Luis Videgaray Caso, el amigo del Presidente Enrique Peña Nieto, no volverá a la esfera política a través del Banco de México. Aunque el sucesor de Agustín Carstens Carstens será designado por el mandatario, la Ley del Banco Central establece como requisito que sus miembros hayan estado por lo menos cinco años en cargos del sistema financiero. Videgaray lo estuvo en el hacendario. Ante la sorpresa por la noticia del retiro de Carstens del Banxico, los mercados reaccionaron con nerviosismo en las primeras horas. Analistas y economistas cuestionaron el timing en que se dio el anuncio [en un entorno de por sí volátil, de debilidad económica y con las amenazas de Donald Trump encima], y aunque consideran a Agustín Carstens un banquero central muy capaz, descartaron también preocuparse por su salida.
Ciudad de México, 1 de diciembre (SinEmbargo).– El próximo Gobernador del Banco de México (Banxico) será designado por el Presidente Enrique Peña Nieto, anunció en conferencia Agustín Carstens Carstens, quien dejará el cargo en julio del 2017 para convertirse en el primer Gobernador del Banco Central de los Bancos Centrales (BIS) que proviene de una economía emergente.
Esa referencia puso en la mira de muchos el posible resurgimiento del hombre fuerte del Presidente, el ex Secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray Caso; su nombre desató especulación desde la mañana del jueves. Sin embargo, quien dejó la economía nacional en desaceleración y con una deuda pública histórica, no cumple los requisitos de la Ley del Banco Central, destacó en entrevista el analista económico Alejandro Villagómez.
El reglamento interno para ser miembro de la Junta de Gobierno, incluyendo al Gobernador, exige haber ocupado –por lo menos durante cinco años– "cargos de alto nivel en el sistema financiero mexicano o en las dependencias, organismos o instituciones que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera".
Dos de los cinco miembros "no necesitan cumplir con el requisito de antigüedad, siempre y cuando sean profesionales distinguidos en materia económica, financiera o jurídica". Sin embargo, "ninguno" de estos dos integrantes podrá ocupar el cargo de Gobernador sin antes haber cumplido tres años en su cargo.
Videgaray Caso inició su carrera en la consultora Protego, la cual asesora a gobernadores en materia de deuda. Después fue Secretario de Finanzas del gabinete del entonces Gobernador mexiquense, Peña Nieto, y posteriormente, ya en la arena política, asesor de campaña del Gobernador Eruviel Ávila Villegas y del hoy Presidente de la República.
De acuerdo con el analista económico, Alejandro Villagómez, los miembros de la Junta de Gobierno son los "candidatos naturales" a suceder a Carstens, pero no los únicos posibles. El mismo Secretario de Hacienda, José Antonio Meade, dirigió un banco de desarrollo, por lo que él cumple el requisito de haber laborado en el sector financiero, pero no "por lo menos durante cinco años".
Nadie, hasta el momento, se ha aventurado a dar un nombre.
Luis Robles Miaja, presidente del Consejo de BBVA Bancomer, descartó intereses políticos en esta decisión, ya que la persona que ocupe el sitio del Gobernador, dijo, será un personaje autónomo de la Presidencia de la República.
Por su parte, José Antonio Meade Kuribeña, titular de la SHCP, consideró "prematura" cualquier decisión sobre el relevo.
"Tiene que ser una persona que conozca y acredite el respeto a los mercados, como lo ha sido Agustín. Hay un proceso de transición muy largo y ordenado. Habrá de darse en el segundo semestre del año que entra. Él habrá de permanecer en el banco únicamente preocupado por su buena gestión", declaró Meade a la prensa luego de su participación en el evento "México hacia el 2017".
LOS OTROS CUATRO MIEMBROS
La Junta de Gobierno del Banco de México se encarga de la política monetaria del país para controlar la inflación, es decir los precios de los bienes y servicios. En un entorno con el peso depreciado un 19 por ciento frente al dólar y una inflación ligeramente arriba de 3 por ciento, su Gobernador presentó su renuncia.
Agustín Carstens Carstens, que ha dirigido al banco central desde 2010 después de pasar por la Secretaría de Hacienda, dejará el cargo en julio del año próximo. Desde octubre y durante cinco años dirigirá el Banco Central de los Bancos Centrales (BIS), la institución financiera internacional más antigua del mundo. Asiste a los bancos centrales a favor de la estabilidad monetaria y financiera global.
Analistas y economistas cuestionaron el timing en que se dio la noticia luego de la reacción inmediata en los mercados y aunque consideran a Carstens un banquero central muy capaz, descartaron preocuparse por su salida.
"Las decisiones importantes en política monetaria no las toma el Gobernador. Es un miembro más de la Junta y ni siquiera tiene voto de calidad. En total son cinco y Carstens seguirá gestionando normalmente hasta julio", evaluó en entrevista el analista económico Alejandro Villagómez.
El mismo Carstens, quien tomó la decisión con "sentimientos encontrados" y después de "meditarlo cuidadosamente", garantizó que durante los próximos siete meses continuará "plenamente dedicado" a la tarea de Gobernador del Banco Central y, junto con los demás cuatro miembros de la Junta de Gobierno, seguirán procurando la estabilidad del valor adquisitivo de la moneda.
Los otros miembros de la Junta, los candidatos naturales pero no los únicos posibles para relevarlo, son Roberto del Cueto Legaspi (abogado ex presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores); Javier Eduardo Guzmán (economista miembro de Banxico desde 1980); Manuel Ramos Francia (economista miembro de un Comité del FMI) y Manuel Sánchez González (economista y analista de Bancomer).
Todos tienen un alto nivel técnico y profesional.
Este último, Sánchez González, concluirá el cargo en diciembre. El sustituto de este subgobernador es Alejandro Díaz de León, actualmente el director de Bancomext.
"NO DEBEMOS PREOCUPARNOS"
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Durante las primeras horas, mientras se asimilaba la noticia, los inversionistas operaron con nerviosismo y el peso empezó a borrar las ganancias alcanzadas en la víspera por el anuncio de una baja en la producción petrolera a nivel mundial. Este jueves el dólar al mayoreo cerró en 20.72 pesos y en bancos hasta en 21.10 pesos.
"Me parece irresponsable porque es un factor más de volatilidad en un ambiente ya volatil. Es un problema de timing, no tanto de que salga", escribió por la mañana el economista del Colegio de México, Luis Monroy-Gómez-Franco.
Sin embargo, el analista económico Jonathan Heath y el presidente de Bancomer no coincidieron.
"No veo por qué el tipo de cambio tiene que reaccionar ante la renuncia de Carstens. Primero, no es de inmediato, sino dentro de meses. Banxico tiene una Junta de Gobierno muy sólida de personas muy capaces", expuso.
Robles Miaja declaró que "el Banco de México es reconocido mundialmente por su profesionalismo e institucionalidad, por ello no debemos preocuparnos, ya que de entrada, Agustín se va hasta julio y además, la institución sigue muy fortalecida".
El Secretario de Hacienda, José Antonio Meade, dijo durante un foro de Bloomberg que la certidumbre en los mercados se "finja" más en las instituciones y no en las personas.
El economista Heath calificó a Carstens como un banquero central "sólido, muy capaz y reconocido internacionalmente". Para Meade es un mexicano de excepción, talentoso y de gran confiabilidad y enorme talento.
"Que una institución sea sólida es más importante que la persona que lo dirige. Habrá quien tomará el lugar de Carstens y hará buen papel", confió Heath.