María Rivera
Entiendo las críticas al gobierno actual, pero no la reiterada cantaleta de que el pasado fue mejor.
“La obligación del mundo de detener a Israel ha sido desatendida mandando el peor de los mensajes: los poderosos pueden llevar a cabo genocidios siempre que quieran y de manera impune. Es evidente que Israel no persigue “exterminar” a Hamás, sino exterminar a los palestinos, destruir por completo su ciudad como han hecho, su identidad, su sentido de pertenencia, hasta robarles su tierra usando el argumento mendaz de que es por su seguridad”.
“Es imposible construir la paz sobre violentas injusticias cometidas sobre todo un pueblo”.
“Respaldar la barbarie genocida del pueblo palestino, exhibe una forma de hipocresía en quienes se dicen ‘civilizados’ y ‘democráticos'”.
“Los palestinos no están ‘muriendo’, como si se tratara de un fenómeno natural. No se están desvaneciendo bajo meteoritos, sino siendo despedazados por misiles israelís”.
“Los crímenes de guerra que ha cometido Israel estos días y que sigue cometiendo en estas horas ameritarían que una corte internacional lo juzgue y que la sensatez en la comunidad internacional lo frene”.
“Actos como los cometidos por Hamas deben ser condenados de manera unánime. El dolor, las tragedias personales y colectivas serán enormes para sus víctimas”.
“Esperemos que el doctor López Gatell no logre su cometido y que sea juzgado, algún día, por su criminal desempeño en la pandemia”.
“Ahora, los mismos que criticaban con iracundia están en un serio problema, porque no es lo mismo señalar la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio”.
“¿Qué país queremos? Habría que preguntarse ¿y para quién? Sobre todo. Yo lo pienso en relación con la cultura, por ejemplo”.
“El solo hecho de que exista la posibilidad de que una mujer acceda al máximo puesto de poder del país es un avance indudable en el plano simbólico y de representación de nuestro sexo”.
“Más temprano que tarde descubrirán que renunciaron a lo único que tenían y que los diferenciaba de Morena, para convertirse en su patiño”.
“Esa oposición es una desgracia para el país, porque no aporta nada nuevo, ni opción alguna que corrija los errores o traiciones del lopezobradorismo a la izquierda”.
Nadie, ningún mexicano ni mexicana, tendría que morir asesinado y después de su muerte, sufrir el horror sin palabras al que someten sus cuerpos. Nadie debería estar debajo de la tierra, sin nombre.
No sé si los libros de texto son un desastre o no, si están mal o bien o regular, no los he leído. Sé, sin embargo, querido lector que si tienen algo de la Pedagogía del oprimido, bien vale la pena leerlos.