Sugeyry Romina Gándara
La familia de la estudiante de la UNAM acusa a la Procuraduría capitaliza de minimizar el caso. Afirma que su “pasividad” ha provocado que se pierda información que podría ser relevante en la búsqueda.
A las mujeres de Cloete, en el estado norteño de Coahuila, empresas mineras adueñadas por políticos priistas, les quisieron quitar sus casas. Pero no pudieron porque se rebelaron. En 2007, la situación llegó ser tan confusa que por el pueblo corrió el rumor que grupos de la organización criminal de Los Zetas se habían hecho del control de las minas.
Juana busca justicia para su hermana Guadalupe, quien fue apuñalada y degollada en Nicolás Romero, Edomex. La joven de 28 años ahora vive bajo las amenazas de la familia del imputado por el feminicidio, ex pareja de la víctima, y acusa que el gobierno del Edomex –encabezado por Alfredo del Mazo Maza– la deja en condición de vulnerabilidad.
Como el aire que revive una brasa de carbón, la esperanza ha resurgido en la región carbonífera de Coahuila. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos aceptó la queja en contra del Estado mexicano por su responsabilidad en la violación del derecho a la vida de 65 mineros que se vieron atrapados después de la explosión de la Mina 8 de Pasta de Conchos, propiedad de Grupo México del empresario Germán Larrea Mota Velasco, quien es actualmente el segundo hombre más rico de México.
El diagnóstico sobre Desaparición de Niñas, Adolescentes y Mujeres en el Estado de México destaca que aunque hay un decrecimiento en los feminicidios y homicidios dolosos contra ellas, la desaparición en cinco de los municipios mexiquenses más peligrosos registra una alarmante alza entre 2015 y 2017.
“El nivel que ha alcanzado la violencia tiene que ver con la baja calidad de gobierno de Peña, con haber bajado los brazos a esperar de que ya transcurra la presidencia y a seguir más preocupados por seguir robando”, sostiene Clara Jusidman, presidenta de INCIDE Social AC.
A Silvia Vargas Velasco le dijeron que su hija se suicidó pero las inconsistencia que detectó en su caso la han llevado a una lucha, que ya lleva cuatro años, para que las autoridades del Estado de México investiguen la muerte de su hija María Fernanda como un feminicidio ante las lesiones que presentaba el cuerpo, la versión inconsistente del supuesto ahorcamiento, entre otras irregularidades.
El SESNSP difunde datos de la incidencia delictiva de México desde 1997, que detallan que la cifra mensual más alta se había registrado en octubre del año pasado cuando se contabilizaron 2 mil 380 homicidios dolosos.
Sara Berona Pérez fue golpeada y estrangulada hasta la muerte. Su cuerpo fue envuelto en una cobija y cubierto con una bolsa de plástico, luego fue arrojado a un canal de agua en la Delegación Xochimilco, en marzo pasado.
El pasado 1 de junio, la juez Iliana Fabricia Contreras Perales, del Juzgado Séptimo de Distrito en el Estado de Guerrero, sentenció a dos militares a 19 años de prisión por la tortura sexual contra Valentina Rosendo Cantú, joven indígena me’phaa.
“La gente piensa que los hombres no sienten; pero la verdad es que sí. Y también lloramos”, dice Julio Pastillas, padre de Esmeralda desaparecida en 2009.
Arlet Samanta Olguín Hernández desapareció en Ecatepec, Estado de México, el pasado 25 de abril cuando iba por su hijo al kínder. Guadalupe Hernández López, madre de la joven, hace un llamado desesperado para que le ayuden a encontrar a su hija y denuncia que las autoridades mexiquenses no han actuado con la urgencia requerida ante papeleos que provocaron la pérdida de tiempo valioso.
Más de cuatro años ya pasaron y Víctor Álvarez Damián, de 16 años, no aparece. Policías se lo llevaron y luego su rastro se esfumó. Su madre, Perla Damián Marcial, lo buscó en ese entonces y lo sigue haciendo, lidió con la Fiscalía de Javier Duarte de Ochoa y ahora con la Miguel Ángel Yunes Linares.
Diana Piggeonountt Gómez, estudiante de preparatoria con alto rendimiento escolar, cumple más de una semana desaparecida en Tijuana, Baja California. Familiares, estudiantes, maestros y amigos han salido a las calles a exigir la pronta aparición, pues temen por su integridad. Sin embargo, hasta el momento no hay ningún indicido de la joven, ni respuestas de las autoridades, denuncia Lucero Elizabeth Piggeonountt, hermana de la menor.
Cuando África Camila desapareció, en septiembre de 2014, las autoridades del Estado de México no quisieron levantar la Alerta Amber de inmediato sino tres días después.
José Antonio desapareció hace más de 9 años en Coahuila. Fue a trabajar y fue privado de la libertad un 25 de enero de 2009, desde entonces no se sabe nada de él.