Tokio, 9 mar (dpa) - La canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, coincidieron hoy en que en la actualidad no existe posibilidad de que Rusia vuelva a sumarse al grupo de las naciones más industrializadas, del que fue excluida por el conflicto en Ucrania.
De cara a la cumbre del G7 en junio en Alemania, Merkel dijo en Tokio que "no puede quedar sin resolverse el tema de Crimea".
Por su parte, Abe consideró que el G7 y Rusia no están en condiciones de llevar a cabo un diálogo pleno y advirtió de que el conflicto de Ucrania no es regional, sino internacional.
Debido a la anexión de la península de Crimea por parte de Rusia, el presidente de este país, Vladimir Putin, fue excluido del grupo del G8 en 2014. El G7 está formado por Estados Unidos, Alemania, Japón, Canadá, Francia, Italia y Reino Unido.
Merkel reiteró que Rusia avasalla la integridad territorial de Ucrania, entre otros por su apoyo a los separatistas prorrusos. La arquitectura de seguridad internacional está amenazada, indicó.
Por su parte, Abe elogió las negociaciones que llevó a cabo Merkel en Minsk (Bielorrusia) para acordar un plan de paz en Ucrania. Ambos subrayaron que debe encontrarse una solución diplomática.
