El reportaje “Sapién, campeón parapanamericano, vive de limosnas”, firmado por la reportera Priscila Hernández Flores, difundida por Medios UdeG en su primera emisión el pasado 23 de noviembre, publicado en internet por Dis-capacidad.com y SinEmbargo.mx, despertó gran interés y causó indignación en la audiencia. Su rápida difusión en redes sociales llamó la atención de otros medios de información los cuales retomaron la historia.
En particular, Publimetro, el diario con ediciones en las principales ciudades de México y el mundo, retomó la historia y la publicó en su versión impresa en primera plana el día 24 de noviembre encabezando con la frase “Del podio a la calle”. Otros medios digitales, nacionales y extranjeros nos comunicaron su interés en conocer más del atleta con discapacidad visual. El video del reportaje fue visto unas 3 mil veces en Youtube y compartido entre usuarios de Twitter y Facebook.
El reportaje dio voz a un atleta ciego, quien ganó plata en los 5 mil metros libres en los recientes Juegos Parapanamericanos Guadalajara 2011, y a quien el gobierno de Jalisco le debía una casa desde 2007 por su doble medalla de oro en los Juegos Parapanamericanos de Río de Janeiro, Brasil.
Habló para Medios UdeG en un crucero de Guadalajara en donde pedía dinero ese día desde las 6 de la mañana. Sabía que la reportera lo grababa y habló en completa libertad de que el Consejo Estatal para el Fomento Deportivo y Apoyo a la Juventud (Code), en el área de deporte adaptado, le debía cinco meses una beca por 4 mil 500 pesos mensuales. Habló también de que sobrevivía con el dinero que le daban en los cruceros y que a veces vendía boletos de una institución para rifas, también para obtener ingresos.
Reacciones y nuevas promesas
El primer efecto de este reportaje fue la reacción del gobernador Emilio González Márquez, quien la misma tarde del día 23 de noviembre recibió en Casa Jalisco a los atletas que participaron en los Juegos Parapanamericanos, reconoció la deuda que tenía con Zapién y públicamente prometió que le entregaría las llaves de una casa en los próximos días. Hizo el anuncio también en su cuenta de Twitter y se tomó una foto abrazando al atleta, que se publicó en la prensa.
Así reportó la comida el diario El Informador: “Festejo para atletas jalicienses”.
“Entrado en conversación con los deportistas, (el gobernador) regaló una casa al deportista con discapacidad visual Luis Fernando Zapién, quien ganó la medalla de plata en los cinco mil metros de atletismo.”
Pero, el 2 de diciembre pasado, El Informador publicó una nota firmada por la Redacción, con el título: “Fernando Zapién aclara problema de falta de apoyo”. En ésta, el atleta se desdice de sus reclamos al Code por el incumplimiento en el pago de la beca y pide perdón por sus declaraciones a Medios UdeG y Dis-capacidad.com. Se lee:
“El atleta Luis Fernando Zapién, quien participó en los Juegos Parapanamericanos Guadalajara 2011, aseguró que la nota que circuló durante la semana pasada en donde se mencionaba que “pedía limosna en las calles” fue un malentendido y pidió disculpas a Code por la “mala interpretación de sus palabras”.
No está claro si se refiere a que la reportera habría malinterpretado sus palabras o si lo había hecho el Code. En todo caso, de lo que sí habló con la reportera Priscila Hernández fue del atraso en el pago de la beca otorgada por el Code en razón de sus resultados en el atletismo paralímpico.
En el desmentido se citan palabras del atleta ofreciendo una disculpa a las autoridades del deporte estatal y nacional diciendo: “Desafortunadamente yo me presté para ser plataforma de esta nota, por eso pido una disculpa a las autoridades del Code, Fomento Deportivo y Conade, si los ofendí les pido que me perdonen”.
¿Pedía limosna o vendía boletos para una rifa?
Cabe puntualizar, que en el reportaje sobre Zapién en ningún momento se menciona a la Conade (Comisión Nacional del Deporte), encabezada por Bernardo de la Garza. Si recibe o no algún beneficio económico de la instancia federal, no era el tema del reportaje.
Para sostener la versión del malentendido, en la supuesta disculpa se necesitaba explicar por qué el atleta estaba en un crucero y qué hacía ahí. La nota de El Informador lo resuelve así:
“El atleta explicó que todo empezó debido a que fue visto vendiendo boletos en un crucero, mismos que aseguró ha vendido durante toda su vida para ayudar a la agrupación Débiles Visuales AC de Jalisco, a la cual pertenece.”
Es decir, que según esta versión de El Informador, Luis Fernando vende boletos para rifas con el fin de ayudar a otros, no a sí mismo.
Sin embargo, para el reportaje, él nos habló de los boletos aunque en términos muy distintos, afirmando que la venta le sirvió para solventar gastos. Y que cuando no vende lo suficiente, la expresión que usó fue “pido apoyo”.
