Alejandro Páez Varela
@paezvarelaSerá un hijo engendrado en el odio; un extraño y peligroso Frankenstein al que nadie querrá amamantar y decir, cuando destruya sus primeros juguetes: “ese hijo es mío”.
Rubén, Nadia y Regina se sentían espiados porque muy probablemente eran espiados.
El asesinato de Javier Valdez fue una fuerte sacudida para todos. Sí: hasta la prensa tradicional, que se había negado a reconocer que con Javier Duarte de Ochoa la prensa vivía un horror; sí, incluso aquellos que no publicaron una sola línea del asesinato de Regina Martínez o que criminalizaron a Rubén Espinoza, cayeron en cuenta que la violencia los alcanzaría pronto, sin importar cuántas loas le echan al Gobierno federal o cuántas veces ocultaron la violencia que se vive en varios estados.
Uno ya no sabe quiénes son los cerdos, aquí: si esos que aparecieron degollados por todo Edomex en el día de la elección –para intimidar a los votantes– o los que son capaces –desde un escritorio– de desalentar a un pueblo que le dice NO por primera vez, con mucha valentía, a sus verdugos.
Me dijo que él, el ex Presidente Salinas, se autonombró jefe de campaña del TOCAM, del Todos Contra Andrés Manuel. Que operarán a todos los niveles, en distintos grupos. Primero que nadie, convencerán a los empresarios con el discurso del miedo.
La verdadera oportunidad de Zepeda, creo, se encuentra en Morena. Sí, en Morena. No irse a ese partido, ni siquiera caerle bien a Andrés Manuel López Obrador: sumar sus votos a Delfina Gómez.
En el evento en Los Pinos pidió un minuto de silencio. Más de uno pensamos: pues no necesitamos un minuto más de silencio: llevamos cinco años de silencio.
Ricardo Monreal, ¿es fiel a López Obrador? Esa es la pregunta clave.
En 2006, usted recordará, sus muchos enemigos utilizaron todo lo que dijo; le torcieron frases y acomodaron otras para hundirlo. Una de ellas, que es una maravilla (vista a lo lejos), es la frase “cállate chachalaca”. Vicente Fox no sólo era una chachalaca: era un verdadero idiota, ciego, demoliendo las instituciones electorales sin remordimiento. AMLO estalló. No se recuerda que Fox abiertamente hizo campaña ilegal por Felipe Calderón pero sí la “chachalaca” mentada. Lo tentaron, hizo su movida y la usaron en su contra. Así de simple.
En esta galaxia cercana se ve muy difícil que el PRI suelte. Tiene las instituciones electorales en un puño y el tribunal, si es que fallara en su contra, lo hará cuando Del Mazo, hijo de Atlacomulco, ya sea Gobernador.
Javier Duarte y Alfredo del Mazo no imaginaban que caminarían este tramo del sexenio juntos, como si fueran fórmula. El primero esperaba otra cosa, como ya he citado: irse al Gabinete; tenía invitación del Presidente Peña. El segundo soñaba con ingresar simplemente al Palacio de Gobierno de Toluca como su padre, sus amigos y su primo: por la puerta ancha.
Es Osorio. No tengo dudas de que es Osorio quien todo este tiempo ha tenido la oportunidad de, al menos, de poner freno a la descomposición. Pero no lo ha hecho. Allí están los ejemplos.
Y así, si ella se mantiene hasta 2018, la presidencia de Barrales será –aunque no sea del todo su culpa– la de la administración de la tragedia. El próximo año, es probable, por primera vez en su historia irá con un candidato que no es miembro del partido (Mancera) a la contienda Presidencial. Y a partir de allí, si los cálculos no fallan, el PRD empezará a pelear los niveles de votos del Partido Verde, de Nueva Alianza. Y a partir de allí, esa fuerza que aspiró a gobernar México será un satélite de otras: ayudará a cargar el fiel de la balanza, dependiendo quién ofrezca más.
Morena brincará del aperitivo al plato fuerte, luego luego: La ciudad está a punto de cambiar de manos, en poco más de un año. La lógica dice que el PRD dará la batalla con todo para que no llegue Morena. Pero otros me han dado una sorpresa.
La cosa es que, en general, la sociedad mexicana es arrastrada, por desidia o por complicidad, de una manera u otra, a ese mundo de zombis sin voluntad. El objetivo es envolver y mantener en el rezago. Millones son arrastrados por un sistema cuyo principal objetivo es entretener para evitar una transformación. Es un sistema experto en eso. Ha funcionado durante años, décadas así.
Pareciera como si todos se sintieran autorizados; como si todos dijeran, al mismo tiempo: si el mero mero puede salirse con la suya a pesar de los escándalos, ¿por qué yo no?