La iniciativa propuesta en el Congreso de la Ciudad de México tiene el objetivo de que la violencia vicaria sea reconocida en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y con ello tomar acciones para combatirla, ya que la misma, enfatiza, vulnera “los derechos humanos de las mujeres y el interés superior de la niñez”.
Ciudad de México, 28 de noviembre (SinEmbargo).- La Ciudad de México está en camino de convertirse en la décima entidad en reconocer la violencia vicaria, misma que se ejerce en contra, principalmente, de los hijos o hijas de una mujer con la finalidad de dañar a ésta, luego de que el pasado miércoles 23 de noviembre la Comisión de Igualdad del Congreso Capitalino aprobó una iniciativa con la que se busca incluir esta modalidad de violencia en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La iniciativa que propuso Ana Francis López Bayghen Patiño, Diputada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México, el pasado 10 de octubre, tiene el objetivo de que la violencia vicaria sea reconocida en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y con ello tomar acciones para combatirla, ya que la misma, enfatiza, vulnera “los derechos humanos de las mujeres y el interés superior de la niñez”.
Hasta el momento, la violencia vicaria ya ha sido reconocida en nueve estados de la república mexicana: Baja California Sur, Colima, Sinaloa, Estado de México, San Luis Potosí, Zacatecas, Hidalgo, Puebla y Yucatán. Además, se ha propuesto que sea tipificada en otras 24 entidades, incluida la Ciudad de México, en cuya iniciativa se enfatizó que se trata de una “Violencia que se ejerce sobre los hijos para herir a la mujer”.
“Es una violencia secundaria a la víctima principal, que es la mujer. Es a la mujer a la que se quiere dañar y el daño se hace a través de terceros, por interpósita persona. El maltratador sabe que dañar, asesinar a los hijos/hijas, es asegurarse de que la mujer no se recuperará jamás. Es el daño extremo”, se explica en la propuesta de reforma.
En entrevista con SinEmbargo, la Diputada local Ana Francis habló sobre la propuesta de reforma, así como de la eventual aprobación de la misma, ya que consideró como probable que se avale en el pleno del Congreso capitalino, debido a que, explicó, “el proceso de presentación y algo del proceso de dictaminación ha sido muy acompañado por todos los grupos parlamentarios”.
Asimismo, destacó que existe “un compromiso que hicimos todas las mujeres del Congreso, que somos 36, somos mayoría de acompañar este proceso de la violencia vicaria, hemos hecho, digamos, un compromiso al interior y un compromiso con las organizaciones de la sociedad civil, que fueron quienes se acercaron a nosotras para solicitar estas reformas”, dijo la legisladora morenista.
Francis destacó la importancia de que la violencia vicaria sea colocada en “el Código Penal, colocarla en el Código Civil familiar, ir cambiando las siguientes leyes que se tiene que cambiar, como un efecto dominó, digamos, la primer cosa que ya se aprobó, que es la única que depende solamente de la Comisión de Igualdad, donde yo presido, y donde de nuestra parte depende la dictaminación, es esa. Esto justo es muy positivo porque ya nos permite que esté colocado y de esa manera poder nombrar un tipo de violencia que hasta este momento no ha estado nombrado en la ley de la Ciudad de México”, dijo.
Aunque en la iniciativa de reforma se explicó que el concepto de violencia vicaria, que se estableció desde 2012 por la psicóloga Sonia Vaccaro, también considera los posibles daños que un agresor puede ocasionar contra personas que sostengan una relación afectiva o que sean significativas contra la mujer [no sólo los hijos], por ejemplo, contra los padres o hermanos de esta, por lo que las probables víctimas no sólo serían los hijos o hijas de la mujer, aún no hay cifras que evidencien la magnitud del problema.
Al respecto, la Diputada local por Morena explicó que esto sucede precisamente porque no se ha establecido la tipificación de este delito en las leyes correspondientes. “No tenemos cifras, justo porque al no existir conceptualmente no está contada, lo que sí te puedo decir es que hay una cantidad importante de casos de violencia familiar y que la violencia familiar ha ido en aumento”, subrayó.
“Digamos que no tenemos cifras de violencia vicaria porque justo a penas ahora, si todo sale bien, el martes sube al pleno y de vota y pasa la reforma, entonces ya estará nombrada la violencia vicaria, entonces ya la gente, las personas, las mujeres, a la hora que denuncien, ya podrán denunciar, por las cosas que denuncien y también por violencia vicaria”, agregó.
Datos recogidos por el Frente Nacional, y retomados por la reportera Montserrat Antúnez Estrada para la investigación periodística titulada Mujeres luchan por sancionar la violencia vicaria, que ya es reconocida en 9 estados que se publicó en SinEmbargo, señalan que otras características de esta violencia son que los agresores buscan dañar la imagen de las mujeres frente a sus hijas e hijos y las amenazan con nunca volver a verlos, además de promover procesos legales que dilatan, todo esto con la intención de “romper el vínculo materno filial”.