En la nota de El Informador se establece que la presencia de Luis Fernando en la calle se debió a un montaje del medio, pero no se explica cómo obtiene ingresos para sí mismo.
En contraste, a la reportera se lo dijo claramente: “No gano dinero si no vengo, como no trabajé en todos los Parapanamericanos me quedé desfalcado y tengo que venir para tener para mañana porque hay que comer, eso es de diario”.
En la nota del diario es el atleta Zapién quien aclara que lo suyo es un “problema de la falta de apoyo”, cuando la lógica indica que la explicación debía darla la institución que incurrió en ese retraso en el pago.
El Informador cita al atleta: “Muchas veces nos agarra el sentimiento del enojo y decimos las cosas sin pensar, y sobre todo nos prestamos a estos juegos sin saber hasta dónde se puede agrandar. A veces cuando estamos afuera criticamos sin saber qué es lo que pasa dentro de la institución, yo estaba molesto y no me puse a pensar que se atravesaron los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos, que fue lo que lo retuvo (el pago). Muchas veces nosotros como deportistas no conocemos los problemas que realmente trae la institución, somos muy buenos para hablar y criticar”.
Esto es, por lo menos, ilógico y agrede la inteligencia del propio Luis Fernando. Evidentemente a alguien en las altas esferas del deporte le incomodó el reportaje y la denuncia sobre la falta de apoyos para entrenar.
Priscila Hernández buscó también al señor Edgar Fernando Cortés, responsable del área de Deporte Adaptado del Code Jalisco, como parte del seguimiento a este reportaje. El funcionario reconoció que hubo retraso en el pago de becas porque la institución enfrentó una situación económica difícil a causa de los gastos por la organización de los Juegos Parapanamericanos y pidió la comprensión de atletas, quienes le habrían dicho que contaban con apoyos de familias, de municipios, de becas de Conade.
Por su parte, El Informador cita a Zapién diciendo: “Somos muy buenos para hablar y criticar”, una frase que es común en voz de funcionarios que enfrentan así los cuestionamientos de la opinión pública, pero no en el ciudadano común que no tendría por qué saber ni comprender las dificultades económicas que enfrenta una institución.
El diario destaca también la mención de que Luis Fernando Zapién “se enfocará en ganar su pase a los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, mismos que podrían ser los últimos de su carrera”.
Si el gobernador González Márquez ya había sorteado el compromiso con Zapién al haber recordado públicamente su palabra empeñada y anunciado que en los próximos días le entregaría la casa o el departamento prometido, no le hacía falta escuchar a Luis Fernando negar sus propios dichos y acusando a la reportera de haber malinterpretado la información para otros fines.
Por ello nos preguntamos: ¿Quién sí necesitaba de esta aclaración? Alguien tiene la piel muy sensible ante las exigencias legítimas de gente que, como en el caso de Luis Fernando Zapién, tiene como mayor anhelo ir a Londres en 2012.
La fotografía en la nota del diario jalisciense muestra a Luis Fernando sujetando su medalla de plata, y se aprecia que fue tomada en las oficinas del Code, donde se hizo la entrevista, lo cual se reconoce por la habitación en la que fue tomada. ¿Quién lo citó en esa oficina?
Nuestro abordaje sobre los temas que tienen qué ver con la situación de las personas con discapacidad en México y en países de habla hispana se hace desde el respeto a quienes reconocemos como sujetos de derechos, derechos exigibles, por supuesto. Y en ese sentido, volteamos a ver a las autoridades del Estado obligadas a hacer cumplir esos derechos.
No estamos interesados en golpear con nuestro trabajo periodístico a personajes públicos o funcionarios de cualquier nivel y por elemental ética respetamos a nuestros entrevistados por lo que son, no los “usamos” ni los manipulamos como si fueran personas sin inteligencia ni voluntad. Sobre todo, respetamos la inteligencia del público al que ofrecemos nuestro trabajo.
Vale decir que a partir de este reportaje, otros atletas se acercaron a nosotros para confiarnos que estaban enfrentando condiciones similares de falta de respaldo de instituciones para desarrollarse como representantes del deporte adaptado, pero ahora temen decirlo públicamente.
Nos damos cuenta de que el efecto para Zapién, por haber exigido lo que le corresponde, es una maniobra para acallarlo.
Ahora, el riesgo que corre no es menor, podría ser excluido de participar en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 si insiste en sus quejas. Dado que no está en nuestro interés afectarlo en modo alguno.
Esperamos que él y todos los atletas con discapacidad realmente cuenten con los apoyos económicos necesarios y merecidos para ejercer su derecho a practicar un deporte y participar en competencias del más alto nivel, pero sobre todo, que puedan hacerlo en condiciones de igualdad y de dignidad.