La nueva Jefa Delegacional por Morena dice que desaparecieron contratos millonarios que podrían destapar una cadena de corrupción. Los involucrados son al menos dos ex delegados, afirma. Y ambos son del PRD
Ciudad de México, 8 de octubre (SinEmbargo).– La pasada administración perredista de la Delegación Tlalpan, en la Ciudad de México, realizó no sólo el saqueo del mobiliario de las oficinas, sino que además se llevó físicamente los contratos –principalmente de obras públicas– que pudieran destapar actos de corrupción, informó la actual Delegada Claudia Sheinbaum Pardo, quien es integrante del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
A la par, vecinos de la colonia Santa Úrsula Xitla, ubicada también en esa demarcación, acusaron que enfrentan un juicio por haber sido desalojados ilegalmente por una particular con la ayuda de la ex Delegada Maricela Contreras Julián, del Partiro de la Revolución Democrática (PRD).
En las áreas de obras y gobierno de esa Delegación faltan expedientes y contratos, por tal motivo la nueva administración no ha hecho los pagos a diversos proveedores, puesto que no sabe cómo se realizaron esos convenios. En entrevista con SinEmbargo, Sheinbaum Pardo adelantó que la próxima semana se realizarán las denuncias penales y ante la Contraloría General del Gobierno del Distrito Federal (GDF) por esos hechos, y las acusaciones apuntarán a su antecesor Héctor Hugo Hernández Rodríguez, quien reemplazó este año a Maricela Contreras.
"Todo esto es corrupción. Aquí había una total falta de vigilancia y pulcritud en el servicio público. Esto es un desorden administrativo sumamente grave", comentó Sheinbaum. La Delegada agregó que el monto del mobiliario robado podría ser de miles de pesos, pero en el caso de los documentos se estima que se trate de contratos millonarios.
Además explicó: "No se está haciendo ningún pago. A lo mejor aquí pagan justos por pecadores, pero yo no puedo incurrir que se haga un pago sin sustento adecuado, y ya ni es por los contratos, sino por todos los antecedentes del contrato".
El pasado 1 de octubre iniciaron las nuevas administraciones en las 16 delegaciones del Distrito Federal. Ese mismo día, el presidente nacional del Movimiento de Regeneración Nacional, Martí Batres Guadarrama, denunció que en cinco demarcaciones en las que gobernó el Partido de la Revolución Democrática (PRD) hubo saqueo.
Es el caso de las delegaciones Cuauhtémoc, Tlalpan, Tláhuac, Xochimilco y Azcapotzalco. Hoy todas esas demarcaciones están a cargo de políticos de Morena.
El ex Delegado Héctor Hugo Hernández Rodríguez negó que se tratara de saqueo, pues en abril él recibió así las oficinas, tras suplir a Contreras Julián. Sin embargo, no hizo la denuncia pertinente. Incluso expresó dejó 967 millones de pesos para el tercer trimestre del año, además de 160 millones de pesos en obras.
No obstante, en junio pasado reconoció la falta de pago a casi 300 beneficiarios de programas. En aquel entonces detalló que Tlalpan existía un déficit presupuestal de 9 millones de pesos que derivó de "inconsistencias e irregularidades administrativas" de la administración anterior.
"Sin duda hay carencias de mobiliario y del equipo de cómputo, pero yo entrego lo que recibí", dijo el ex Delegado Hernández Rodríguez, en entrevista radiofónica para Grupo Fórmula.
En tanto Claudia Sheinbaum acudirá a las autoridades para dar con los responsables, sin importar cargo. No obstante, refirió que trabaja con funcionarios de la antigua administración, debido a la plataforma de nómina ocho del GDF, cuyos contrato terminan al fin de año.
La Delegada detalló que no hay gente de la administración pasada en puestos altos. Y al ser cuestionada si considera estar trabajando con el enemigo en casa respondió que podría ser en algunas áreas, pero deben revisar caso por caso, puesto que no quiere entrar en un esquema de estigmatizar a sus trabajadores.
DESALOJO A POBLADORES
Varias familias, con casi 50 años viviendo en la colonia Santa Úrsula Xitla, Tlalpan, intentaron ser desalojadas con violencia por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) el pasado 23 de septiembre. El acto sólo se concretó en la casa de los Hernández.
Cerca de las 06:00 horas de aquel día decenas de granaderos irrumpieron sin mostrar ninguna orden cinco domicilios, ubicados en la calle Santa Úrsula. Los propietarios mostraron la documentación como escrituras o certificados de compra-venta. Sin embargo, los policías ni siquiera los miraron, contaron los afectados a este diario digital.
La Delegada Claudia Sheinbaum informó que existía una orden judicial que no fue debidamente notificada a los vecinos y reiteró que se trata de habitantes que llevan mucho tiempo viviendo en esos domicilios. Sin embargo, aseguró que falta que se vaya desarrollando el caso para ver cómo la Delegación podría ayudar a esas familias, involucrado también al GDF.
Los habitantes acusaron que el desalojo lo promovió Carlota Espíritu Suárez, nieta del antiguo dueño, con ayuda de la ex Delegada Maricela Contreras. Aseguraron que este conflicto lleva más tiempo y siempre ha estado plagado de irregularidades.
La familia Hernández, que lleva cuatro décadas viviendo en ese lugar, compró su terreno a un familiar de Carlota Espíritu, pero no cuenta con la escritura pero sí con el documento de compra-venta, pero la supuesta afectada les aseguró que supuestamente ganó un juicio.
Tras el hecho, los Hernández, vecinos y otras familias –bajo amenaza de desalojo– realizaron un plantón que duró una semana para resguardarse, hasta que un juez les concedió un amparo.
Por el momento, los Hernández lograron volver a su domicilio, pero seguirán un proceso legal hasta aclarar toda la situación.