la página web del PREP tuvo algunas caídas momentáneas, mientras se alimentaban programas con los que se subsanó dicha anomalía, de la cual, aseguró, no vulnera los resultados.
Horas después de estas declaraciones, el Consejo General del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) de Baja California, dio a conocer que a poco más de 24 horas del inicio de la votación, que no validará los resultados del PREP por los errores detectados en su cómputo, los cuales “vulneraron y dañaron al instituto y a los candidatos”.
El presidente del IEPC, César Castro Bojórquez, dijo que los únicos resultados que validará ese instituto para la elección de Gobernador, cinco municipios y el Congreso local serán los que se inicien el miércoles, “casilla por casilla”. Este conteo concluirá el próximo domingo.
Con más de 90% de las casillas computadas, el candidato panista Francisco Vega de Lamadrid tenía, de acuerdo con el PREP, tenía una ventaja de poco más de tres puntos respecto al priista Fernando Castro Trenti.
Ante esta situación Zambrano acusó que el PRI quiere utilizar la “caída del sistema” para revertir los resultados preliminares de la elección de gobernador en esa entidad.
“Quieren aplicar lo mismo que hicieron en 1988 con el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas. Qué están esperando, darle la vuelta a la elección de aquí al miércoles a que hagan una tergiversación a la documentación electoral, a lo que está contenido en las actas. Qué es lo que quieren y porqué el PRI no quiere reconocer su derrota”, dijo.
Agregó: “Lo que no pudieron hacer por la buena dentro del PRI, nos quieren ganar en la mesa lo que no ganaron en las urnas”.
El dirigente del PRD explicó que tiene razones fundadas para sospechar del órgano electoral e Baja California. “Durante toda la campaña estuvimos denunciando y lo que sucede se explica, porque a los consejeros electorales los puso la mayoría en el Congreso del Estado que es priista. Los diputados del PRI los pusieron ahí y les pidieron que actuaran a su modo”.