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Dime que no es cierto, una novela de venganzas, celos y la pérdida de certezas

15/12/2023 - 12:00 am

Francisco Martín Moreno habló sobre su primera novela de ficción pura que deja de lado la historia y la política. Una historia sobre las pasiones desbordadas, venganzas y el infierno de los celos.

Ciudad de México, 22 de diciembre (SinEmbargo).– El escritor Francisco Martín Moreno se ha olvidado por un momento de la política y la historia, temas que suelen estar presentes en la mayoría de su obra, para centrarse en la ficción con su novela Dime que no es cierto (Alfaguara), un texto que parte de la certezas que tienen algunos personajes sobre distintas situaciones y sobre cómo van perdiendo cada una ellas al momento de que el propio protagonista se cuestiona qué es lo que hay detrás de cada una.

La novela versa sobre la vida de Alonso Roel, un magnate, ”un hombre solvente moralmente, psicológicamente, incluso emocionalmente” a quien su amigo convence de visitar a una bruja para que le lea la suerte cuando él no cree en eso. “Acepta ir y le dice la bruja al leerle el Tarot ‘mijito, tu mujer te engaña con otro hombre’ y a partir de ese momento la seguridad desaparece, el ánimo desaparece y está completamente confundido, pide una segunda opinión y le confirma lo mismo”, ahondó el autor en entrevista.

“Ves cómo la descomposición es verdaderamente brutal, algo parecido a lo que ocurría en la obra de Shakespeare, en Otelo, cuando Otelo sin tener la evidencia de que Desdémona lo engañaba con otro hombre, la asfixia, la estrangula, la mata y luego se da cuenta que todavía ha sido producto de una intriga y Otelo se suicida. Los celos pueden jugar un papel muy depredador, destructivo y es lo que le ocurre a este magnate que se vuelve absolutamente loco cuando le dicen que su mujer lo engaña y él pierde toda seguridad y toda certeza en su persona”, expresó.

En la novela, indicó Francisco Martín Moreno, el multimillonario Alonso Roel llega un momento clave en el que se cuestiona a sí mismo al notar que una vez que llegó a la cima del capital no hay nada y habla sobre ello con su hijo. “‘No hay nada porque con todo el dinero del mundo yo no puedo comprar la juventud, tengo 70 años, con todo el dinero del mundo yo no puedo comprar la lealtad, yo no puedo comprar la salud, yo no puedo comprar la felicidad, ¿entonces de qué me sirvió el dinero?’”

Para el autor ese es el gran cuestionamiento: de qué se trata todo esto de vivir, quién tiene las claves para saber cómo vivir. “¿un monje tibetano que vive ahí en las montañas, un cura, un poeta o un escritor, un literato o un músico o un filósofo? entonces cada quien tiene que saber de qué se trata todo esto de vivir. Esos son los cuestionamientos en los que cae mi personaje Alonso Roel”.

En la historia también hay un constante juego de máscaras que permite a uno de alguna manera entender que no necesariamente se conoce a quienes están a nuestro alrededor. En ese sentido, Francisco Martín Moreno menciona que es un baile de máscaras “porque nunca sabes la realidad de la gente que se te acerca qué es lo que realmente quiere y como empresario de esos tamaños siempre piensas que quien se te acerca, se te acerca con un objetivo oculto e inconfesable”.

Francisco Martín Moreno es uno de los autores más leídos de México. Foto: Francisco Cañedo, SinEmbargo

Con respecto a la presencia del esoterismo en su escrito, Francisco Martín Moreno señaló que fue el primer desafío porque él no cree en las cartomancianas, ni en las videntes, “pero por otro lado veo cómo el Presidente Reagan de los Estados Unidos dependía de una vidente que lo iba a haber dos veces por semana, igual que el Presidente Bush, igual que el Presidente López Portillo o sea necesitaban la comparecencia de estas personas y era entrar en un terreno desconocido porque la realidad de las cosas es que estas personas de alguna manera en ocasiones aciertan y hacen afirmaciones verdaderamente sorprendentes”.

“Te pueden cambiar la vida, te pueden mover todo, porque si crees en ello te pueden conmover e impresionar y de alguna manera desequilibrar como le pasa a mi personaje”, compartió. “Fue un giro espectacular en mi carrera que me puso a prueba en muchas ocasiones y me costó muchísimo trabajo, pero al mismo tiempo me distraje, me divertí, aprendí mucho de mí y eso sí, aprendí mucho de mí y sobre todo fue un un regocijo y un caramelito que quiero regalárselo también a los lectores”.

Obed Rosas
Es licenciado en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón de la UNAM. Estudió, además, Lengua y Literatura Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras.
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