Por Linaloe R. Flores y David Martínez Huerta
Ciudad de México, 2 de abril (SinEmbargo).– El fortificado esqueleto legal de la Secretaría de Gobernación (Segob) le ha permitido a su titular, Miguel Ángel Osorio Chong, convertirse en el eje del gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto y adquirir un poder que "es peligroso concentrar en una sola persona", coincidieron especialistas y políticos. Los recientes movimientos en el ajedrez de la institución no sólo en temas de seguridad sino también en las reformas estructurales, así lo confirman, dijeron.
Para los expertos, a Osorio Chong se le están dando todas las facultades necesarias para crear un aparato con súper poderes para gobernar al país al viejo estilo del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Es un "Vicepresidente que suma un poderío riesgoso".
“La dotación excesiva de facultades para la Segob contradice la regla más sencilla de los gobiernos democráticos: evitar la concentración de poderes”, expuso Nicolás Loza Otero, coordinador de Gobierno y Asuntos Públicos en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso México).
El experto en Ciencia Política explicó que se trata de un sello político. “Los gobiernos de la alternancia se distinguieron por intentar la desconcentración de facultades de la Secretaría de Gobernación; pero los resultados fueron catastróficos. Al PRI, con su nuevo desafío, se le nota la gran intención de diferenciarse del PAN [Partido Acción Nacional] y tener eficiencia en seguridad a costa de una crisis en los contrapesos”.
Con la publicación, el 2 de abril del año pasado, de un nuevo reglamento interno en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el titular de Gobernación se adjudicó las atribuciones de la extinta Secretaría de Seguridad Pública Federal, lo que le ha permitido decidir sobre el principal problema que aqueja al territorio mexicano: la seguridad.
Al tiempo y de manera paradójica, desde ese decreto, el Secretario de Gobernación se atribuyó la vigilancia de los derechos humanos en los procesos de impartición de justicia, al crear las Direcciones General de Política Pública de Derechos Humanos; de Estrategias para la Atención de Derechos Humanos y la relativa a la planeación para la Prevención Social.
El Diputado Ricardo Mejía Berdeja afirmó que, desde hace un año que se reformó la Ley Orgánica de la Administración Pública, alertaron sobre la estructura gubernamental que se estaba creando en la Secretaría de Gobernación. “Según esta reforma, [Osorio Chong] es el coordinador del gabinete del Ejecutivo. Tiene un cúmulo de facultades que lo convierte en una ‘Súper Secretaría’”, sentenció.
El vicecoordinador del Movimiento Ciudadano (MC) expuso que con estas acciones se está restituyendo una Secretaría como la del "viejo régimen".
Sin embargo, pese a que ya era considerado un “Súper Secretario” –con 51 unidades administrativas a sus órdenes–, el 24 de marzo pasado, el Presidente Enrique Peña Nieto envió al Senado de la República un paquete de iniciativas de leyes secundarias a la Reforma en Telecomunicaciones que de ser aprobado, aumentaría las facultades del Secretario de Gobernación, y se encargaría también de regular y vigilar los contenidos de radio y televisión.
“La Presidencia está detrás de estas medidas centralizadoras del poder, tanto para la función represiva que ejerce Gobernación, como la función indiscriminada de los recursos públicos a través de Hacienda”, afirmó el Diputado del Partido del Trabajo (PT), Manuel Huerta Ladrón de Guevara.
El legislador petista agregó que el fondo de los cambios está en la génesis histórica del “PRI autoritario” que busca ejercer un poder absoluto. “Ahora vienen los controles, y en este Estado autoritario y gendarme nada mejor que Gobernación, en el que se encuentra este grupo político que es el ‘Grupo Hidalgo’”, expuso.
LOS PROCÓNSULES
Al modificar el reglamento interno de la dependencia en abril del año pasado, Osorio Chong sumó las atribuciones de la extinta Secretaría Seguridad Pública Federal, cuya silla principal fue ocupada el sexenio pasado por Genaro García Luna, el hombre clave de la guerra contra el crimen organizado del ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Tras esa enmienda, fue posible que dos de las decisiones más importantes en materia de Seguridad en lo que va del gobierno de Enrique Peña Nieto fueran tomadas en el antiguo Palacio de Cobián, de Bucareli. La primera fue el nombramiento de Alfredo Castillo Cervantes como Comisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral en Michoacán y la otra, el Plan Estratégico de Apoyo Total al Estado de México, cuya dirección la marcará Damián Canales Mena desde la dirección de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de esa entidad.
En febrero del año pasado, Damián Canales Mena fue designado jefe de la División de la Investigación de la Policía Federal en la Procuraduría General de la República, órgano desconcentrado de la Segob. Canales Mena había sido director de la Policía Judicial del Distrito Federal durante cuatro años, y desde 2007 había ocupado el cargo de Secretario de Seguridad Pública en Hidalgo bajo el mando de Osorio Chong, cuando era mandatario de la entidad. En las estructuras medias del poder, se le identifica con el grupo denominado “Hidalgo”.
“A través de la Secretaría de Gobernación se han creado auténticos procónsules, como es el caso de Michoacán con Alfredo Castillo [Cervantes], y el anuncio de que prácticamente toman el control de la seguridad pública en el Estado de México”, manifestó Mejía Berdeja.
El lunes, del encargado de la política del país anunció la estrategia para atender la crisis de seguridad que vive la entidad gobernada por Eruviel Ávila Villegas. Al frente del operativo colocó a Damián Canales Mena, quien se desempeñará como titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Estado de México.
Ayer, el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García –quien sustituyó a Manuel Mondragón y Kalb tras su renuncia por supuestas presiones del “Grupo Hidalgo”– encabezó la conferencia de prensa en la que se confirmó la identidad del líder templario abatido por la Secretaría de Marina (Semar), Enrique “Kike” Plancarte Solis.