Una encuesta de esta misma organización realizada a dos mil 231 mujeres de todo el país y presentada en mayo de este año reveló que en 80 por ciento de los casos, las víctimas de violencia vicaria fueron separadas de sus hijos e hijas de una forma inesperada con previas amenazas y se les impidió contactarlos. Además, los datos muestran que los procesos penales y civiles que los agresores inician contra ella tardan en promedio entre uno y 1.5 años, tiempo en están separadas de sus hijos.
La propuesta para reconocer este tipo de violencia en la Ciudad de México recordó que decenas de mujeres protestaron en la capital mexicana el pasado 11 de mayo, un día después de la conmemoración del Día de las Madres en México, en contra de la violencia vicaria, manifestación que tuvo lugar a las afueras de los juzgados familiares del Tribunal Superior de Justicia capitalino, en la que señalaron que este tipo de agresiones no sólo responsabilidad de sus exparejas, también del sistema judicial al que acusaron de cómplice.
Alrededor de las 13:00 horas, las manifestantes gritaron consignas, hicieron pase de lista con los nombres de sus hijos, quienes, aseguraron, fueron sustraídos por sus respectivas exparejas, por lo que en carteles también señalaron los días que han estado alejados de sus pequeños, situación ante la que exigieron justicia.
Por ello, la iniciativa de reforma propone incluir en el Artículo 6 de la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en la que se abordan los tipos de violencia contra las mujeres, a la violencia vicaria, a la que se define de la siguiente manera:
“XI. Violencia Vicaria: es la acción u omisión cometida por quien tenga o haya tenido una relación de matrimonio, concubinato o haya mantenido una relación de hecho, en la cual existan hijas e hijos entre ambas personas y, que al enfrentarse a un divorcio o separación provoque la sustracción, ocultamiento o retención de las hijas e hijos para impedir la convivencia con la madre utilizando mecanismos jurídicos y no jurídicos que retrasen, obstaculicen, limiten e impidan el pronunciamiento de resoluciones judiciales en favor de las mujeres y atendiendo al interés superior de la niñez causando un trauma psicológico irreparable e incluso el suicidio a las madres y a sus hijas e hijos, así como desencadenar en el feminicidio u homicidio de las hijas e hijos perpetrados por su progenitor”, se indica en la propuesta.
“Este tipo de violencia puede cometerse por sí o a través de una tercera persona, y es particularmente grave cuando se ejerce por familiares o personas con relación afectiva de quien comete este tipo de violencia. Es particularmente grave cuando las instituciones destinadas a la atención y acceso a la justicia, al no reconocerla, emiten determinaciones, resoluciones y sentencias sin perspectiva de género, vulnerando derechos humanos de las mujeres y el interés superior de la niñez”, concluye la iniciativa de reforma, misma que ya fue discutida y aprobada el pasado miércoles 23 de noviembre por la Comisión de Igualdad del Congreso de la Ciudad de México.
Apenas el pasado 24 de octubre, en el estado de Puebla, en donde ya está tipificada la violencia vicaria, se logró la primer vinculación a proceso penal por este delito contra un sujeto identificado como Ricardo “N”, quien sustrajo a su hijo desde hace seis años y lo mantuvo sin contacto con su madre, identificada como Andrea Lezama, vicepresidenta de la colectiva Cam Cai.
De acuerdo con la investigación periodística de la reportera Paola Macuitl Gallardo para el medio Ambas Manos, el caso de Andrea es como muchos otros, ya que el padre de su hijo lo sustrajo y lo llevó a vivir a Baja California Sur, en contubernio con su familia, y pese a que la víctima denunció el hecho, se enfrentó a la omisión de las autoridades de Baja California y de Puebla, además de que sufrió revictimización por parte de estas instituciones de justicia.
Desde el pasado 3 de agosto, en Puebla, la violencia vicaria se castiga con hasta 10 años y 8 meses de prisión y una multa de hasta 25 mil 594 pesos, luego de que en el Congreso se propusiera y aprobara la iniciativa llamada Ley Vicaria, con el propósito de reconocer el tipo de violencia ejercida por las personas que usan a sus hijos para dañar a su pareja o a la madre de los menores.
Pero a pesar de que ya vincularon a proceso al agresor, Andrea expresó que teme por su seguridad y la de su hijo, por lo que al término de la audiencia inicial en la que se realizó la vinculación por violencia vicaria, solicitó que la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) brinde las medidas de protección necesarias para el menor y la de ella.
