Ciudad de México, 6 de marzo (SinEmbargo).– El comisionado del Gobierno alemán para Derechos Humanos, Christoph Strässer, entregó su informe sobre la situación que prevalece en territorio mexicano y recomendó que “las negociaciones del Acuerdo de Seguridad entre Alemania y México deben ser suspendidas hasta que exista una estrategia nacional para la lucha contra la impunidad y la protección en contra de las desapariciones forzadas”.
El comisionado estuvo en México en febrero. Se reunió, entre otros, con representantes de la Iglesia católica y organismos de derechos humanos y con familias de los 43 normalistas desaparecidos. También atendió citas con funcionarios del gobierno, como el Secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade, y el entonces Procurador General Jesús Murillo Karam.
Ahora, la Coordinación Alemana por los Derechos Humanos ha emitido un estudio de 30 páginas en el que recomienda tanto a Alemania como a la Unión Europea adoptar medidas para presionar al Gobierno mexicano hasta que garantice el fin de las desapariciones y de la impunidad.
“Las negociaciones del Acuerdo de Seguridad entre Alemania y México deben ser suspendidas hasta que exista una estrategia nacional para la lucha contra la impunidad y la protección en contra de las desapariciones forzadas, cuyos resultados muestren una notable mejoría en el establecimiento de políticas gubernamentales en materia de respeto y protección a los derechos humanos”, dice.
“Mientras que la policía y el Ejército mexicano sigan participando en una sistemática comisión de delitos en contra de las personas, un Acuerdo de Seguridad sólo provocará la legitimación de la violencia en México”, agrega.
“Con respecto al seguimiento y monitoreo de los casos de desaparición forzada, el Gobierno alemán debe velar por la seguridad e integridad de los defensores de derechos humanos y, al mismo tiempo documentar las actividades realizadas por parte de las instituciones políticas alemanas y europeas, cumpliendo las directrices de la Unión Europea sobre los defensores de los derechos humanos”, dice.
Dice que desde el 2006, más de 20,000 personas en México han sido víctimas de uno de los crímenes más violentos y crueles que existen: La desaparición forzada.
“Un estudio de la Organización protestante para el desarrollo “Pan para el Mundo” (Brot für die Welt) y la Organización Católica Misereor (Misereor) junto con la Coordinación Alemana por los Derechos Humanos demuestra que las desapariciones forzadas en México son un delito sistemático y que se da de manera reiterada”.
BAJAR INFORME ÍNTEGRO:
INFORME DDHH ALEMANIA
El informe es duro con los gobiernos de México (de Felipe Calderón a Enrique Peña Nieto). Dice que distintas organizaciones internacionales –incluida las Naciones Unidas, ONU– han recomendado al Estado mexicano asumir políticas para la defensa de los derechos de las víctimas y contra las desapariciones forzadas, pero éstas no se han asumido.
Afirma, por ejemplo, que el grupo de trabajo de las Naciones Unidas contra la Desaparición Forzada recomendó en 2011 un marco legal, el desarrollo de medidas preventivas para la protección y el acceso a la justicia de las víctimas; el derecho a la verdad y la indemnización; defender a las personas vulnerables, los migrantes, los defensores de los derechos humanos, los periodistas y las mujeres en general.
“Pero ni una sola de 23 de estas recomendaciones está lejos de ser cumplida o implementada por el Estado mexicano, o implementadas en las entidades federativas”.
El 28 de febrero pasado, al abandonar México después de una visita oficial, el comisionado Christoph Strässer dijo que en el país existen déficits de Estado de Derecho que empiezan con una falta de acceso a la Justicia. “Hay una carencia de estructuras de Estado de Derecho en todo el país. Eso empieza con un deficiente acceso a la Justicia y continúa con torturas en las cárceles, desapariciones y corrupción”, estimó Strässer,
Como punto positivo, valoró el fortalecimiento de la sociedad civil de los últimos años en el país.
Durante su visita a México, el funcionario alemán se entrevistó en la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa con familiares de 43 estudiantes desaparecidos y presuntamente masacrados por un grupo criminal aliado con policías entre el 26 y el 27 de septiembre.
Según afirmó, en la zona se encontraron 36 fusiles G36 del fabricante alemán Heckler & Koch, que no estaba autorizado por el gobierno alemán a exportar armas a zonas de México consideradas conflictivas, entre ellas al sureño estado de Guerrero donde desaparecieron los estudiantes.
“En Guerrero no podía haber armas alemanas”, dijo Strässer. La empresa está bajo investigación en Alemania por el supuesto envío ilegal de numerosos G36 a zonas problemáticas de México.