Tanto el llamado “Grupo Hidalgo” como Canales Mena son personajes cercanos a Osorio Chong. Incluso, el 15 de marzo pasado, cuando Mondragón y Kalb anunció su salida de la CNS, fuentes de la Procuraduría General de la República (PGR) señalaron que se debió al surgimiento de esta corriente dentro de la Segob.
Previo a su renuncia, Mondragón y Kalb enfrentaba un problema con la Gendarmería Nacional. Según cercanos al gobierno federal, se negó a cumplir con la orden de Peña Nieto de recibir elementos del Ejército o de la Marina, institución que ha participado de manera activa en las últimos operativos contra los capos.
CON SÚPER PODERES
Hace exactamente un año, el 2 de abril de 2013, la Presidencia de la República publicó el nuevo Reglamento Interior de la Secretaría de Gobernación que –de acuerdo al Artículo 89 Constitucional y la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal (LOAPF)– integra entre las facultades de la Segob algunas obligaciones en materia de seguridad.
El Diputado Ricardo Mejía comentó que desde entonces manifestaron su preocupación de que se fusionaran ambos ámbitos y se convirtiera en un “Ministerio de policía y política”.
“Nosotros advertíamos, y lo refrendamos hoy. […] Sumar la parte política con la parte policiaca, convertiría esto en un Ministerio de policía política. Definitivamente en un país con tantos problemas de carácter social y político, se requería un Ministerio que se dedicara a la tarea de conciliación, de correa de transmisión con los otros poderes, de generación de diálogo”, dijo.
Sobre la creación de la Comisión Nacional de Seguridad, comentó que no estaban a favor de que se sustituyera la Secretaría de Seguridad Pública, sino en contra de los personajes que la dirigían.
“El problema no era el diseño de la institución, el problema era que había personajes como Genaro García Luna al frente de la Secretaría”, afirmó.
El Capítulo VII del Reglamento abarca lo referente a la Comisión Nacional de Seguridad que sustituyó a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP). Entre sus atribuciones, la CNS debe “proponer al Secretario las políticas, programas y acciones tendientes a garantizar la seguridad pública de la Nación y de sus habitantes”, así como coordinar y supervisar su ejecución e informar sus resultados.”
El Comisionado deberá también “administrar y resguardar las bases de datos criminalísticos y del personal policial que custodie la Comisión y los órganos administrativos desconcentrados”, así como “supervisar la regulación de los servicios de protección, custodia y vigilancia en materia de seguridad privada”, cita el DOF.
Otra cuestión relevante es que el Comisionado es quien debe supervisar y coordinar el ejercicio de las facultades previstas para la Federación en el artículo 39 de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, sin embargo estas funciones han sido retomadas directamente por Osorio Chong.
AUTORITARISMO EN TELECOM
El proyecto del Presidente de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión implica para la Segob la atribución de vigilar los contenidos de las estaciones de radio y televisión en búsqueda de que estos sean “educativos, culturales y cívicos”; además del otorgamiento de permiso para revisar los noticiarios transmitidos en la República Mexicana. El objetivo de esta revisión es vigilar que difundan “información imparcial, objetiva, oportuna y veraz del acontecer nacional e internacional”.
No obstante la batalla que libraron durante una década expertos y observadores de las Telecomunicaciones por conformar un organismo regulador con autonomía, la iniciativa peñanietista echa por la borda ese cimiento pensado para el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), al cual le acota sus funciones en la regulación de contenidos para brindárselos a la Segob.
De obtener el aval de los legisladores, se expedirá otra ley para crear un organismo dependiente de la Secretaría de Gobernación: el Sistema de Radiodifusión de México. El proyecto de ley indica que este organismo tendrá como función transmitir contenidos para lograr “la integración nacional”.
Para algunos expertos, esto abriría la puerta al tipo de censura que existía durante los gobiernos del PRI.
La propuesta de ley ” huele a autoritarismo “, advirtió Javier Corral Jurado, Senador del Partido Acción Nacional, uno de los principales opositores de Telecom. También la prensa extranjera lo retomó. En un reportaje, el diario Los Ángeles Times planteó el regreso de un PRI autoritario, basado en esta misma reforma.
“Un número creciente de críticos al interior de México están leyendo la letra chiquita del plan de telecomunicaciones y encontraron muchas cosas de qué preocuparse. Por un lado, la cada vez más poderosa Secretaría de Gobernación se encargará de vigilar el contenido de las emisiones de televisión y radio para asegurarse de que ‘se ajustan a la equidad y otras regulaciones’. Algunos mexicanos temen que abriría la puerta al tipo de censura que existía cuando el PRI gobernó antes, sin restricciones y con una débil oposición”, publicó el Times.
El Senador Corral sostiene que la propuesta del Presidente Enrique Peña Nieto es regresiva y atenta contra el espíritu original de la reforma constitucional Telecom, porque disminuye al Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) y al mismo tiempo le entrega un gran poder a Segob, que preside Miguel Ángel Osorio Chong, entre ellas las facultades de vigilar los contenidos de los medios de comunicación y solicitar el bloqueo temporal de “señales de telecomunicaciones en eventos y lugares críticos para la seguridad pública”.
“En la práctica quizá [Hugo] Chávez fue más autoritario, o ahora [Nicolás] Maduro, pero sí lees la ley venezolana de radio y televisión, lo que allá es el Servicio de Radiodifusión Abierta, te darás cuenta de que no encuentras disposiciones similares que le otorguen tantas facultades al Ministerio del Interior”, refirió Corral Jurado en entrevista para SinEmbargo.