"Aficionados, directivos, jugadores, árbitros y a toda la gente que formamos parte del Fútbol erradiquemos la violencia y luchemos por el #Respeto #NoMásViolencia", fue el mensaje que la Asociación Mexicana de Árbitros (AMA) compartió a través de su cuenta de Twitter para condenar la agresión a José Valdemar.
¡Atención!
Aficionados, directivos, jugadores, árbitros y a toda la gente que formamos parte del Fútbol erradiquemos la violencia y luchemos por el #Respeto #NoMásViolencia
Q.D.E.P José Valdemar Hernández Capetillo. @PGR_Ver @GobiernoVer pic.twitter.com/gW8gFGIBOZ
— AMA Árbitros (@AMArbitros) 30 de diciembre de 2017
Ciudad de México, 1 de enero (SinEmbargo).- La madrugada del 30 de diciembre, la tragedia se hizo presente en futbol mexicano. El árbitro José Valdemar Hernández Capetrillo falleció luego de ser agredido por un jugador al que amonestó durante un partido celebrado en Xalapa, Veracruz.
Por medio de su cuenta de Twitter, la Asociación Mexicana de Árbitros dio a conocer los hechos a través de un comunicado y condenó que la violencia se haga presente en el futbol.
“Estos hechos debemos erradicarlos del futbol, no podemos seguir permitiendo que se agredan a personas que lo único que hacen es entrar al terreno de juego a impartir justicia".
Por su parte, el Sector Amateur de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) lamentó el fallecimiento de Hernández Capetillo, sin embargo, se deslindó del hecho, porque esta liga no está afiliada en Xalapa
"Tras la información que ha circulado en diversos medios de comunicación y redes sociales acerca del lamentable fallecimiento del árbitro José Valdemar Hernández Capetillo el día 30 de diciembre en la ciudad de Xalapa, Veracruz, el Sector Amateur informa que el encuentro en donde se suscitó la agresión al árbitro en cuestión correspondió a una Liga no afiliada a nuestro organismo"
El árbitro perdió la vida la madrugada del sábado 30 de septiembre, luego de permanecer durante una semana en coma por traumatismo craneoencefálico, derivado del supuesto golpe que recibió de un jugador enardecido.