Karen Castillo
En Oaxaca se han instalado 27 parques de energía eólica desde 2016, con una capacidad de generar 2 mil 360 mega watts. La mayoría de ellos, establecidos en el Istmo de Tehuantepec, se edificaron a costa del bienestar de las poblaciones indígenas de la región que desde tiempos ancestrales han protegido el territorio.
El Grupo del Cambio Climático del Banco Mundial ha reconocido que esta realidad es un fuerte motor para migrar, y en México esos éxodos locales ya ocurren, particularmente en regiones cuyos recursos naturales han sido devastados y en donde sus poblaciones sufren sequías o, al contrario, fuertes inundaciones que las han dejado sin sus patrimonios y las ha obligado a ser migrantes en su propio país.
Organizaciones civiles como Redim, Fray Francisco de Vitoria, Educadys, Red TDT y FM4, instaron al Estado Mexicano a cumplir con las recomendaciones de la ONU en materia de protección y derechos de los niños y adolescentes en México.
A sólo unos minutos de Lomas del Pedregal –una zona residencial de las más caras de la capital del país– se ubican una serie de terrenos en la que la falta del agua es un problema habitual. Ahí, enclavada en la hoy Alcaldía de Tlalpan, se ubica la colonia 2 de Octubre que desde hace años ha reclamado a las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México porque el suministro del agua es inequitativo e insuficiente.
En el primer día del megarecorte de agua en el Valle de México, debido a obras de mantenimiento en el Sistema Cutzamala, habitantes de la Delegación Iztapalapa no se muestran ni sorprendidos ni inquietos por la emergencia: por cuatro décadas, dicen los mayores, han sufrido permanentemente la escasez del vital líquido y también han pagado, con su propio dinero, por un servicio que los gobiernos federal, de la Ciudad de México y de la ahora Alcaldía no les han dado, aún cuando es un derecho humano establecido en la Constitución Mexicana.
Las obras de reparación y mantenimiento que la Conagua realizará al Sistema Cutzamala provocarán cortes en el suministro de agua en 13 Alcaldías de la Ciudad de México a partir de este 31 de octubre y hasta el 3 de noviembre; sin embargo, las autoridades informaron que el restablecimiento total del suministro se prolongará otras 72 horas: hasta el próximo 6 de noviembre.
Durante el conteo se percibe cierta tensión, la mayoría de los votos van por Santa Lucía, como esperaban las mismas funcionarios de casilla, sin embargo, los votos en favor del NAIM no son pocos.
En el segundo día de la Consulta Nacional para decidir el futuro del NAIM, propuesta por Andrés Manuel López Obrador, la gente del municipio de Chimalhuacán –aledaño a la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México y del lago Nabor Carillo– se encuentra dividida entre los beneficios o daños directos que podría ocasionar la cercanía con la megaobra.
La Consulta Nacional para determinar el destino del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México inició este jueves con una afluencia mayor a la esperada tanto por los organizadores como por los detractores de la misma.
Mientras se lleva a cabo la Consulta del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, organización protestan en la Ciudad de México contra la mega obra de Texcoco.
El Lago Nabor Carrillo es una de las únicas fuentes captadoras de lluvia en el Valle de México –con una capacidad de 12 héctometros cúbicos– que ofrece una alternativa al problema de gestión de aguas de esta zona, el mal aprovechamiento de la precipitación que se conjuga con la sobreexplotación, por lo que su desecación plantea una disyuntiva: o seguridad hídrica o aeropuerto.
La privatización del agua ha sido denunciada por las organizaciones de la sociedad civil durante años, especialmente en los últimos meses. Esa acción, afirman, representa un riesgo y está latente desde la presentación de la Ley Nacional de Aguas durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. Los diez decretos de reserva del agua firmados por Enrique Peña Nieto –en este mismo año– reavivaron los temores.
Rosario Robles ha negado en repetidas ocasiones que los presuntos desvíos de recursos públicos que se le imputan sean su responsabilidad y el martes pasado, ante la andanada de reclamos por parte de diputados federales que le exigían explicar los desfalcos en la Sedesol y la Sedatu –las dos dependencias federales que ha encabezado en la actual administración– argumentó que los ataques en su contra eran producto de la “violencia política de género”. La respuesta a su premisa la dio Martha Tagle Martínez, quien además de ser Diputada federal por Movimiento Ciudadano es defensora y luchadora por los derechos humanos de las mexicanas. Desde la tribuna, Tagle dijo: “No te equivoques Rosario: la condición de género no nos exime [a las mujeres] de asumir nuestras responsabilidades en el cargo público y de ser señaladas por actos de corrupción”.
La Ciudad de México enfrenta dos difíciles realidades: desabasto e inundaciones por deficiencias en el modelo de gestión del agua. Esta paradoja incomprensible que los capitalinos han heredado desde tiempos prehispánicos se ha ido incrementando de manera relativa con el crecimiento poblacional.
La construcción sociocultural de la división del trabajo domestico merma en la cantidad de horas que las mujeres dedican en la recolecta y acarreo de agua. Si bien, no existe una medición precisa sobre el dato las expertas señalan que esto tiene peso sobre su tiempo de ocio, así como, sobre la sobrecarga en sus actividades de trabajo remunerado y no remunerado.
La clandestinidad y robo de agua atenúan el problema de desabasto de agua en la Ciudad de México, la falta de control sobre dichas prácticas provoca consumos de uso desmedido e irresponsable.