La actriz relató que acudió a la casa de Roemer en compañía de su hijo y que, tras un recorrido por el domicilio, la llevó a la biblioteca, donde la separó de su hijo y abusó de ella.
Por Miguel Sagnelli
Ciudad de México, 15 de mayo (Vanguardia).- Este jueves surgió una nueva denuncia de agresión sexual contra Andrés Roemer, ahora por parte de la actriz Mariana Peñalva.
Esta agresión ocurrió en 2008 cuando su hijo tenía cuatro años de edad. Peñalva ha señalado en un video, compartido en sus redes sociales, que el ataque por parte de Roemer ocurrió después de una entrevista, cuando Roemer la invitó a una fiesta.
Explicó que asistió a su casa debido a que buscaba inversionistas para un proyecto y él se ofreció a presentarle a más personas que podrían interesarse.
Ella relató que acudió a la casa de Roemer en compañía de su hijo y que, tras un recorrido por el domicilio, la llevó a la biblioteca, donde la separó de su hijo y abusó de ella.
“Durante todos estos años nunca se lo dije a nadie. Me quedé con la culpa”, aseguró la actriz.
En días pasados la FGJ capitalina obtuvo una orden de aprehensión contra el diplomático, en tanto que Periodistas Unidas Mexicanas (PUM) informó que tiene constancia de 31 denuncias por violencia sexual contra Andrés Roemer, así como 5 testimonios de su modus operandi.
De las 31 denuncias por violencia sexual, 29 agresiones ocurrieron en México mientras que las otras dos en San Francisco, California, donde Roemer Slomianski fue cónsul.
Tras la orden de aprehensión contra Andrés Roemer, un grupo de víctimas solicitó ayuda al embajador de Israel en México para facilitar el hallazgo del escritor en dicho país.
Las víctimas urgieron al embajador Zvi Tal a proporcionar información completa sobre el caso al Gobierno de Israel para coadyuvar en la detención de Andrés Roemer, toda vez que se tiene conocimiento de que una mujer tuvo un encuentro desafortunado con el escritor en Tel Aviv.
Precisamente en Israel, Roemer Slomianski fue abordado por un periodista quien lo cuestionó sobre los señalamientos en su contra, a los que el escritor afirmó “no he hecho nada malo” y descartó utilizar su judaísmo para permanecer en el país de Medio Oriente.
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