Guadalupe Correa-Cabrera
No resulta extraño que su hábil y acertado discurso se comunique en el contexto de la tragedia de las decenas de migrantes muertos en un centro de detención en Ciudad Juárez, Chihuahua que deja al desnudo la podredumbre del sistema migratorio mexicano que su administración no ha querido o no ha podido “transformar” y reformar.
Es interesante cómo algunos personajes expertos en montajes y detenciones arbitrarias ahora se encuentran en la cárcel, enfrentando severos cuestionamientos o en problemas legales. El caso más emblemático es el de Genaro García Luna.
Según las declaraciones juradas de testigos cooperantes y testigos protegidos vinculados a actividades ilícitas, Genaro García Luna protegió al Cártel de Sinaloa a cambio de sobornos millonarios, con lo que se le identifica como parte de una red de tráfico de drogas que facilita la entrada de las mismas hacia la Unión Americana.
Es preciso estar muy pendientes de los análisis de expertos regionales como Óscar Serrato, Nicolás Pineda y Karina López Ivich.
Hasta ahora, Plan Sonora es sólo la promesa de una serie de megaproyectos que generarían potencialmente riqueza y desarrollo en una era de transición hacia las energías renovables.
“Las tendencias sociales, económicas y culturales, así como los sucesos ocurridos recientemente en el mundo—y particularmente en nuestro continente—parecen demostrarnos el claro avance del gran capital global y la materialización de sus agendas en todas y cada una de las regiones del planeta”.
El caso de Genaro García Luna es sólo un pequeño ejemplo de cómo opera un sistema de “justicia” que apoya la impunidad en las más altas esferas de la política internacional y el gran capital.
“Detectar plagios y hacerlos virales (con agendas que podrían ir más allá de lo académico y tener efectos en lo político) se convierte entonces en el pasatiempo favorito de Sheridan”.
Es curioso cómo un municipio fronterizo tan importante en términos de economía y geoestrategia ha adquirido una mala reputación por ser una región peligrosa, que algunos consideran una “tierra de nadie”, de la cual es preciso alejarse y donde una guerra de “carteles” domina supuestamente las dinámicas de la región.
“La de AMLO no es una marcha opositora, es una marcha desde el poder—con todo lo cuestionable que esto signifique y con lo mucho que hay que criticarle al desempeño de este Gobierno”.
“A la nutrida marcha opositora se unen figuras de la “reacción mexicana” que fueron relevantes en el proceso de transición a la democracia y el avance de las reformas económicas estructurales—que se denominan también “neoliberales” y que fueron impuestas en el marco del llamado ‘Consenso de Washington'”.
Por su parte, la comentocracia antes privilegiada mexicana—esos intelectuales orgánicos de antaño—no pierden la oportunidad de criticar férreamente al Gobierno actual en columnas invitadas para la prensa internacional.
Los venezolanos elegibles para este programa tendrán que presentar una solicitud, tener un patrocinador en Estados Unidos y deberán someterse a controles biométricos y biográficos de seguridad nacional y seguridad pública, así como comprobar haber recibido sus vacunas completas y cumplir con otros requisitos de salud pública.
La situación es aún muy complicada pues vastos territorios del estado están controlados por la delincuencia organizada, las aduanas son un desastre y Estados Unidos parece tener información que podría comprometer a más de un miembro del partido Morena.
“El tema de la seguridad es quizás el más complejo, ahora que se planteó que los militares dominarían las tareas de seguridad pública de país sin miras a crear una policía de carácter civil ni hoy, ni mañana y pareciera que nunca más”.
Después de cuatro años de Gobierno, las promesas de transformación siguen sin cumplirse, lo que no sorprende dados los tiempos lógicos que requiere un verdadero cambio, así como la presencia real de errores e ineficiencias que deben ser analizados en su justa medida.