No tengo palabras en este momento para expresarles cómo me siento, simplemente quiero agradecerles infinitamente por todo el apoyo ✨🙏🏻💜#ContraLaViolenciaVicaria#ViolenciaVicaria pic.twitter.com/frJtqGMbxV
— Andy Lezz (@LezzAndy) October 24, 2022
En el caso de la Ciudad de México, el pasado martes 22 de noviembre, a un día que se discutiera en comisiones Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en el Congreso capitalino, la Jefa de Gobierno local, Claudia Sheinbaum, adelantó que la iniciativa de reforma tiene todo el apoyo de su Administración.
“Es una ley que han estado trabajando con Ana Francis en el Congreso de la Ciudad de México, está ya por dictaminarse y tiene todo el apoyo de la Jefatura de Gobierno para iniciar esta modificación a la Ley de Violencia contra las Mujeres, posteriormente ir ampliando todo lo que significan los derechos de las mujeres en la Ciudad”, comentó en conferencia de prensa.
Por su parte, Ana Francis López Bayghen Patiño, Diputada por el partido Morena en el Congreso capitalino, adelantó que, tras la discusión y aprobación de la propuesta en comisión, que se llevó a cabo este miércoles 23 de noviembre, la iniciativa de reforma pasará al pleno la próxima semana.
“La importancia de esta iniciativa es que se reconoce la Violencia Vicaria como una violencia de género y cómo vulnera el derecho de las mujeres y de las infancias a vivir una vida libre de violencia. Después seguirá colocarla en Código Penal, colocarla en Código Familiar, etcétera, pero son –digamos–, los siguientes pasos, lo que es muy importante ahora es este inicio y que le demos seguimiento entre todas y todos”, explicó la legisladora morenista.
A inicios del mes de octubre, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) también reconoció la gravedad de estas agresiones. En un foro realizado el 11 de octubre, el Ministro presidente Arturo Zaldívar llamó a los juzgadores a reconocer la responsabilidad que tienen en estos casos.
“La violencia vicaria requiere muchos cambios, requiere nuevas leyes procesales, requerimos revolucionar totalmente los procesos familiares, también requerimos cambiar la mentalidad de las juezas y los jueces para que juzguen con perspectiva de género, para que sepan cómo interpretar los testimonios de las niños y los niños, y en todo eso hay criterios de la Primera Sala de la Corte que lamentablemente muchos no se siguen por muchas fallas estructurales”, expuso el Ministro.
En este sentido, la Diputada Ana Francis consideró que la iniciativa que se presentó en el Congreso capitalino “sienta un precedente en varios sentidos”, debido a que “por un lado se coloca en la ley de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia como tipo de violencia” y por el otro, la metodología de dictaminación se realizó en conjunto con diversas dependencias que serán las encargadas de aplicarla tras su eventual aprobación.
“La hicimos de la mano con Fiscalía, con Tribunal y con Secretaría de la Mujeres, es decir, con quienes la van a poner en práctica, esto es muy bueno porque desde un principio les dijimos ‘de nada nos sirve pasar una ley, si ustedes no van a poder aplicar, entonces necesitamos, primero, discutir, escuchar a las organizaciones, analizar, estudiar, conversar, para entender colectivamente qué es la violencia vicaria y por qué es necesario nombrarla y diferenciarla de las otras violencias’”, explicó.
La legisladora morenista consideró que para combatir este tipo de violencia es necesario “en principio, conocerla, nombrarla”. Asimismo, exhortó a las mujeres que son víctimas de este delito a solicitar ayuda, ya que, al menos en la Ciudad de México existen varios programas y medios para apoyar a las mujeres, como son la Línea SOS Mujeres atiende casos de violencia, varios centros de atención llamados Lunas e incluso apoyos económicos.
“En la Ciudad de México existe la línea de atención *765 que es básicamente un 911 especial para las mujeres, en donde te van a atender operadoras especializadas, justamente en atender la violencia. Estas operadoras están capacitadas para, en determinado caso, escucharte, si eso es solamente lo que necesitas, o canalizarse, o mandarte una patrulla”, comentó.
“En la Luna te van acompañando, para acompañar a una mujer en situación de violencia es importante entender que no es ayuda de un día, que es un apoyo y una ayuda continuada, para muchas mujeres que de pronto se ven en el espejo con el ojo morado, no están entendiendo necesariamente qué pasó, ni a qué hora pasó, ni por qué llegamos a esto, y quizás lo primero que necesitan es acompañarlas a salir de ese shock”, ahondó.
Este acompañamiento, explicó, es porque muchas veces las víctimas no saben que lo que están viviendo es violencia. “No necesariamente piensan que es violencia, es decir, a lo mejor lo identifican como un mal momento de tipo, como un mal día, como una mala circunstancia, como un accidente que no va a volver a pasar, es un proceso”, debido a que, agregó, “cuesta trabajo identificar a las personas que amas y que te aman como agresores, cuesta mucho trabajo, es un cambio cultural. Para este acompañamiento se necesita una atención especializada y las lunas son justamente ese espacio de atención especializada”.
- Con información de Montserrat Antúnez Estrada