En recientes declaraciones a la prensa, el nuevo Primer Ministro de Canadá, Mark Carney, señaló a Estados Unidos de impulsar algunas iniciativas que ponen en riesgo el T-MEC. Asimismo, expresó que debe haber una conversación más amplia con Washington para abordar la relación comercial entre ambas naciones.
Ciudad de México, 19 de marzo (SinEmbargo).– El acuerdo comercial firmado en 2018 entre México, Canadá y Estados Unidos está en un hilo. Al menos una de las partes pide una “conversación más amplia” con Washington para ver hacia dónde van juntos, dijo ayer el Primer Ministro Mark Carney, Mientras, la prensa canadiense informó hoy de los primeros resultados del bloqueo a los productos estadounidenses. Las empresas del vecino lo habrán sentido ya en sus cajas porque, dicen, el boicot resultó.
El nuevo Primer Ministro fue cuestionado ayer si compartía con su predecesor, Justin Trudeau, la idea de que Donald Trump ataca Canadá para causar “un colapso total de la economía canadiense, ya que eso facilitará su anexión”. Carney se negó a responder directamente a la pregunta de la prensa. “Quiere poner fin a la crisis del fentanilo en Estados Unidos. Lo respeto. Quiere empleos buenos y bien remunerados en Estados Unidos. Quiere más inversión en Estados Unidos. Quiere la repatriación de muchas industrias y empresas estadounidenses a Estados Unidos. Y lo respeto plenamente”, dijo.
Pero, agregó, “hay una serie de iniciativas comerciales de Estados Unidos que han puesto en tela de juicio la validez del T-MEC. Eso significa que deberíamos tener una conversación más amplia con Estados Unidos sobre nuestra relación comercial, que también incluye una conversación sobre nuestra relación en materia de seguridad. Por lo tanto, no me interesa reaccionar a cada iniciativa [...]; queremos tener esa conversación más amplia”.
El boicot
Los operadores turísticos estadounidenses reportan descensos en las reservas de canadienses hasta un 85 por ciento. Las destilerías estadounidenses están perdiendo contratos con Canadá. Los supermercados canadienses registran un aumento de hasta un 10 por ciento en las ventas de productos nacionales. ¿Entonces el boicot a los productos canadienses resultó? Sí, medianamente sí.
Un operador de la Asociación Nacional de Viajes (NTA) reportó sólo dos reservas para viajes a Estados Unidos en las últimas dos semanas, en comparación con las 39 reservas durante el mismo período de 2024, agregó. Otro operador canadiense, con el 85 por ciento de su negocio centrado en viajes a Estados Unidos, tuvo que cancelar todas sus salidas a ese país en marzo, abril y mayo debido a cancelaciones de clientes.
Según The Globe and Mail, diario canadiense, el tráfico en algunos cruces fronterizos importantes con Estados Unidos, en estados turísticos como Nueva York, se ha reducido 12 por ciento sólo en las dos primeras semanas de febrero.
Los aranceles
The National Post dice hoy que las guerras comerciales de Trump “han empobrecido a gran parte del mundo occidental, siendo las economías de Canadá y Estados Unidos entre las más afectadas”. Cita el último análisis de la OCDE, una de las primeras investigaciones importantes sobre el impacto de los aranceles en la economía mundial.
En diciembre, justo antes del inicio de la guerra comercial, las previsiones de la OCDE para Canadá y Estados Unidos eran, de hecho, comparativamente optimistas. Se preveía que el PIB de Canadá creciera un 2 por ciento en 2025, y el de Estados Unidos se encaminaba a un crecimiento del 2.4 por ciento. Estas previsiones se han revisado al 0.7 por ciento y al 2.2 por ciento, respectivamente; ambas revisiones se deben casi en su totalidad a la guerra comercial.
Considerando que el PIB canadiense era de aproximadamente tres billones de dólares para 2024, esto representa una pérdida neta de unos 40 mil millones de dólares. Dicho de otro modo, está lastrando la economía canadiense en unos 100 millones de dólares al día. El impacto general en el crecimiento del PIB estadounidense es obviamente menor, pero dado el enorme tamaño de la economía estadounidense, representa una cantidad mucho mayor de riqueza total.
Con un PIB estadounidense de aproximadamente 29 billones de dólares estadounidenses para 2024, ese 0.2 por ciento de pérdida de crecimiento representa unos 58 mil millones de dólares estadounidenses (unos 83 mil millones de dólares canadienses). Sin embargo, esto no se debe exclusivamente a la guerra comercial con Canadá. La economía estadounidense también se ve perjudicada por los aranceles que la Casa Blanca de Trump está imponiendo a México y China, y se amenaza con imponer aranceles a la UE, Dinamarca, Australia y otros países.