Cuiden a Maya es un documental original de Netflix, que a pesar de desarrollarse en Estados Unidos, ha causado impacto entre los espectadores de todo el mundo debido a la falta de justicia y la negligencia por parte de las autoridades de ese país provocando en este caso un desenlace fatal.
Ciudad de México, 00 de julio (SinEmbargo).- «Nosotros como padres tratamos de hacer lo mejor que podemos por nuestros hijos. Haces todo por ellos, eso es lo que hicimos Beata y yo. Pero no hay nadie que pudiera prepararme para lo que pasé con mi familia».
Jack Kowalski, el padre de Maya y esposo de Beata, se sienta frente a la cámara y es contundente al expresar estas palabras porque han pasado siete años de la tragedia que marcó a su familia y aún no hay justicia por un hecho que pudo haberse evitado.
Su historia no es única, es la de cientos familias en Estados Unidos que claman justicia y que parecen ser silenciadas por el sistema de ese país. Ahora el documental Cuiden a Maya (Take care of Maya) trata de exponer ese hoyo de ilegalidad y abuso en busca de respuestas y acciones.
EL CASO
Los Kowalski, una familia acomodada y oriunda de Florida, al sureste de Estados Unidos, vio el inicio de su calvario en el verano de 2015, cuando la salud de Maya, su primera hija, se deterioró cuando sólo tenía nueve años de edad.
De un momento a otro, Maya empezó a experimentar tormentosos dolores en la cabeza y en todo el cuerpo que provocaban que sus extremidades se retorcieran, se lesionaran y ya no tuviera control sobre ellas. Beata, su madre y enfermera de oficio, no dudó un sólo momento en el llanto de su hija a la que llevó al hospital para que trataran su dolor.
Cuando Maya Kowalski fue admitida en un hospital a los 10 años, nada pudo haber preparado a su familia para lo que iba a pasar. 'Cuiden a Maya' ya disponible en Netflix. pic.twitter.com/bhHSerJyWp
— Netflix Latinoamérica (@NetflixLAT) July 6, 2023
Sin embargo, aquel tormento no parecía tener respuestas. Médico tras médico no encontraba la raíz que ocasionaba ese dolor permanente en ella. pero ni Beata ni Jack se dieron por vencidos, y así dieron con el farmacólogo Anthony Kirkpatrick, especialista que diagnosticó a Maya con el Síndrome de Dolor Regional Complejo (SDRC), un conjunto de síntomas que incluyen dolor espontáneo, crónico y debilitante, atrofia muscular y deterioro del movimiento y que se presenta con mayor frecuencia en niñas.
El complejo tratamiento que consistía, sobre todo, en una dosis de Ketamina, un analgésico también conocido por ser de uso veterinario y que a altas dosis causa intoxicación y alucinaciones, devolvió a Maya su tranquilidad después de meses de haber tenido que abandonar la escuela y de dejar de jugar con su hermano menor, Kyle.
Todo parecía ir mejor. Jack, siendo un bombero jubilado, era testigo de cómo la alegría había vuelto a sus familia, al menos por un tiempo. Pues al año, en 2016, los síntomas regresaron súbitamente más fuertes que nunca y ahí inició el verdadero dolor para la familia.
En 2016, la vida de una familia cambió por completo. Maya fue trasladada de urgencia al Hospital Johns Hopkins en San Petersburgo, Florida. Los médicos estaban alarmados por el uso Ketamina en la menor, y entonces, se encendieron las alertas.
Beata, una madre devota, parecía de pronto ser la principal culpable del estado de salud de su hija y fue señalada de provocar en su hija el síndrome de Munchausen, un trastorno mental en el que una persona simula o provoca signos y síntomas físicos o psicológicos de una enfermedad sobre otra.
La Dra. Sally Smith, directora médica del equipo de protección infantil del condado, intervino en el caso y acusó a la madre de abusar médicamente de su hija. Ella ya no tenía permitido acercarse a Maya mientras la investigación llevaba su curso, a pesar de la insistencia de madre por el cuidado de su hija y por demostrarles cada uno de los registros que llevaba desde que inició la enfermedad.
Una llamada era lo único permitido, y sólo podría realizarse en presencia de la Dra. Smith. No habría visitas. El tratamiento lo decidiría el hospital. Y Maya sólo contaría con la compañía del personal médico, pues ya estaba bajo la tutela del Estado.
La indicación en la que el Estado obligó a Beata a estar lejos de su hija por meses tuvo una consecuencia mortal.
ESPERAN RESPUESTA FAVORABLE
Cuiden a Maya, del cineasta debutante Henry Roosevelt, intenta desentrañar lo que les sucedió a los Kowalski tras las medidas utilizadas por el sistema de salud infantil de Estados Unidos y las consecuencias mortales que tuvo en la familia.
El documental cuenta con el apoyo de los registros que hizo Beata durante todo este proceso, cada movimiento e indicación quedaron documentados gracias a las lecciones que había aprendido como enfermera. Grabaciones, mensajes y videos forman parte del material con el que este documental sostiene el testimonio de los Kowalski.
La historia de esta familia se dio conocer por el reportaje de la periodista Dyan Neary para el medio estadounidense The Cut en octubre de 2022 titulado «¿Qué está pasando con Maya?», en el que expuso todo el proceso que enfrentó la familia que ahora también mantiene una demanda legal en contra de la Dra. Sally Smith.
No obstante, Smith ha defendido sus evaluaciones diciendo: «No soy una persona horrible cuyo objetivo en la vida sea perturbar a las familias. He pasado mi vida adulta intentando servir a los niños de mi comunidad para mejorar las condiciones de abuso y abandono. Me gustaría que nuestra sociedad hiciera más para ayudar a las familias con dificultades a proporcionar hogares seguros y acogedores a sus hijos. No soy un gran partidario de los enfoques punitivos para esas familias, contrariamente a las imágenes que los medios de comunicación dan de mí» para el mismo The Cut.
Smith suma ya 12 denuncias en su contra por parte de familias que la acusan de abuso de la autoridad, ante ellos, la doctora sólo se ha limitado a desestimar dichas acusaciones alegando que son «un porcentaje bastante pequeño» al lado de los aproximadamente 3 mil casos que ha abordado.
La última actualización del caso no ha sido a favor de los Kowalski, ahora con el alcance de este documental se busca que más familias se unan al llamado y el suceso llegue a los tribunales para cambiar los procedimientos que atentan contra la integridad de las familias que sólo buscan la salud de los menores.